Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces aquellos hombres vinieron de común acuerdo al rey y le dijeron: "Reconozca, oh rey, que es ley de los Medos y Persas que ningún mandato o edicto que el rey establezca, puede ser revocado." (Daniel 6:15)
El rey entonces dio órdenes que trajeran a Daniel y lo echaran en el foso de los leones. El rey habló a Daniel y le dijo: "Tu Dios, a quien sirves con perseverancia, El te librará." (Daniel 6:16)
Trajeron una piedra y la pusieron sobre la boca del foso. El rey la selló con su anillo y con los anillos de sus nobles, para que nada pudiera cambiarse de lo ordenado en cuanto a Daniel. (Daniel 6:17)
Después el rey se fue a su palacio y pasó la noche en ayuno. Ningún entretenimiento fue traído ante él y se le fue el sueño.
Entonces el rey se levantó al amanecer, al rayar el alba, y fue a toda prisa al foso de los leones. (Daniel 6:19)
Y acercándose al foso, gritó a Daniel con voz angustiada. El rey habló a Daniel y le dijo: "Daniel, siervo del Dios viviente, tu Dios, a quien sirves con perseverancia, ¿te ha podido librar de los leones?" (Daniel 6:20)
Entonces Daniel respondió al rey: "Oh rey, viva para siempre. (Daniel 6:21)

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Daniel 6:18 - Referencia Cruzada

Los que se acuestan en camas de marfil, Se tienden sobre sus lechos, Comen corderos del rebaño Y terneros de en medio del establo; (Amós 6:4)
David rogó a Dios por el niño; y ayunó, y fue y pasó la noche acostado en el suelo. (2 Samuel 12:16)
Aquella noche el rey no podía dormir y dio orden que trajeran el Libro de las Memorias, las crónicas, y que las leyeran delante del rey. (Ester 6:1)
También Mefiboset, nieto de Saúl, descendió al encuentro del rey; y no se había aseado los pies, ni recortado el bigote, ni lavado la ropa, desde el día en que el rey se marchó hasta el día en que volvió en paz. (2 Samuel 19:24)
Cuando Acab oyó estas palabras, rasgó sus vestidos, puso cilicio sobre sí y ayunó, se acostó con el cilicio y andaba abatido. (1 Reyes 21:27)
Cesa el júbilo de los panderos, Se acaba el alboroto de los que se divierten, Cesa el júbilo de la lira. (Isaías 24:8)
Cantan (Alzan la voz) con pandero y arpa, Y al son de la flauta se regocijan. (Job 21:12)
Y Jonás se levantó y fue a Nínive conforme a la palabra del SEÑOR. Nínive era una ciudad muy grande, de un recorrido de tres días. (Jonás 3:3)
Sobre los sauces en medio de ella Colgamos nuestras arpas. (Salmos 137:2)
Reuní también plata y oro para mí y el tesoro de los reyes y de las provincias. Me proveí de cantores y cantoras, y de los placeres de los hombres, de muchas concubinas. (Eclesiastés 2:8)
Has mantenido abiertos mis párpados; Estoy tan turbado que no puedo hablar. (Salmos 77:4)
En el segundo año del reinado de Nabucodonosor, éste tuvo sueños, y se turbó su espíritu y no podía dormir. (Daniel 2:1)
El sonido de arpistas, de músicos, de flautistas, y de trompeteros no se oirá más en ti. Ningún artífice de oficio alguno se hallará más en ti. Ningún ruido de molino se oirá más en ti. (Apocalipsis 18:22)