Tenemos un Dios que se interesa en nosotros
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
Hay un último elemento de este pasaje que me intriga y yo creo que nos instruye mucho. Dice que cuando el Señor pregunta ¿quién ha tocado mis vestidos? y el Señor está mirando alrededor de Él para ver quién había hecho esto, en el versículo 33 dice que: "Entonces la mujer temiendo y temblando, sabiendo lo que en ella había sido hecho, vino y se postró delante de Él y le dijo toda la verdad. Y el Señor le dijo: hija, tu fé te ha hecho salva, ve en paz y queda sana de tu azote."
Eso es interesante. Eso es como un postludio, es como una nota final a este maravilloso incidente ¿no?. Donde el relato se hubiera podido quedar ahí simplemente con la sanidad de la mujer y el Señor pues la sana y eso es todo, y continúa su camino hacia la casa de Jairo. Pero al Señor le intriga y le causa interés lo que ha pasado en este momento, y entonces pregunta ¿quién me ha tocado?.