Nueva Biblia Latinoamericana
Jesús oyó decir que lo habían echado fuera, y cuando lo encontró, le dijo: "¿Crees tú en el Hijo del Hombre?" (Juan 9:35)
El le respondió: "¿Y quién es, Señor, para que yo crea en El?" (Juan 9:36)
Jesús le dijo: "Pues tú Lo has visto, y el que está hablando contigo, Ese es." (Juan 9:37)
El entonces dijo: "Creo, Señor." Y Lo adoró.
Y Jesús dijo: "Yo vine a este mundo para juicio; para que los que no ven, vean, y para que los que ven se vuelvan ciegos." (Juan 9:39)
Algunos de los Fariseos que estaban con El oyeron esto y Le dijeron: "¿Acaso nosotros también somos ciegos?" (Juan 9:40)
Jesús les dijo: "Si ustedes fueran ciegos, no tendrían pecado; pero ahora, porque dicen: 'Vemos,' su pecado permanece. (Juan 9:41)

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Juan 9:38 - Referencia Cruzada

Entonces los que estaban en la barca Lo adoraron, diciendo: "En verdad eres Hijo de Dios." (Mateo 14:33)
Entonces el Rey deseará tu hermosura; Inclínate ante El, porque El es tu señor. (Salmos 45:11)
¡Señor mío y Dios mío!" Le dijo Tomás. (Juan 20:28)
Cuando Lo vieron, Lo adoraron; pero algunos dudaron. (Mateo 28:17)
Honren al Hijo para que no se enoje y perezcan en el camino, Pues puede inflamarse de repente Su ira. ¡Cuán bienaventurados son todos los que en El se refugian! (Salmos 2:12)
De repente Jesús les salió al encuentro, diciendo: "¡Saludos!" Y ellas, acercándose, abrazaron Sus pies y Lo adoraron. (Mateo 28:9)
Ellos, después de adorar a Jesús, regresaron a Jerusalén con gran gozo, (Lucas 24:52)
Y cantaban un cántico nuevo, diciendo: "Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos, porque Tú fuiste inmolado, y con Tu sangre compraste (redimiste) para Dios a gente de toda tribu, lengua, pueblo y nación. (Apocalipsis 5:9)