Sea esta la paga del SEÑOR para mis acusadores, Y para los que hablan mal contra mi alma.
(Salmos 109:20)
Pero Tú, oh DIOS, Señor, por amor de Tu nombre hazme bien; Líbrame, pues es buena Tu misericordia;
(Salmos 109:21)
Porque afligido y necesitado estoy, Y mi corazón está herido dentro de mí.
(Salmos 109:22)
Voy pasando como sombra que se alarga; Soy sacudido como la langosta.
Mis rodillas están débiles por el ayuno, Y mi carne sin gordura ha enflaquecido.
(Salmos 109:24)
Me he convertido también en objeto de oprobio para ellos; Cuando me ven, menean la cabeza.
(Salmos 109:25)
Ayúdame, SEÑOR, Dios mío, Sálvame conforme a Tu misericordia;
(Salmos 109:26)
Otras publicaciones relacionadas con "Salmos 109:23":
Salmos 109:23 - Referencia Cruzada
A causa de Tu indignación y de Tu enojo; Pues Tú me has levantado y me has rechazado.
(Salmos 102:10)
El hombre es semejante a un soplo; Sus días son como una sombra que pasa.
(Salmos 144:4)
Como una flor brota y se marchita, Y como una sombra huye y no permanece.
(Job 14:2)
Porque, ¿quién sabe lo que es bueno para el hombre durante su vida, en los contados días de su vana vida? Los pasará como una sombra. Pues, ¿quién hará saber al hombre lo que sucederá después de él bajo el sol?
(Eclesiastés 6:12)
Pero no le irá bien al impío, ni alargará sus días como una sombra, porque no teme ante la presencia de Dios.
(Eclesiastés 8:13)
Moisés extendió su vara sobre la tierra de Egipto, y el SEÑOR hizo soplar un viento del oriente sobre el país todo aquel día y toda aquella noche. Y al venir la mañana, el viento del oriente trajo las langostas.
(Éxodo 10:13)
Porque somos extranjeros y peregrinos delante de Ti, como lo fueron todos nuestros padres; como una sombra son nuestros días sobre la tierra, y no hay esperanza.
(1 Crónicas 29:15)
Sin embargo, ustedes no saben cómo será su vida mañana. Sólo son un vapor que aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece.
(Santiago 4:14)
Y el SEÑOR cambió el viento a un viento occidental muy fuerte que se llevó las langostas y las arrojó al Mar Rojo. Ni una langosta quedó en todo el territorio de Egipto.
(Éxodo 10:19)