Nueva Biblia Latinoamericana
Hagan todas las cosas sin murmuraciones ni discusiones, (Filipenses 2:14)
para que sean irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin tacha en medio de una generación torcida y perversa, en medio de la cual ustedes resplandecen como luminares en el mundo, (Filipenses 2:15)
sosteniendo firmemente la palabra de vida, a fin de que yo tenga motivo para gloriarme en el día de Cristo, ya que no habré corrido en vano ni habré trabajado en vano. (Filipenses 2:16)
Pero aunque yo sea derramado como libación (ofrenda líquida) sobre el sacrificio y servicio de su fe, me regocijo y comparto mi gozo con todos ustedes.
Y también ustedes, les ruego, regocíjense de la misma manera, y compartan su gozo conmigo. (Filipenses 2:18)
Pero espero (confío) en el Señor Jesús enviarles pronto a Timoteo, a fin de que yo también sea alentado al saber de la condición de ustedes. (Filipenses 2:19)
Pues a nadie más tengo del mismo sentir y que esté sinceramente interesado en el bienestar de ustedes. (Filipenses 2:20)

Otras publicaciones relacionadas con "Filipenses 2:17":

Dr. Roberto Miranda
Regocijaos en el Señor siempre
En este sermón, el predicador reflexiona sobre el pasaje de Filipenses 4:4-7 y destaca la importancia de mantener una actitud positiva y gentil en medio de las pruebas y tribulaciones, confiar en el Señor y echar nuestras cargas sobre Él a través de la oración.


Dr. Roberto Miranda
El Señor está cerca
En este artículo se habla sobre la importancia de regocijarse siempre en el Señor y de tener una vida centrada en la cercanía con Cristo, así como de ser gentiles y amables con los demás. También se enfatiza la importancia de vivir la vida a la luz de la Segunda Venida de Cristo y de estar preparados para su llegada, y se explica la visión de Daniel en el libro de la Biblia.


Dr. Roberto Miranda
Gozosos en la esperanza - sufridos en la tribulación (Romanos 12:11) Parte 7
En este artículo, el autor habla sobre la importancia de mantenerse fuerte y fortalecido en el Señor ante las pruebas y tribulaciones de la vida, y enfatiza la importancia de elegir la alegría y la esperanza en lugar de la depresión y la desesperación.


Dr. Roberto Miranda
¡Regocijaos en el Señor siempre!
La Palabra de Dios nos llama a regocijarnos en todo momento, incluso en medio de las pruebas y dificultades de la vida. Este artículo destaca la importancia del regocijo en el Señor, la perspectiva eterna, las palabras y acciones, y la bendición del Señor.


Faustino de Jesús Zamora Vargas
Vida plena - Comisionando al pueblo de Dios
Comisionando al pueblo de Dios: reflexión sobre la Comisión de Pablo a los cristianos de hoy en día según 2 Timoteo 4:2-5 para predicar la palabra a tiempo y fuera de tiempo, corregir y reprender cuando sea necesario, y perseverar en enseñar la verdad.


Dr. Roberto Miranda
Cuando venga la prueba, no te sorprendas
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda nos habla sobre cómo enfrentar las pruebas y tribulaciones de la vida, y cómo estas son inevitables en este mundo caído. Nos anima a tener una actitud de regocijo y comunión con Dios en medio de las pruebas y a verlas como oportunidades para fortalecernos en nuestra fe.


Omar Soto
Hallando consuelo durante la jornada
Reflexión sobre encontrar consuelo en la búsqueda del bienestar de los demás durante la Navidad, a partir de un pasaje bíblico de Pablo en Tesalónica.


Charles Spurgeon
Tenga buen ánimo!
Aprende a tener buen ánimo a pesar de las tribulaciones y confía en la victoria de Jesús. Un mensaje inspirador de Charles Spurgeon.


Dr. Roberto Miranda
Romanos 13 - segunda parte
El autor habla sobre la importancia de vivir una vida santa y pura como cristianos, a la luz de la venida de Jesucristo, y de estar preparados para su segunda venida.


Andrés Cisterna
Me seréis testigos
El mensaje principal del sermón es que la iglesia debe ser portadora de las buenas noticias del Evangelio y tener hambre por predicar el mensaje de salvación de Jesucristo. El orador anima a los oyentes a ser embajadores de Cristo, testigos poderosos y fieles representantes de los valores del Reino.


Filipenses 2:17 - Referencia Cruzada

Entonces Pablo respondió: "¿Qué hacen, llorando y quebrantándome el corazón? Porque listo estoy no sólo a ser atado, sino también a morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús." (Hechos 21:13)
Por tanto, hermanos, les ruego por las misericordias de Dios que presenten sus cuerpos como sacrificio vivo y santo, aceptable (agradable) a Dios, que es el culto racional de ustedes. (Romanos 12:1)
también ustedes, como piedras vivas, sean edificados como casa espiritual para un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo. (1 Pedro 2:5)
conforme a mi anhelo y esperanza de que en nada seré avergonzado, sino que con toda confianza, aun ahora, como siempre, Cristo será exaltado en mi cuerpo, ya sea por vida o por muerte. (Filipenses 1:20)
Porque yo ya estoy para ser derramado como una ofrenda de libación, y el tiempo de mi partida ha llegado. (2 Timoteo 4:6)
Por eso, hermanos, en toda nuestra necesidad y aflicción fuimos consolados respecto a ustedes por medio de su fe. (1 Tesalonicenses 3:7)
Mucha es mi confianza en ustedes. Tengo mucho orgullo de ustedes. Lleno estoy de consuelo y sobreabundo de gozo en toda nuestra aflicción. (2 Corintios 7:4)
En esto conocemos el amor: en que El puso Su vida por nosotros. También nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos. (1 Juan 3:16)
para ser ministro de Cristo Jesús a los Gentiles, ministrando a manera de sacerdote el evangelio de Dios, a fin de que la ofrenda que hago de los Gentiles sea aceptable, santificada por el Espíritu Santo. (Romanos 15:16)
Porque estuvo al borde de la muerte por la obra de Cristo, arriesgando su vida para completar lo que faltaba en el servicio de ustedes hacia mí. (Filipenses 2:30)
Pero lo he recibido todo y tengo abundancia. Estoy bien abastecido, habiendo recibido de Epafrodito lo que han enviado: fragante aroma, sacrificio aceptable, agradable a Dios. (Filipenses 4:18)
Ahora me alegro de mis sufrimientos por ustedes, y en mi carne, completando lo que falta de las aflicciones de Cristo, hago mi parte por Su cuerpo, que es la iglesia. (Colosenses 1:24)
Por tanto, ofrezcamos continuamente mediante El, sacrificio de alabanza a Dios, es decir, el fruto de labios que confiesan (alaban) Su nombre. (Hebreos 13:15)
Pero en ninguna manera estimo mi vida como valiosa para mí mismo, a fin de poder terminar mi carrera y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio solemnemente del evangelio de la gracia de Dios. (Hechos 20:24)
Y yo con mucho gusto gastaré lo mío, y aun yo mismo me gastaré por sus almas. Si los amo más, ¿seré amado menos? (2 Corintios 12:15)
Teniendo así un gran afecto por ustedes, nos hemos complacido en impartirles no sólo el evangelio de Dios, sino también nuestras propias vidas, pues llegaron a ser muy amados para nosotros. (1 Tesalonicenses 2:8)