Cuando Jesús terminó estas palabras, las multitudes se admiraban de Su enseñanza;
(Mateo 7:28)porque les enseñaba como Uno que tiene autoridad, y no como sus escribas.
(Mateo 7:29)Cuando Jesús bajó del monte, grandes multitudes Lo seguían.
(Mateo 8:1)Y se acercó un leproso y se postró ante El, diciendo: "Señor, si quieres, puedes limpiarme."
Extendiendo Jesús la mano, lo tocó, diciendo: "Quiero; sé limpio." Y al instante quedó limpio de su lepra.
(Mateo 8:3)Entonces Jesús le dijo: "Mira, no se lo digas a nadie, sino ve, muéstrate al sacerdote y presenta la ofrenda que ordenó Moisés, para que les sirva de testimonio a ellos."
(Mateo 8:4)Al entrar Jesús en Capernaúm, se acercó un centurión y Le suplicó:
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Mateo 8:2 - Referencia Cruzada
Yo, Juan, soy el que oyó y vio estas cosas. Y cuando oí y vi, me postré para adorar a los pies del ángel que me mostró estas cosas.
(Apocalipsis 22:8)Naamán, capitán del ejército del rey de Aram, era un gran hombre delante de su señor y tenido en alta estima, porque por medio de él el SEÑOR había dado la victoria (salvación) a Aram. También el hombre era un guerrero valiente, pero leproso.
(2 Reyes 5:1)Pero Uzías, con un incensario en su mano para quemar incienso, se llenó de ira; y mientras estaba enojado contra los sacerdotes, la lepra le brotó en la frente, delante de los sacerdotes en la casa del SEÑOR, junto al altar del incienso.
(2 Crónicas 26:19)Entrando en la casa, vieron al Niño con Su madre María, y postrándose Lo adoraron; y abriendo sus tesoros Le presentaron obsequios de oro, incienso y mirra.
(Mateo 2:11)Entonces los que estaban en la barca Lo adoraron, diciendo: "En verdad eres Hijo de Dios."
(Mateo 14:33)Estando Jesús en una de las ciudades, había allí un hombre lleno de lepra, y cuando vio a Jesús, cayó sobre su rostro y Le rogó: "Señor, si quieres, puedes limpiarme."
(Lucas 5:12)Cuídate de una infección de lepra, para que observes diligentemente y hagas conforme a todo lo que los sacerdotes Levitas les enseñen. Como les he ordenado, así cuidarán de hacer.
(Deuteronomio 24:8)Hoy soy débil, aunque ungido rey; y estos hombres, hijos de Sarvia, son más duros que yo. Que el SEÑOR pague al malhechor conforme a su maldad."
(2 Samuel 3:39)Muchos leprosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo, pero ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el Sirio."
(Lucas 4:27)Entonces el siervo cayó postrado ante él, diciendo: 'Tenga paciencia conmigo y todo se lo pagaré.'
(Mateo 18:26)El entonces dijo: "Creo, Señor." Y Lo adoró.
(Juan 9:38)Pero cuando la nube se retiró de sobre la tienda, vieron que Miriam estaba leprosa, blanca como la nieve. Y cuando Aarón se volvió hacia Miriam, vio que estaba leprosa.
(Números 12:10)y Le dijo: "Todo esto Te daré, si Te postras y me adoras."
(Mateo 4:9)Un leproso vino rogando a Jesús, y arrodillándose, Le dijo: "Si quieres, puedes limpiarme."
(Marcus 1:40)Sanen enfermos, resuciten muertos, limpien leprosos, expulsen demonios; de gracia recibieron, den de gracia.
(Mateo 10:8)Y no hizo muchos milagros allí a causa de la incredulidad de ellos.
(Mateo 13:58)De repente Jesús les salió al encuentro, diciendo: "¡Saludos!" Y ellas, acercándose, abrazaron Sus pies y Lo adoraron.
(Mateo 28:9)Había cuatro leprosos a la entrada de la puerta, y se dijeron el uno al otro: "¿Por qué estamos aquí sentados esperando la muerte?
(2 Reyes 7:3)Muchas veces ese espíritu lo ha echado en el fuego y también en el agua para destruirlo. Pero si Tú puedes hacer algo, ten misericordia de nosotros y ayúdanos."
(Marcus 9:22)Manda a los Israelitas que echen del campamento a todo leproso, a todo el que padece de flujo y a todo el que es inmundo por causa de un muerto.
(Números 5:2)Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tus descendientes para siempre." Y él salió de su presencia leproso, blanco como la nieve.
(2 Reyes 5:27)Y el SEÑOR hirió al rey, y quedó leproso hasta el día de su muerte. Y habitó en una casa separada, mientras Jotam, hijo del rey, estaba al frente de la casa, gobernando al pueblo de la tierra.
(2 Reyes 15:5)es un leproso, es inmundo. El sacerdote ciertamente lo declarará inmundo; su infección está en su cabeza.
(Levítico 13:44)Los secretos de su corazón quedarán al descubierto, y él se postrará y adorará a Dios, declarando que en verdad Dios está entre ustedes.
(1 Corintios 14:25)Pero acercándose ella, se postró ante El, diciendo: "¡Señor, ayúdame!"
(Mateo 15:25)y al entrar en cierta aldea, Le salieron al encuentro diez hombres leprosos, que se pararon a distancia,
(Lucas 17:12)Cuando Lo vieron, Lo adoraron; pero algunos dudaron.
(Mateo 28:17)Mientras Jesús les decía estas cosas, vino un oficial de la sinagoga y se postró delante de El, diciendo: "Mi hija acaba de morir; pero ven y pon Tu mano sobre ella, y vivirá."
(Mateo 9:18)Entonces se acercó a Jesús la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, y postrándose ante El, Le pidió algo.
(Mateo 20:20)Entonces caí a sus pies para adorarlo. Y me dijo: "No hagas eso. Yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos que poseen el testimonio de Jesús; adora a Dios. El testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía."
(Apocalipsis 19:10)Estando Jesús en Betania, en casa de Simón el leproso,
(Mateo 26:6)Después de entrar en la casa, se acercaron a El los ciegos, y Jesús les dijo: "¿Creen que puedo hacer esto?" "Sí, Señor," Le respondieron.
(Mateo 9:28)Cuando vio a Jesús de lejos, corrió y se postró delante de El;
(Marcus 5:6)Cuando Pedro iba a entrar, Cornelio salió a recibirlo, y postrándose a sus pies, lo adoró.
(Hechos 10:25)