Nueva Biblia Latinoamericana
Y no nos metas (no nos dejes caer) en tentación, sino líbranos del mal (del maligno). Porque Tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre. Amén.' (Mateo 6:13)
Porque si ustedes perdonan a los hombres sus transgresiones (faltas, delitos), también su Padre celestial les perdonará a ustedes. (Mateo 6:14)
Pero si no perdonan a los hombres, tampoco su Padre les perdonará a ustedes sus transgresiones (faltas, delitos). (Mateo 6:15)
Y cuando ayunen, no pongan cara triste, como los hipócritas; porque ellos desfiguran sus rostros para mostrar a los hombres que están ayunando. En verdad les digo que ya han recibido su recompensa.
Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, (Mateo 6:17)
para no hacer ver a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. (Mateo 6:18)
No acumulen para sí tesoros en la tierra, donde la polilla y la herrumbre destruyen, y donde ladrones penetran y roban; (Mateo 6:19)

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Mateo 6:16 - Referencia Cruzada

en trabajos y fatigas, en muchas noches de desvelo, en hambre y sed, con frecuencia sin comida, en frío y desnudez. (2 Corintios 11:27)
Ve, reúne a todos los Judíos que se encuentran en Susa y ayunen por mí; no coman ni beban por tres días, ni de noche ni de día. También yo y mis doncellas ayunaremos. Y así iré al rey, lo cual no es conforme a la ley; y si perezco, perezco." (Ester 4:16)
Cuando ustedes oren, no sean como los hipócritas; porque a ellos les gusta ponerse en pie y orar en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos por los hombres. En verdad les digo que ya han recibido su recompensa. (Mateo 6:5)
Yo ayuno dos veces por semana; doy el diezmo de todo lo que gano.' (Lucas 18:12)
y después de viuda, hasta los ochenta y cuatro años. Nunca se alejaba del templo, sirviendo noche y día con ayunos y oraciones. (Lucas 2:37)
Entonces los discípulos de Juan se acercaron a Jesús, diciendo: "¿Por qué nosotros y los Fariseos ayunamos, pero Tus discípulos no ayunan?" (Mateo 9:14)
Después que les designaron ancianos en cada iglesia, habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído. (Hechos 14:23)
Ustedes han dicho: 'En vano es servir a Dios. ¿Qué provecho hay en que guardemos Sus ordenanzas y en que andemos de duelo delante del SEÑOR de los ejércitos? (Malaquías 3:14)
y preguntar a los sacerdotes que eran de la casa del SEÑOR de los ejércitos, y a los profetas: "¿Debemos llorar en el mes quinto y abstenernos como lo hemos hecho durante tantos años?" (Zacarías 7:3)
No se priven el uno del otro, excepto de común acuerdo y por cierto tiempo, para dedicarse a la oración. Vuelvan después a juntarse, a fin de que Satanás no los tiente por causa de falta de dominio propio. (1 Corintios 7:5)
Por eso, cuando des limosna, no toques trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres. En verdad les digo que ya han recibido su recompensa. (Mateo 6:2)
en azotes, en cárceles, en tumultos, en trabajos, en desvelos, en ayunos, (2 Corintios 6:5)
Dicen: '¿Por qué hemos ayunado, y Tú no lo ves? ¿Por qué nos hemos humillado, y Tú no haces caso?' Pero en el día de su ayuno buscan su conveniencia Y oprimen a todos sus trabajadores. (Isaías 58:3)
Cuando lloraba afligiendo con ayuno mi alma, Eso se convirtió en afrenta para mí. (Salmos 69:10)
Mientras ministraban al Señor y ayunaban, el Espíritu Santo dijo: "Aparten a Bernabé y a Saulo para la obra a la que los he llamado." (Hechos 13:2)
Así que sus siervos le dijeron: "¿Qué es esto que ha hecho? Mientras el niño vivía, usted ayunaba y lloraba, pero cuando el niño murió, se levantó y comió pan." (2 Samuel 12:21)
Y Cornelio respondió: "Hace cuatro días, a esta misma hora, estaba yo orando en mi casa a la hora novena (3 p.m.); y un hombre con vestiduras resplandecientes, se puso delante de mí, (Hechos 10:30)
Cuando oí estas palabras, me senté y lloré; hice duelo algunos días, y estuve ayunando y orando delante del Dios del cielo. (Nehemías 1:4)
Volví mi rostro a Dios el Señor para buscarlo en oración y súplicas, en ayuno, cilicio y ceniza. (Daniel 9:3)
Cuando Acab oyó estas palabras, rasgó sus vestidos, puso cilicio sobre sí y ayunó, se acostó con el cilicio y andaba abatido. (1 Reyes 21:27)
Mis rodillas están débiles por el ayuno, Y mi carne sin gordura ha enflaquecido. (Salmos 109:24)
Los discípulos de Juan y los Fariseos estaban ayunando; y vinieron y dijeron a Jesús: "¿Por qué ayunan los discípulos de Juan y los discípulos de los Fariseos, pero Tus discípulos no ayunan?" (Marcus 2:18)
Pero yo, cuando ellos estaban enfermos, vestía de cilicio; Humillé mi alma con ayuno, Y mi oración se repetía en mi pecho. (Salmos 35:13)
David rogó a Dios por el niño; y ayunó, y fue y pasó la noche acostado en el suelo. (2 Samuel 12:16)