Hechos 9:17 - Referencia Cruzada

Y José dijo a sus hermanos: "Acérquense ahora a mí." Y ellos se acercaron, y les dijo: "Yo soy su hermano José, a quien ustedes vendieron a Egipto. (Génesis 45:4)

Después que oraron, el lugar donde estaban reunidos tembló, y todos fueron llenos del Espíritu Santo y hablaban la palabra de Dios con valor. (Hechos 4:31)

El primer hombre es de la tierra, terrenal (hecho del polvo); el segundo hombre es del cielo. (1 Corintios 15:47)

El mensaje (La palabra) que El envió al pueblo de Israel, predicando (anunciando el evangelio) de paz por medio de Jesucristo, que El es Señor de todos. (Hechos 10:36)

Saulo se levantó del suelo, y aunque sus ojos estaban abiertos, no veía nada; y llevándolo por la mano, lo trajeron a Damasco. (Hechos 9:8)

No descuides el don espiritual que está en ti, que te fue conferido por medio de la profecía con la imposición de manos del presbiterio. (1 Timoteo 4:14)

Yo entonces dije: '¿Quién eres, Señor?' Y el Señor dijo: 'Yo soy Jesús a quien tú persigues. (Hechos 26:15)

de la enseñanza sobre lavamientos, de la imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno. (Hebreos 6:2)

Ellos, cuando lo oyeron, glorificaban a Dios y le dijeron: "Hermano, ya ves cuántos miles hay entre los Judíos que han creído, y todos son celosos de la Ley (Mosaica). (Hechos 21:20)

A éstos los presentaron ante los apóstoles, y después de orar, pusieron sus manos sobre ellos. (Hechos 6:6)

Entonces trajeron algunos niños a Jesús para que pusiera las manos sobre ellos y orara; y los discípulos los reprendieron. (Mateo 19:13)

y hará volver a muchos de los Israelitas al Señor su Dios. (Lucas 1:16)

Entonces, después de ayunar, orar y haber impuesto las manos sobre ellos, los enviaron. (Hechos 13:3)

Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque éste, tu hermano, estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado.'" (Lucas 15:32)

Y los discípulos estaban continuamente llenos de gozo y del Espíritu Santo. (Hechos 13:52)

Puesto que en obediencia a la verdad ustedes han purificado sus almas para un amor sincero de hermanos, ámense unos a otros entrañablemente, de corazón puro. (1 Pedro 1:22)

Por lo cual te recuerdo que avives el fuego del don de Dios que hay en ti por la imposición de mis manos. (2 Timoteo 1:6)

Cuando Pablo les impuso las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo, y hablaban en lenguas y profetizaban. (Hechos 19:6)

Y al último de todos, como a uno nacido fuera de tiempo, se me apareció también a mí. (1 Corintios 15:8)

Entonces Pedro y Juan les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo. (Hechos 8:17)

No impongas las manos sobre nadie con ligereza, compartiendo así la responsabilidad por los pecados de otros; guárdate libre de pecado. (1 Timoteo 5:22)

ya no como esclavo, sino como más que un esclavo, como un hermano amado, especialmente para mí, pero cuánto más para ti, tanto en la carne como en el Señor. (Filemón 1:16)

Al caer a tierra, oyó una voz que le decía: "Saulo, Saulo, ¿por qué Me persigues?" (Hechos 9:4)

Y uno llamado Ananías, hombre piadoso según las normas de la Ley, y de quien daban buen testimonio todos los Judíos que vivían allí, (Hechos 22:12)

Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba habilidad para expresarse. (Hechos 2:4)

Y no pudo hacer allí ningún milagro; sólo sanó a unos pocos enfermos sobre los cuales puso Sus manos. (Marcus 6:5)

Y tú, niño, serás llamado profeta del Altísimo; Porque irás DELANTE DEL SEÑOR PARA PREPARAR SUS CAMINOS; (Lucas 1:76)

Por tanto, acéptense los unos a los otros, como también Cristo nos aceptó para la gloria de Dios. (Romanos 15:7)

pero cuando vino este hijo tuyo, que ha consumido tus bienes con rameras, mataste para él el becerro engordado.' (Lucas 15:30)

porque les ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo (el Mesías) el Señor. (Lucas 2:11)