Nueva Biblia Latinoamericana
¿Quién es este Rey de la gloria? El SEÑOR de los ejércitos, El es el Rey de la gloria. (Selah) (Salmos 24:10)
Salmo de David. A Ti, oh SEÑOR, elevo mi alma. (Salmos 25:1)
Dios mío, en Ti confío; No sea yo avergonzado, Que no se regocijen sobre mí mis enemigos. (Salmos 25:2)
Ciertamente ninguno de los que esperan en Ti será avergonzado; Sean avergonzados los que sin causa se rebelan.
SEÑOR, muéstrame Tus caminos, Enséñame Tus sendas. (Salmos 25:4)
Guíame en Tu verdad y enséñame, Porque Tú eres el Dios de mi salvación; En Ti espero todo el día. (Salmos 25:5)
Acuérdate, oh SEÑOR, de Tu compasión y de Tus misericordias, Que son eternas. (Salmos 25:6)

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Salmos 25:3 - Referencia Cruzada

Zabulón habitará a la orilla del mar; Y él será puerto para naves, Y su límite será hasta Sidón. (Génesis 49:13)
Bueno es el SEÑOR para los que en El esperan, Para el alma que Lo busca. (Lamentaciones 3:25)
Reyes serán tus tutores, Y sus princesas, tus nodrizas. Rostro en tierra te rendirán homenaje Y el polvo de tus pies lamerán. Y sabrás que Yo soy el SEÑOR, Y que no se avergonzarán los que esperan en Mí. (Isaías 49:23)
Me han rodeado también con palabras de odio, Y sin causa han luchado contra mí. (Salmos 109:3)
Para el director del coro; según Jedutún. Salmo de David. En Dios solamente espera en silencio mi alma; De El viene mi salvación. (Salmos 62:1)
Para el director del coro. Salmo de David. Esperé pacientemente al SEÑOR, Y El se inclinó a mí y oyó mi clamor. (Salmos 40:1)
Líbrame de los que hacen iniquidad, Y sálvame de los hombres sanguinarios. (Salmos 59:2)
Pero ellos han hecho esto para que se cumpla la palabra que está escrita en su Ley: 'ME ODIARON SIN CAUSA.' (Juan 15:25)
Más que los cabellos de mi cabeza son los que sin causa me aborrecen; Poderosos son los que quieren destruirme, Sin razón son mis enemigos, Me hacen devolver aquello que no robé. (Salmos 69:4)
Espera al SEÑOR; Esfuérzate y aliéntese tu corazón. Sí, espera al SEÑOR. (Salmos 27:14)
Pero el SEÑOR está conmigo como campeón temible; Por tanto, mis perseguidores tropezarán y no prevalecerán. Quedarán muy avergonzados, pues no triunfaron, Tendrán afrenta perpetua que nunca será olvidada. (Jeremías 20:11)
Sean avergonzados y humillados a una Los que buscan mi vida para destruirla; Sean vueltos atrás y cubiertos de ignominia Los que se complacen en mi mal. (Salmos 40:14)
Si he pagado con el mal al que estaba en paz conmigo, O he despojado al que sin causa era mi adversario, (Salmos 7:4)
Todos mis enemigos serán avergonzados y se turbarán en gran manera; Se volverán, y de repente serán avergonzados. (Salmos 6:10)
¡No se avergüencen de mí los que en Ti esperan, oh Señor, DIOS de los ejércitos! ¡No sean humillados por mí los que Te buscan, oh Dios de Israel! (Salmos 69:6)
Alma mía, espera en silencio solamente en Dios, Pues de El viene mi esperanza. (Salmos 62:5)
Pero yo pondré mis ojos en el SEÑOR, Esperaré en el Dios de mi salvación. Mi Dios me oirá. (Miqueas 7:7)
Nuestra alma espera al SEÑOR; El es nuestra ayuda y nuestro escudo; (Salmos 33:20)
Pero los que esperan en el SEÑOR Renovarán sus fuerzas. Se remontarán con alas como las águilas, Correrán y no se cansarán, Caminarán y no se fatigarán. (Isaías 40:31)
Sean avergonzados los soberbios, porque me agravian con mentira; Pero yo en Tus preceptos meditaré. (Salmos 119:78)
Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia (perseverancia) lo aguardamos. (Romanos 8:25)
Y en aquel día se dirá: "Este es nuestro Dios a quien hemos esperado para que nos salvara. Este es el SEÑOR a quien hemos esperado; Regocijémonos y alegrémonos en su salvación." (Isaías 25:9)
Oh SEÑOR, no sea yo avergonzado, porque a Ti clamo; Sean avergonzados los impíos; que desciendan en silencio al Seol. (Salmos 31:17)
Sean avergonzados y humillados a una los que se alegran de mi mal; Cúbranse de vergüenza y deshonra los que se engrandecen contra mí. (Salmos 35:26)
Sean avergonzados y humillados Los que buscan mi vida; Sean vueltos atrás y cubiertos de ignominia Los que se complacen en mi mal. (Salmos 70:2)
A sus enemigos cubriré de vergüenza, Pero sobre él resplandecerá su corona." (Salmos 132:18)
Como los ojos de los siervos miran a la mano de su señor, Como los ojos de la sierva a la mano de su señora, Así nuestros ojos miran al SEÑOR nuestro Dios Hasta que se apiade de nosotros. (Salmos 123:2)
Espera en el SEÑOR y guarda Su camino, Y El te exaltará para que poseas la tierra. Cuando los impíos sean exterminados, tú lo verás. (Salmos 37:34)
Sean avergonzados y consumidos los enemigos de mi alma; Sean cubiertos de afrenta y de ignominia los que procuran mi mal. (Salmos 71:13)