Nueva Biblia Latinoamericana
Bienaventurados los que procuran la paz, pues ellos serán llamados hijos de Dios. (Mateo 5:9)
Bienaventurados aquéllos que han sido perseguidos por causa de la justicia, pues de ellos es el reino de los cielos. (Mateo 5:10)
Bienaventurados serán cuando los insulten y persigan, y digan todo género de mal contra ustedes falsamente, por causa de Mí. (Mateo 5:11)
Regocíjense y alégrense, porque la recompensa de ustedes en los cielos es grande, porque así persiguieron a los profetas que fueron antes que ustedes.
Ustedes son la sal de la tierra; pero si la sal se ha vuelto insípida, ¿con qué se hará salada otra vez? Ya no sirve para nada, sino para ser echada fuera y pisoteada por los hombres. (Mateo 5:13)
Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad situada sobre un monte no se puede ocultar; (Mateo 5:14)
ni se enciende una lámpara y se pone debajo de una vasija (un almud), sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en la casa. (Mateo 5:15)

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Mateo 5:12 - Referencia Cruzada

Consideró como mayores riquezas el oprobio de Cristo (el Mesías) que los tesoros de Egipto, porque tenía la mirada puesta en la recompensa. (Hebreos 11:26)
Entonces el rey de Israel dijo: "Toma a Micaías y llévaselo a Amón, gobernador de la ciudad, y a Joás, hijo del rey, (1 Reyes 22:26)
Pero aunque yo sea derramado como libación (ofrenda líquida) sobre el sacrificio y servicio de su fe, me regocijo y comparto mi gozo con todos ustedes. (Filipenses 2:17)
Como a medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, y los presos los escuchaban. (Hechos 16:25)
Y cuando ayunen, no pongan cara triste, como los hipócritas; porque ellos desfiguran sus rostros para mostrar a los hombres que están ayunando. En verdad les digo que ya han recibido su recompensa. (Mateo 6:16)
Además, Tu siervo es amonestado por ellos; En guardarlos hay gran recompensa. (Salmos 19:11)
Que el SEÑOR recompense tu obra y que tu pago sea completo de parte del SEÑOR, Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte." (Rut 2:12)
sabiendo que del Señor recibirán la recompensa de la herencia. Es a Cristo el Señor a quien sirven. (Colosenses 3:24)
Porque el Hijo del Hombre ha de venir en la gloria de Su Padre con Sus ángeles, y ENTONCES RECOMPENSARA A CADA UNO SEGUN SU CONDUCTA. (Mateo 16:27)
Cuídense de no practicar su justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de otra manera no tendrán recompensa de su Padre que está en los cielos. (Mateo 6:1)
Así que dan testimonio en contra de ustedes mismos, que son hijos de los que asesinaron a los profetas. (Mateo 23:31)
Cuando se acercó el tiempo de la cosecha, envió sus siervos a los labradores para recibir sus frutos. (Mateo 21:34)
Alégrense en ese día y salten de gozo, porque su recompensa es grande en el cielo, pues sus padres trataban de la misma manera a los profetas. (Lucas 6:23)
Cuando Jeremías terminó de decir todo lo que el SEÑOR le había mandado que hablara a todo el pueblo, lo apresaron los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, diciendo: "De cierto, morirás. (Jeremías 26:8)
¡Ay de ustedes! Porque edifican los sepulcros de los profetas, y fueron los padres de ustedes quienes los mataron. (Lucas 11:47)
Pues esta aflicción leve y pasajera nos produce un eterno peso de gloria que sobrepasa toda comparación, (2 Corintios 4:17)
Antes bien, en la medida en que comparten los padecimientos de Cristo, regocíjense, para que también en la revelación de Su gloria se regocijen con gran alegría. (1 Pedro 4:13)
Entonces Asa se irritó contra el vidente y lo metió en la cárcel, porque estaba enojado contra él por esto. Por ese tiempo, Asa oprimió a algunos del pueblo. (2 Crónicas 16:10)
El que recibe a un profeta como profeta, recibirá recompensa de profeta; y el que recibe a un justo como justo, recibirá recompensa de justo. (Mateo 10:41)
Después de estas cosas la palabra del SEÑOR vino a Abram en visión, diciendo: "No temas, Abram, Yo soy un escudo para ti; Tu recompensa será muy grande." (Génesis 15:1)
El impío gana salario engañoso, Pero el que siembra justicia recibe verdadera recompensa. (Proverbios 11:18)
Entonces Jezabel envió un mensajero a Elías, diciendo: "Así me hagan los dioses y aun me añadan, si mañana a estas horas yo no he puesto tu vida como la vida de uno de ellos." (1 Reyes 19:2)
Los apóstoles, pues, salieron de la presencia del Concilio (Sanedrín), regocijándose de que hubieran sido considerados dignos de sufrir afrenta por Su Nombre. (Hechos 5:41)
Pero ellos continuamente se burlaban de los mensajeros de Dios, despreciaban Sus palabras y se burlaban de Sus profetas, hasta que subió el furor del SEÑOR contra Su pueblo, y ya no hubo remedio. (2 Crónicas 36:16)
Estos mataron tanto al Señor Jesús como a los profetas, y a nosotros nos expulsaron, y no agradan a Dios sino que son contrarios a todos los hombres, (1 Tesalonicenses 2:15)
pues cuando Jezabel destruyó a los profetas del SEÑOR, Abdías tomó a cien profetas y los escondió de cincuenta en cincuenta en una cueva, y los sustentó con pan y agua.) (1 Reyes 18:4)
¿No le han contado a mi señor lo que hice cuando Jezabel mató a los profetas del SEÑOR, que escondí a cien de los profetas del SEÑOR de cincuenta en cincuenta en una cueva, y los sustenté con pan y agua? (1 Reyes 18:13)
Y sin fe es imposible agradar a Dios. Porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que El existe, y que recompensa a los que Lo buscan. (Hebreos 11:6)
En vano he herido a sus hijos, No han aceptado corrección. La espada de ustedes ha devorado a sus profetas Como león destructor. (Jeremías 2:30)
Tengan por sumo gozo, hermanos míos, cuando se hallen en diversas pruebas (tentaciones), (Santiago 1:2)
Entonces el rey envió un capitán de cincuenta con sus cincuenta hombres a buscarlo. El capitán subió a él, y allí estaba Elías sentado en la cumbre del monte, y le dijo: "Hombre de Dios, el rey dice: 'Desciende.'" (2 Reyes 1:9)
Ustedes, que son tercos e incircuncisos de corazón y de oídos, resisten siempre al Espíritu Santo; como hicieron sus padres, así hacen también ustedes. (Hechos 7:51)
Ahora me alegro de mis sufrimientos por ustedes, y en mi carne, completando lo que falta de las aflicciones de Cristo, hago mi parte por Su cuerpo, que es la iglesia. (Colosenses 1:24)
Pero fueron desobedientes y se rebelaron contra Ti, Echaron Tu ley a sus espaldas, Mataron a Tus profetas que los amonestaban (les testificaban) Para que se volvieran a Ti; Y cometieron grandes blasfemias. (Nehemías 9:26)
Digan a los justos que les irá bien, Porque el fruto de sus obras comerán. (Isaías 3:10)
Ahora bien, el que planta y el que riega son una misma cosa, pero cada uno recibirá su propia recompensa (su propio salario) conforme a su propio trabajo. (1 Corintios 3:8)
Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia (perseverancia); (Romanos 5:3)
Y el rey de Israel dijo a Josafat: "Todavía queda un hombre por medio de quien podemos consultar al SEÑOR, pero lo aborrezco, porque no profetiza lo bueno en cuanto a mí, sino lo malo. Es Micaías, hijo de Imla." Pero Josafat dijo: "No hable el rey así." (1 Reyes 22:8)
Y él respondió: "He tenido mucho celo por el SEÑOR, Dios de los ejércitos; porque los Israelitas han abandonado Tu pacto, han derribado Tus altares y han matado a espada a Tus profetas. He quedado yo solo y buscan mi vida para quitármela." (1 Reyes 19:10)
Entonces los hombres dirán: "Ciertamente hay recompensa para el justo, Ciertamente hay un Dios que juzga en la tierra." (Salmos 58:11)
¡Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los que le son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina a sus pollitos debajo de sus alas, y no quisiste! (Lucas 13:34)
para que tu limosna sea en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. (Mateo 6:4)
Antes bien, amen a sus enemigos, y hagan bien, y presten no esperando nada a cambio, y su recompensa será grande, y serán hijos del Altísimo; porque El es bondadoso para con los ingratos y perversos. (Lucas 6:35)
Y Acab dijo a Elías: "¿Me has encontrado, enemigo mío?" Y él respondió: "Te he encontrado, porque te has vendido para hacer el mal ante los ojos del SEÑOR. (1 Reyes 21:20)
Entonces el Espíritu de Dios vino sobre Zacarías, hijo del sacerdote Joiada. El se puso en pie, en un lugar más alto que el pueblo, y les dijo: "Así ha dicho Dios: '¿Por qué quebrantan ustedes los mandamientos del SEÑOR y no prosperan ? Por haber abandonado al SEÑOR, El también los ha abandonado.'" (2 Crónicas 24:20)
Cuando el rey Joacim y todos sus valientes y todos los jefes oyeron sus palabras, el rey procuró matarlo; pero Urías se enteró, tuvo miedo, huyó y se fue a Egipto. (Jeremías 26:21)