Ahora bien, el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, hay libertad.
(2 Corintios 3:17)Pero todos nosotros, con el rostro descubierto, contemplando como en un espejo la gloria del Señor, estamos siendo transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Señor, el Espíritu.
(2 Corintios 3:18)Por tanto, puesto que tenemos este ministerio, según hemos recibido misericordia, no desfallecemos.
(2 Corintios 4:1)Más bien hemos renunciado a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino que, mediante la manifestación de la verdad, nos recomendamos a la conciencia de todo hombre en la presencia de Dios.
Y si todavía nuestro evangelio está velado, para los que se pierden está velado,
(2 Corintios 4:3)en los cuales el dios de este mundo ha cegado el entendimiento (la mente) de los incrédulos, para que no vean el resplandor del evangelio de la gloria de Cristo, que es la imagen de Dios.
(2 Corintios 4:4)Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús como Señor, y a nosotros como siervos de ustedes por amor de Jesús.
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2 Corintios 4:2 - Referencia Cruzada
¿Qué fruto tenían entonces en aquellas cosas de las cuales ahora se avergüenzan? Porque el fin de esas cosas es muerte.
(Romanos 6:21)Entonces ya no seremos niños, sacudidos por las olas y llevados de aquí para allá por todo viento de doctrina, por la astucia de los hombres, por las artimañas engañosas del error.
(Efesios 4:14)Por tanto, conociendo el temor del Señor, persuadimos a los hombres, pero a Dios somos manifiestos, y espero que también seamos manifiestos en las conciencias de ustedes.
(2 Corintios 5:11)Pues no somos como muchos, que comercian (corrompen) la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, hablamos en Cristo delante de Dios.
(2 Corintios 2:17)Pero temo que, así como la serpiente con su astucia engañó a Eva, las mentes de ustedes sean desviadas de la sencillez y pureza de la devoción a Cristo.
(2 Corintios 11:3)Pues nuestra exhortación no procede de error ni de impureza ni es con engaño,
(1 Tesalonicenses 2:3)Por tanto, no juzguen antes de tiempo, sino esperen hasta que el Señor venga, el cual sacará a la luz las cosas ocultas en las tinieblas y también pondrá de manifiesto los designios de los corazones. Entonces cada uno recibirá de parte de Dios la alabanza que le corresponda.
(1 Corintios 4:5)Porque nuestra satisfacción es ésta: el testimonio de nuestra conciencia que en la santidad y en la sinceridad que viene de Dios, no en sabiduría carnal sino en la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo y especialmente hacia ustedes.
(2 Corintios 1:12)Pues en todo nos recomendamos a nosotros mismos como ministros (servidores) de Dios, en mucha perseverancia, en aflicciones, en privaciones, en angustias,
(2 Corintios 6:4)Porque si en algo me he jactado con él acerca de ustedes, no fui avergonzado, sino que así como les hemos dicho todo con verdad, también nuestra jactancia ante Tito resultó ser la verdad.
(2 Corintios 7:14)Pero aunque yo sea torpe en el hablar, no lo soy en el conocimiento; de hecho, por todos los medios se lo hemos demostrado en todas las cosas.
(2 Corintios 11:6)Porque los tales son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo (el Mesías).
(2 Corintios 11:13)Porque no me avergüenzo del evangelio, pues es el poder de Dios para la salvación de todo el que cree, del Judío primeramente y también del Griego.
(Romanos 1:16)Porque es vergonzoso aun hablar de las cosas que ellos hacen en secreto.
(Efesios 5:12)