Nueva Biblia Latinoamericana
Pero mientras los discípulos lo rodeaban, él se levantó y entró en la ciudad. Al día siguiente Pablo partió con Bernabé a Derbe. (Hechos 14:20)
Después de anunciar el evangelio a aquella ciudad y de hacer muchos discípulos, volvieron a Listra, a Iconio y a Antioquía, (Hechos 14:21)
fortaleciendo los ánimos (las almas) de los discípulos, exhortándolos a que perseveraran en la fe, y diciendo: "Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios." (Hechos 14:22)
Después que les designaron ancianos en cada iglesia, habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído.
Pasaron por Pisidia y llegaron a Panfilia. (Hechos 14:24)
Después de predicar la palabra en Perge, descendieron a Atalia; (Hechos 14:25)
y de allí se embarcaron para Antioquía, donde habían sido encomendados a la gracia de Dios para la obra que habían cumplido. (Hechos 14:26)

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Hechos 14:23 - Referencia Cruzada

El anciano a la señora escogida (elegida) y a sus hijos, a quienes amo en verdad, y no sólo yo, sino también todos los que conocen la verdad, (2 Juan 1:1)
Y después de que hayan sufrido un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, que los llamó a Su gloria eterna en Cristo, El mismo los perfeccionará, afirmará, fortalecerá, y establecerá. (1 Pedro 5:10)
Y Jesús, clamando a gran voz, dijo: "Padre, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPIRITU." Habiendo dicho esto, expiró. (Lucas 23:46)
Y así lo hicieron, mandándola a los ancianos por mano de Bernabé y de Saulo. (Hechos 11:30)
y enviaron esta carta con ellos: "Los apóstoles, y los hermanos que son ancianos (presbíteros), a los hermanos en Antioquía, Siria y Cilicia que son de los Gentiles, saludos. (Hechos 15:23)
y de allí se embarcaron para Antioquía, donde habían sido encomendados a la gracia de Dios para la obra que habían cumplido. (Hechos 14:26)
Por lo cual también sufro estas cosas, pero no me avergüenzo. Porque yo sé en quién he creído, y estoy convencido de que El es poderoso para guardar mi depósito hasta aquel día. (2 Timoteo 1:12)
Y que nuestro Señor Jesucristo mismo, y Dios nuestro Padre, que nos amó y nos dio consuelo eterno y buena esperanza por gracia, (2 Tesalonicenses 2:16)
Los ancianos que gobiernan bien sean considerados dignos de doble honor, principalmente los que trabajan en la predicación y en la enseñanza. (1 Timoteo 5:17)
No impongas las manos sobre nadie con ligereza, compartiendo así la responsabilidad por los pecados de otros; guárdate libre de pecado. (1 Timoteo 5:22)
Ahora los encomiendo a Dios y a la palabra de Su gracia, que es poderosa para edificarlos y darles la herencia entre todos los santificados. (Hechos 20:32)
Y lo que has oído de mí en la presencia de muchos testigos, eso encarga (confía) a hombres fieles que sean capaces de enseñar también a otros. (2 Timoteo 2:2)
Por tanto, a los ancianos entre ustedes, exhorto yo, anciano como ellos y testigo de los padecimientos de Cristo, y también participante de la gloria que ha de ser revelada: (1 Pedro 5:1)
No reprendas con dureza al anciano, sino, más bien, exhórtalo como a padre; a los más jóvenes, como a hermanos, (1 Timoteo 5:1)
Desde Mileto mandó mensaje a Efeso y llamó a los ancianos de la iglesia. (Hechos 20:17)
Designó a doce, para que estuvieran con El y para enviarlos a predicar, (Marcus 3:14)
Por esta causa te dejé en Creta, para que pusieras en orden lo que queda, y designaras ancianos en cada ciudad como te mandé. (Tito 1:5)
Que el Señor los haga crecer y abundar en amor unos para con otros, y para con todos, como también nosotros lo hacemos para con ustedes; (1 Tesalonicenses 3:12)
Entonces los apóstoles y los ancianos se reunieron para considerar este asunto. (Hechos 15:6)
comenzando desde el bautismo de Juan, hasta el día en que de entre nosotros Jesús fue recibido arriba al cielo, uno sea constituido testigo con nosotros de Su resurrección." (Hechos 1:22)
En la iglesia que estaba en Antioquía había profetas y maestros: Bernabé, Simón llamado Niger, Lucio de Cirene, Manaén, que se había criado con Herodes (Antipas, hijo de Herodes el Grande) el tetrarca, y Saulo. (Hechos 13:1)
Cuando llegaron a Jerusalén, fueron recibidos por la iglesia, los apóstoles y los ancianos, e informaron de todo lo que Dios había hecho con ellos. (Hechos 15:4)
El anciano al amado Gayo, a quien yo amo en verdad. (3 Juan 1:1)
¿Está alguien entre ustedes enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia y que ellos oren por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor. (Santiago 5:14)