Nueva Biblia Latinoamericana
porque les enseñaba como Uno que tiene autoridad, y no como sus escribas. (Mateo 7:29)
Cuando Jesús bajó del monte, grandes multitudes Lo seguían. (Mateo 8:1)
Y se acercó un leproso y se postró ante El, diciendo: "Señor, si quieres, puedes limpiarme." (Mateo 8:2)
Extendiendo Jesús la mano, lo tocó, diciendo: "Quiero; sé limpio." Y al instante quedó limpio de su lepra.
Entonces Jesús le dijo: "Mira, no se lo digas a nadie, sino ve, muéstrate al sacerdote y presenta la ofrenda que ordenó Moisés, para que les sirva de testimonio a ellos." (Mateo 8:4)
Al entrar Jesús en Capernaúm, se acercó un centurión y Le suplicó: (Mateo 8:5)
Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, sufriendo mucho." (Mateo 8:6)

Otras publicaciones relacionadas con "Mateo 8:3":

Omar Soto
Completa la obra, Señor!
Reflexión sobre la importancia de tener un corazón agradecido y enfocado en la gratitud en lugar de solo en las propias necesidades, a través de la historia de los diez leprosos sanados por Jesús.


Dr. Roberto Miranda
Jesús, mayor que Moisés y la Ley
En este artículo se explora la presentación de Jesús como el centro de la enseñanza en Juan 5, confrontando el sistema religioso y presentándolo como la fundación de la salvación y la vida eterna. Se destaca la importancia de tener una relación personal con Cristo y de enfocarse en enamorarse de él en lugar de la iglesia, así como de aceptarlo como salvador para pasar de muerte a vida.


Dr. Roberto Miranda
Sermón clásico 6046: El mejor médico de todos
El autor habla sobre la importancia de buscar a Dios con pasión y entender que Él es soberano y sabe todas las cosas, enfocándose en la historia de la mujer con flujo de sangre. El pastor Roberto Miranda habla sobre la importancia de tener una relación íntima con Jesucristo y de confiar en Él para sanarnos en sus mensajes.


Dr. Roberto Miranda
Los requisitos del milagro
En este artículo, el autor reflexiona sobre el primer milagro formal registrado en la Biblia después de la ascensión de Cristo, donde Pedro y Juan sanan a un paralítico en el templo en el nombre de Jesús. Se enfatiza la importancia de cultivar la presencia del Espíritu Santo en nuestra vida, poner la fe en Jesucristo y no en los hombres o iglesias, y la necesidad de una iglesia activa y evangelística para atraer a otros a Cristo. El autor también reflexiona sobre el concepto de la restauración de todas las cosas y cómo esto puede ser una señal de que aún queda mucho trabajo por hacer en la tierra antes de que Cristo regrese.


Omar Soto
Una fe atrevida recibe su recompensa
El autor habla sobre la historia de la mujer que tocó el borde del manto de Jesús y su fe atrevida para alcanzarlo, y cómo esto puede aplicarse a la vida de los lectores. También habla sobre la gracia inusual de Dios y la necesidad de buscar a Jesús para recibir su respuesta y recompensa.


Mateo 8:3 - Referencia Cruzada

Porque El habló, y fue hecho; El mandó, y todo se confirmó. (Salmos 33:9)
Jesús se levantó, reprendió al viento y dijo al mar: "¡Cálmate (Calla), sosiégate (enmudece)!" Y el viento cesó, y sobrevino una gran calma. (Marcus 4:39)
Extendiendo Jesús la mano, lo tocó, diciendo: "Quiero; sé limpio." Y al instante la lepra lo dejó. (Lucas 5:13)
Pero Naamán se enojó, y se fue diciendo: "Yo pensé: 'Seguramente él vendrá a mí, y se detendrá e invocará el nombre del SEÑOR su Dios, moverá su mano sobre la parte enferma y curará la lepra.' (2 Reyes 5:11)
Si Yo no hubiera hecho entre ellos las obras que ningún otro ha hecho, no tendrían pecado (culpa); pero ahora las han visto, y Me han odiado a Mí y también a Mi Padre. (Juan 15:24)
Movido a compasión, extendiendo Jesús la mano, lo tocó y le dijo: "Quiero; sé limpio." (Marcus 1:41)
Entonces él bajó y se sumergió siete veces en el Jordán conforme a la palabra del hombre de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio. (2 Reyes 5:14)
Tomando a la niña por la mano, le dijo: "Talita cum," que traducido significa: "Niña, a ti te digo, ¡levántate!" (Marcus 5:41)
Cuando Jesús vio que la gente corría a reunirse, reprendió al espíritu inmundo, diciéndole: "Espíritu mudo y sordo, Yo te ordeno: sal de él y no vuelvas a entrar en él." (Marcus 9:25)
Porque así como el Padre levanta a los muertos y les da vida, asimismo el Hijo también da vida a los que El quiere. (Juan 5:21)
Jesús les respondió: "Vayan y cuenten a Juan lo que oyen y ven: (Mateo 11:4)
Habiendo dicho esto, gritó con fuerte voz: "¡Lázaro, sal fuera!" (Juan 11:43)
Entonces dijo Dios: "Sea la luz." Y hubo luz. (Génesis 1:3)
Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron. Y Jesús dijo: "Joven, a ti te digo: ¡Levántate!" (Lucas 7:14)
y levantando los ojos al cielo, suspiró profundamente y le dijo: "¡Effatá!" esto es, "¡Abrete!" (Marcus 7:34)
Cuando El los vio, les dijo: "Vayan y muéstrense a los sacerdotes." Y sucedió que mientras iban, quedaron limpios. (Lucas 17:14)