Nueva Biblia Latinoamericana
Vive el SEÑOR su Dios, que no hay nación ni reino adonde mi señor no haya enviado a buscarlo; y cuando decían: 'No está aquí,' hacía jurar al reino o a la nación que no lo habían hallado. (1 Reyes 18:10)
Y ahora dices: 'Ve, dile a tu señor: "Aquí está Elías."' (1 Reyes 18:11)
Y sucederá que cuando lo deje, el Espíritu del SEÑOR lo llevará adonde yo no sepa; así que cuando yo vaya y se lo diga a Acab y él no pueda encontrarlo, me matará, aunque yo su siervo he temido (reverenciado) al SEÑOR desde mi juventud. (1 Reyes 18:12)
¿No le han contado a mi señor lo que hice cuando Jezabel mató a los profetas del SEÑOR, que escondí a cien de los profetas del SEÑOR de cincuenta en cincuenta en una cueva, y los sustenté con pan y agua?
Y ahora usted me dice: 'Ve, dile a tu señor: "Aquí está Elías"'; entonces me matará." (1 Reyes 18:14)
Elías le dijo: "Vive el SEÑOR de los ejércitos, delante de quien estoy, que hoy ciertamente me mostraré a él." (1 Reyes 18:15)
Abdías fue al encuentro de Acab, y le dio aviso; y Acab fue al encuentro de Elías. (1 Reyes 18:16)

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1 Reyes 18:13 - Referencia Cruzada

Porque recuerdan, hermanos, nuestros trabajos y fatigas, cómo, trabajando de día y de noche para no ser carga a ninguno de ustedes, les proclamamos el evangelio de Dios. (1 Tesalonicenses 2:9)
Porque tuve hambre, y ustedes Me dieron de comer; tuve sed, y Me dieron de beber; fui extranjero, y Me recibieron; (Mateo 25:35)
pues cuando Jezabel destruyó a los profetas del SEÑOR, Abdías tomó a cien profetas y los escondió de cincuenta en cincuenta en una cueva, y los sustentó con pan y agua.) (1 Reyes 18:4)
Ustedes saben que estas manos me sirvieron para mis propias necesidades y las de los que estaban conmigo. (Hechos 20:34)
Pero Abimelec no se había acercado a ella, y dijo: "Señor, ¿destruirás a una nación aunque sea inocente? (Génesis 20:4)
Porque he guardado los caminos del SEÑOR, Y no me he apartado impíamente de mi Dios. (Salmos 18:21)
El que recibe a un profeta como profeta, recibirá recompensa de profeta; y el que recibe a un justo como justo, recibirá recompensa de justo. (Mateo 10:41)