Romanos 6:12 - Referencia Cruzada

Porque el pecado no tendrá dominio sobre ustedes, pues no están bajo la ley sino bajo la gracia. (Romanos 6:14)

¿No saben ustedes que cuando se presentan como esclavos a alguien para obedecerle, son esclavos de aquél a quien obedecen, ya sea del pecado para muerte, o de la obediencia para justicia? (Romanos 6:16)

Pero si el Espíritu de Aquél que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en ustedes, el mismo que resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos, también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de Su Espíritu que habita en ustedes. (Romanos 8:11)

Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. (1 Corintios 15:53)

Sino que cada uno es tentado cuando es llevado y seducido por su propia pasión. (Santiago 1:14)

Porque nosotros que vivimos, constantemente estamos siendo entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestro cuerpo mortal. (2 Corintios 4:11)

enseñándonos, que negando la impiedad y los deseos mundanos, vivamos en este mundo sobria, justa y piadosamente, (Tito 2:12)

No amen al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguien ama al mundo, el amor del Padre no está en él. (1 Juan 2:15)

Digo, pues: anden por el Espíritu, y no cumplirán el deseo de la carne. (Gálatas 5:16)

Estos son murmuradores, criticones, que andan tras sus propias pasiones. Hablan con arrogancia, adulando a la gente para obtener beneficio. (Judas 1:16)

quienes les decían: "En los últimos tiempos habrá burladores que irán tras sus propias pasiones impías." (Judas 1:18)

para que así como el pecado reinó en la muerte, así también la gracia reine por medio de la justicia para vida eterna, mediante Jesucristo nuestro Señor. (Romanos 5:21)

Antes bien, vístanse del Señor Jesucristo, y no piensen en proveer para las lujurias de la carne. (Romanos 13:14)

Porque si ustedes viven conforme a la carne, habrán de morir; pero si por el Espíritu hacen morir las obras de la carne (del cuerpo), vivirán. (Romanos 8:13)

no en pasión degradante, como los Gentiles (paganos) que no conocen a Dios. (1 Tesalonicenses 4:5)

Porque asimismo, los que estamos en esta tienda, gemimos agobiados, pues no queremos ser desvestidos, sino vestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida. (2 Corintios 5:4)

Pues los que son de Cristo Jesús han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. (Gálatas 5:24)

Por lo cual también dije: 'No los echaré de delante de ustedes, sino que serán como espinas en su costado, y sus dioses les serán lazo para ustedes.'" (Jueces 2:3)

Huye, pues, de las pasiones juveniles y sigue (busca) la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que invocan al Señor con un corazón puro. (2 Timoteo 2:22)

para vivir el tiempo que le queda en la carne, ya no para las pasiones humanas, sino para la voluntad de Dios. (1 Pedro 4:2)

Pero si no expulsan de delante de ustedes a los habitantes de la tierra, entonces sucederá que los que de ellos dejen serán como aguijones en sus ojos y como espinas en sus costados, y los hostigarán en la tierra en que habiten. (Números 33:55)

Porque si se vuelven, y se unen al resto de estos pueblos que permanecen entre ustedes, y contraen matrimonio con ellos, y se juntan con ellos, y ellos con ustedes, (Josué 23:12)

pero veo otra ley en los miembros de mi cuerpo que hace guerra contra la ley de mi mente, y me hace prisionero de la ley del pecado que está en mis miembros. (Romanos 7:23)

pero a los que son ambiciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia: ira e indignación. (Romanos 2:8)

Entre ellos también todos nosotros en otro tiempo vivíamos en las pasiones de nuestra carne, satisfaciendo los deseos de la carne y de la mente (de los pensamientos), y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás. (Efesios 2:3)

que en cuanto a la anterior manera de vivir, ustedes se despojen del viejo hombre, que se corrompe según los deseos engañosos, (Efesios 4:22)

Amados, les ruego como a extranjeros y peregrinos, que se abstengan de las pasiones carnales que combaten contra el alma. (1 Pedro 2:11)

Afirma mis pasos en Tu palabra, Y que ninguna iniquidad me domine. (Salmos 119:133)

Porque nosotros también en otro tiempo éramos necios, desobedientes, extraviados, esclavos de deleites y placeres diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles y odiándonos unos a otros. (Tito 3:3)

Guarda también a Tu siervo de pecados de soberbia; Que no se enseñoreen de mí. Entonces seré íntegro, Y seré absuelto de gran transgresión. (Salmos 19:13)

y cuando el SEÑOR tu Dios los haya entregado delante de ti, y los hayas derrotado, los destruirás por completo. No harás alianza con ellos ni te apiadarás de ellos. (Deuteronomio 7:2)

¿De dónde vienen las guerras y los conflictos entre ustedes? ¿No vienen de las pasiones que combaten en sus miembros? (Santiago 4:1)

Como hijos obedientes, no se conformen a los deseos que antes tenían en su ignorancia, (1 Pedro 1:14)