Nueva Biblia Latinoamericana
Y el que no toma su cruz y sigue en pos de Mí, no es digno de Mí. (Mateo 10:38)
El que ha hallado su vida, la perderá; y el que ha perdido su vida por Mi causa, la hallará. (Mateo 10:39)
El que los recibe a ustedes, Me recibe a Mí; y el que Me recibe a Mí, recibe al que Me envió. (Mateo 10:40)
El que recibe a un profeta como profeta, recibirá recompensa de profeta; y el que recibe a un justo como justo, recibirá recompensa de justo.
Y cualquiera que como discípulo dé a beber aunque sólo sea un vaso de agua fría a uno de estos pequeños, en verdad les digo que no perderá su recompensa." (Mateo 10:42)
Y sucedió que cuando Jesús terminó de dar instrucciones a Sus doce discípulos, se fue de allí a enseñar y predicar en las ciudades de ellos. (Mateo 11:1)
Al oír Juan en la cárcel de las obras de Cristo (el Mesías), mandó por medio de sus discípulos (Mateo 11:2)

Otras publicaciones relacionadas con "Mateo 10:41":

Omar Soto
Da a conocer el amor de Dios en el momento en que Él te ponga la oportunidad
Un mensaje sobre la importancia de vivir según las enseñanzas de Jesús y ser instrumentos de la justicia divina en el mundo.


Dr. Roberto Miranda
Lo que cuesta seguir a Cristo
El pastor Roberto Miranda habla sobre la importancia de seguir a Cristo y ser discípulos comprometidos con el Reino de Dios, renunciando a una vida mediocre y promedio y aceptando la entrega total a Cristo como Señor de nuestras vidas.


Mateo 10:41 - Referencia Cruzada

Gayo, hospedador mío y de toda la iglesia, los saluda. Erasto, el tesorero de la ciudad, los saluda, y el hermano Cuarto. (Romanos 16:23)
Ahora pues, devuelve la mujer al marido, porque él es profeta y orará por ti, y vivirás. Pero si no la devuelves, sabe que de cierto morirás, tú y todos los tuyos." (Génesis 20:7)
Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cuando hayas cerrado la puerta, ora a tu Padre que está en secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. (Mateo 6:6)
Entonces Eliseo le dijo: "Por este tiempo, el año que viene, abrazarás un hijo." Y ella dijo: "No, señor mío, hombre de Dios, no engañe usted a su sierva." (2 Reyes 4:16)
Y clamó al SEÑOR: "Oh SEÑOR, Dios mío, ¿has traído también mal a la viuda con quien estoy hospedado haciendo morir a su hijo?" (1 Reyes 17:20)
Porque si hago esto voluntariamente, tengo recompensa; pero si lo hago en contra de mi voluntad, un encargo (una mayordomía) se me ha confiado. (1 Corintios 9:17)
Un día pasaba Eliseo por Sunem, donde había una mujer distinguida, y ella lo persuadió a que comiera. Y sucedía que siempre que pasaba, entraba allí a comer. (2 Reyes 4:8)
Conceda el Señor misericordia a la casa de Onesíforo, porque muchas veces me dio consuelo y no se avergonzó de mis cadenas. (2 Timoteo 1:16)
Tengan ustedes cuidado para que no pierdan lo que hemos logrado, sino que reciban abundante recompensa. (2 Juan 1:8)
Entonces el Rey dirá a los de Su derecha: 'Vengan, benditos de Mi Padre, hereden el reino preparado para ustedes desde la fundación del mundo. (Mateo 25:34)
Antes bien, cuando ofrezcas un banquete, llama a pobres, mancos, cojos, ciegos, (Lucas 14:13)
Porque Dios no es injusto como para olvidarse de la obra de ustedes y del amor que han mostrado hacia Su nombre, habiendo servido, y sirviendo aún, a los santos. (Hebreos 6:10)
Cuando Eliseo entró en la casa, el niño ya estaba muerto, tendido sobre su cama. (2 Reyes 4:32)
para no hacer ver a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. (Mateo 6:18)
Cuídense de no practicar su justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de otra manera no tendrán recompensa de su Padre que está en los cielos. (Mateo 6:1)
Porque el Hijo del Hombre ha de venir en la gloria de Su Padre con Sus ángeles, y ENTONCES RECOMPENSARA A CADA UNO SEGUN SU CONDUCTA. (Mateo 16:27)
Porque después de todo, es justo delante de Dios que El pague con aflicción a quienes los afligen a ustedes. (2 Tesalonicenses 1:6)
Digan a los justos que les irá bien, Porque el fruto de sus obras comerán. (Isaías 3:10)
para que tu limosna sea en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. (Mateo 6:4)
Levántate, ve a Sarepta, que pertenece a Sidón, y quédate allí; porque yo he mandado a una viuda de allí que te sustente." (1 Reyes 17:9)
Y Acab llamó a Abdías que era mayordomo de la casa. (Y Abdías temía (reverenciaba) en gran manera al SEÑOR; (1 Reyes 18:3)
Amado, estás obrando fielmente en lo que haces por los hermanos, y sobre todo cuando se trata de extraños. (3 Juan 1:5)
Les recomiendo a nuestra hermana Febe, diaconisa de la iglesia en Cencrea, (Romanos 16:1)
Cuando ella y su familia se bautizaron, nos rogó: "Si juzgan que soy fiel al Señor, vengan a mi casa y quédense en ella." Y nos persuadió a ir. (Hechos 16:15)