Entonces Jesús dijo al centurión: "Vete; así como has creído, te sea hecho." Y el criado fue sanado en esa misma hora.
(Mateo 8:13)Cuando Jesús llegó a casa de Pedro, vio a la suegra de éste que estaba en cama con fiebre.
(Mateo 8:14)Le tocó la mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó y Le servía.
(Mateo 8:15)Y al atardecer, Le trajeron muchos endemoniados; y expulsó a los espíritus con Su palabra, y sanó a todos los que estaban enfermos,
para que se cumpliera lo que fue dicho por medio del profeta Isaías cuando dijo: "EL TOMO NUESTRAS FLAQUEZAS Y LLEVO NUESTRAS ENFERMEDADES."
(Mateo 8:17)Viendo Jesús una multitud a Su alrededor, dio orden de pasar al otro lado del mar.
(Mateo 8:18)Y un escriba se acercó y Le dijo: "Maestro, Te seguiré adondequiera que vayas."
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Mateo 8:16 - Referencia Cruzada
Y Le trajeron un paralítico echado en una camilla; y Jesús, viendo la fe de ellos, dijo al paralítico: "Anímate, hijo, tus pecados te son perdonados."
(Mateo 9:2)Y Dios les dijo: "Si escuchas atentamente la voz del SEÑOR tu Dios, y haces lo que es recto ante Sus ojos, y escuchas Sus mandamientos, y guardas todos Sus estatutos, no te enviaré ninguna de las enfermedades que envié sobre los Egipcios. Porque Yo, el SEÑOR, soy tu sanador."
(Éxodo 15:26)Porque Jesús le decía: "Sal del hombre, espíritu inmundo."
(Marcus 5:8)a tal punto que aun sacaban a los enfermos a las calles y los tendían en lechos y camillas, para que al pasar Pedro, siquiera su sombra cayera sobre alguno de ellos.
(Hechos 5:15)Y Jesús iba por toda Galilea, enseñando en sus sinagogas, proclamando el evangelio (las buenas nuevas) del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.
(Mateo 4:23)A la caída de la tarde, después de la puesta del sol, trajeron a Jesús todos los que estaban enfermos y los endemoniados.
(Marcus 1:32)Entonces vinieron y Le trajeron un paralítico llevado entre cuatro hombres.
(Marcus 2:3)Cuando Jesús vio que la gente corría a reunirse, reprendió al espíritu inmundo, diciéndole: "Espíritu mudo y sordo, Yo te ordeno: sal de él y no vuelvas a entrar en él."
(Marcus 9:25)Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos de diversas enfermedades se los llevaban a El; y poniendo las manos sobre cada uno de ellos, los sanaba.
(Lucas 4:40)Jesús lo reprendió, diciendo: "¡Cállate, y sal de él!"
(Marcus 1:25)Pero también algunos de los Judíos, exorcistas ambulantes, trataron de invocar el nombre del Señor Jesús sobre los que tenían espíritus malos, diciendo: "Les ordeno que salgan, en el Nombre de Jesús a quien Pablo predica."
(Hechos 19:13)Los que cuidaban la manada huyeron; y fueron a la ciudad y lo contaron todo, incluso lo de los endemoniados.
(Mateo 8:33)Cuando Jesús desembarcó, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos y sanó a sus enfermos.
(Mateo 14:14)Entonces trajeron a Jesús un endemoniado ciego y mudo, y lo sanó, de manera que el mudo hablaba y veía.
(Mateo 12:22)