Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces David dijo a Natán: "He pecado contra el SEÑOR." Y Natán dijo a David: "El SEÑOR ha quitado tu pecado; no morirás. (2 Samuel 12:13)
Sin embargo, por cuanto con este hecho has dado ocasión de blasfemar a los enemigos del SEÑOR, ciertamente morirá el niño que te ha nacido." (2 Samuel 12:14)
Y Natán regresó a su casa. Entonces el SEÑOR hirió al niño que la viuda de Urías dio a David, y se puso muy enfermo. (2 Samuel 12:15)
David rogó a Dios por el niño; y ayunó, y fue y pasó la noche acostado en el suelo.
Los ancianos de su casa se pusieron a su lado para levantarlo del suelo, pero él no quiso, y no comió con ellos. (2 Samuel 12:17)
Sucedió que al séptimo día el niño murió. Los siervos de David temían informarle que el niño había muerto, pues se decían: "Si cuando el niño todavía estaba vivo, le hablábamos y no nos escuchaba, ¿cómo, pues, vamos a decirle que el niño ha muerto? Puede hacerse daño." (2 Samuel 12:18)
Pero viendo David que sus siervos susurraban entre sí, comprendió que el niño había muerto, y dijo a sus siervos: "¿Ha muerto el niño?" "Ha muerto," respondieron ellos. (2 Samuel 12:19)

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2 Samuel 12:16 - Referencia Cruzada

Ve, reúne a todos los Judíos que se encuentran en Susa y ayunen por mí; no coman ni beban por tres días, ni de noche ni de día. También yo y mis doncellas ayunaremos. Y así iré al rey, lo cual no es conforme a la ley; y si perezco, perezco." (Ester 4:16)
Aunque el mal sea dulce en su boca, Y lo oculte bajo su lengua, (Job 20:12)
Por eso aquel día, el Señor, DIOS de los ejércitos, los llamó a llanto y a lamento, A raparse la cabeza y a vestirse de cilicio. (Isaías 22:12)
Y él respondió: "Mientras el niño aún vivía, yo ayunaba y lloraba, pues me decía: '¿Quién sabe si el SEÑOR tendrá compasión de mí y el niño viva?' (2 Samuel 12:22)
Cuando Acab oyó estas palabras, rasgó sus vestidos, puso cilicio sobre sí y ayunó, se acostó con el cilicio y andaba abatido. (1 Reyes 21:27)
Aun ahora," declara el SEÑOR "vuelvan a Mí de todo corazón, Con ayuno, llanto y lamento. (Joel 2:12)
Estuvo tres días sin ver, y no comió ni bebió. (Hechos 9:9)
Entonces el rey se levantó, rasgó sus vestidos y se echó en tierra; y todos sus siervos estaban a su lado con los vestidos rasgados. (2 Samuel 13:31)
Invoca Mi nombre en el día de la angustia; Yo te libraré, y tú Me honrarás." (Salmos 50:15)
Cuando lloraba afligiendo con ayuno mi alma, Eso se convirtió en afrenta para mí. (Salmos 69:10)
Oh SEÑOR, en la angustia Te buscaron. Apenas susurraban una oración, Cuando Tu castigo estaba sobre ellos. (Isaías 26:16)
¡Quién sabe! Quizá Dios se vuelva, se arrepienta y aparte el ardor de Su ira, y no perezcamos." (Jonás 3:9)