Nueva Biblia Latinoamericana
El rey entonces dio órdenes que trajeran a Daniel y lo echaran en el foso de los leones. El rey habló a Daniel y le dijo: "Tu Dios, a quien sirves con perseverancia, El te librará." (Daniel 6:16)
Trajeron una piedra y la pusieron sobre la boca del foso. El rey la selló con su anillo y con los anillos de sus nobles, para que nada pudiera cambiarse de lo ordenado en cuanto a Daniel. (Daniel 6:17)
Después el rey se fue a su palacio y pasó la noche en ayuno. Ningún entretenimiento fue traído ante él y se le fue el sueño. (Daniel 6:18)
Entonces el rey se levantó al amanecer, al rayar el alba, y fue a toda prisa al foso de los leones.
Y acercándose al foso, gritó a Daniel con voz angustiada. El rey habló a Daniel y le dijo: "Daniel, siervo del Dios viviente, tu Dios, a quien sirves con perseverancia, ¿te ha podido librar de los leones?" (Daniel 6:20)
Entonces Daniel respondió al rey: "Oh rey, viva para siempre. (Daniel 6:21)
Mi Dios envió Su ángel, que cerró la boca de los leones, y no me han hecho daño alguno porque fui hallado inocente ante El. Y tampoco ante usted, oh rey, he cometido crimen alguno." (Daniel 6:22)

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Daniel 6:19 - Referencia Cruzada

Por eso también yo, cuando ya no pude soportar más, envié a Timoteo para informarme (para saber) de su fe, por temor a que el tentador los hubiera tentado y que nuestro trabajo hubiera sido en vano. (1 Tesalonicenses 3:5)
no tuve reposo en mi espíritu al no encontrar a Tito, mi hermano. Despidiéndome, pues, de ellos, salí para Macedonia. (2 Corintios 2:13)
Muy de mañana, el primer día de la semana, llegaron al sepulcro cuando el sol ya había salido. (Marcus 16:2)
Pasado el día de reposo, al amanecer del primer día de la semana, María Magdalena y la otra María vinieron a ver el sepulcro. (Mateo 28:1)