Nueva Biblia Latinoamericana
Jeremías trató de salir de Jerusalén para ir a la tierra de Benjamín a tomar allí posesión de una propiedad en el pueblo. (Jeremías 37:12)
Estando él a la Puerta de Benjamín, había allí un capitán de la guardia que se llamaba Irías, hijo de Selemías, hijo de Hananías, el cual apresó al profeta Jeremías, diciéndole: "Tú vas a pasarte a los Caldeos." (Jeremías 37:13)
Pero Jeremías dijo: "¡No es verdad! No voy a pasarme a los Caldeos." Sin embargo él no le hizo caso. Apresó, pues, a Jeremías y lo llevó a los oficiales. (Jeremías 37:14)
Entonces los oficiales se enojaron contra Jeremías y lo azotaron, y lo encarcelaron en la casa del escriba Jonatán, la cual habían convertido en prisión.
Entró, pues, Jeremías en el calabozo, es decir, en la celda abovedada; y allí permaneció Jeremías muchos días. (Jeremías 37:16)
El rey Sedequías envió a sacarlo, y en su palacio el rey le preguntó secretamente, y le dijo: "¿Hay palabra del SEÑOR?" "La hay," respondió Jeremías. Y añadió: "En manos del rey de Babilonia será entregado." (Jeremías 37:17)
Dijo también Jeremías al rey Sedequías: "¿En qué he pecado contra usted, o contra sus siervos, o contra este pueblo para que me haya puesto en prisión? (Jeremías 37:18)

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Jeremías 37:15 - Referencia Cruzada

Pero ahora, le ruego que escuche, oh rey mi señor; venga ahora mi súplica delante de usted, y no me haga volver a la casa del escriba Jonatán, no sea que yo muera allí." (Jeremías 37:20)
Otros experimentaron insultos y azotes, y hasta cadenas y prisiones. (Hebreos 11:36)
Entonces Le escupieron en el rostro y Le dieron puñetazos; y otros Lo abofeteaban, (Mateo 26:67)
Habiéndolo arrestado, lo puso en la cárcel, entregándolo a cuatro grupos de soldados para que lo custodiaran, con la intención de llevarlo ante el pueblo después de la Pascua. (Hechos 12:4)
Entonces los jefes y todo el pueblo dijeron a los sacerdotes y a los profetas: "Que no haya sentencia de muerte para este hombre, porque en nombre del SEÑOR nuestro Dios nos ha hablado." (Jeremías 26:16)
Pero los labradores, tomando a los siervos, a uno lo golpearon, a otro lo mataron y a otro lo apedrearon. (Mateo 21:35)
Les dimos órdenes estrictas de no continuar enseñando en este Nombre, y han llenado a Jerusalén con sus enseñanzas, y quieren traer sobre nosotros la sangre de este Hombre." (Hechos 5:28)
La multitud se levantó a una contra ellos, y los magistrados superiores, rasgándoles sus ropas, ordenaron que los azotaran con varas. (Hechos 16:22)
Y el sumo sacerdote Ananías ordenó a los que estaban junto a él, que lo golpearan en la boca. (Hechos 23:2)
Le vendaron los ojos, y Le preguntaban: "Adivina, ¿quién es el que Te ha golpeado?" (Lucas 22:64)
Cuando dijo esto, uno de los guardias que estaba cerca, dio una bofetada a Jesús, diciendo: "¿Así respondes al sumo sacerdote?" (Juan 18:22)
Ellos aceptaron su consejo, y después de llamar a los apóstoles, los azotaron y les ordenaron que no hablaran más en el nombre de Jesús y los soltaron. (Hechos 5:40)
No temas lo que estás por sufrir. Yo te digo que el diablo echará a algunos de ustedes en la cárcel para que sean probados, y tendrán tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y Yo te daré la corona de la vida. (Apocalipsis 2:10)
Entonces echaron mano a los apóstoles y los pusieron en una cárcel pública. (Hechos 5:18)
Entonces Asa se irritó contra el vidente y lo metió en la cárcel, porque estaba enojado contra él por esto. Por ese tiempo, Asa oprimió a algunos del pueblo. (2 Crónicas 16:10)
Entonces ellos tomaron a Jeremías, y bajándolo con cuerdas lo echaron en la cisterna de Malaquías, hijo del rey, que había en el patio de la guardia. En la cisterna no había agua, sino lodo, así que Jeremías se hundió en el lodo. (Jeremías 38:6)
¿Son servidores de Cristo? (Hablo como si hubiera perdido el juicio) yo más. En muchos más trabajos, en muchas más cárceles, en azotes un sinnúmero de veces, con frecuencia en peligros de muerte. (2 Corintios 11:23)
Cuando el sacerdote Pasur, hijo de Imer, que era el oficial principal en la casa del SEÑOR, oyó a Jeremías profetizar estas cosas, (Jeremías 20:1)
tú les dirás: 'Presentaba al rey mi súplica de que no me hiciera volver a la casa de Jonatán, a morir allí.'" (Jeremías 38:26)
Entonces el amo de José lo tomó y lo echó en la cárcel, en el lugar donde se encerraba a los presos del rey. Allí permaneció en la cárcel. (Génesis 39:20)
Al tiempo de la vendimia envió un siervo a los labradores para que le dieran parte del fruto de la viña; pero los labradores, después de golpearlo, lo enviaron con las manos vacías. (Lucas 20:10)
Por tanto, miren, Yo les envío profetas, sabios y escribas. A algunos de ellos, ustedes los matarán y crucificarán, y a otros los azotarán en sus sinagogas y los perseguirán de ciudad en ciudad, (Mateo 23:34)
y díganles: 'Así dice el rey: "Echen a éste en la cárcel, y aliméntenlo con poco pan y poca agua hasta que yo vuelva en paz."'" (2 Crónicas 18:26)