Mi alma también está muy angustiada; Y Tú, oh SEÑOR, ¿hasta cuándo?
(Salmos 6:3)
Vuélvete, SEÑOR, rescata mi alma; Sálvame por Tu misericordia.
(Salmos 6:4)
Porque no hay en la muerte memoria de Ti; En el Seol, ¿quién Te da gracias?
(Salmos 6:5)
Cansado estoy de mis gemidos; Todas las noches inundo de llanto mi lecho, Con mis lágrimas riego mi cama.
Se consumen de sufrir mis ojos; Han envejecido a causa de todos mis adversarios.
(Salmos 6:7)
Apártense de mí, todos ustedes que hacen iniquidad, Porque el SEÑOR ha oído la voz de mi llanto.
(Salmos 6:8)
El SEÑOR ha escuchado mi súplica; El SEÑOR recibe mi oración.
(Salmos 6:9)
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Salmos 6:6 - Referencia Cruzada
Por tanto, en mí está agobiado mi espíritu; Mi corazón está turbado dentro de mí.
(Salmos 143:4)
Llora amargamente en la noche, Y le corren las lágrimas por sus mejillas. No hay quien la consuele Entre todos sus amantes. Todos sus amigos la han traicionado, Se han convertido en sus enemigos.
(Lamentaciones 1:2)
Escucha mi oración, oh SEÑOR, y presta oído a mi clamor; No guardes silencio ante mis lágrimas; Porque extranjero soy junto a Ti, Peregrino, como todos mis padres.
(Salmos 39:12)
Porque mis días han sido consumidos en humo, Y como brasero han sido quemados mis huesos.
(Salmos 102:3)
Señor, todo mi anhelo está delante de Ti, Y mi suspiro no Te es oculto.
(Salmos 38:9)
Mis ojos se consumen por las lágrimas, Hierven mis entrañas; Mi hiel se derrama por tierra, A causa de la destrucción de la hija de mi pueblo (Jerusalén), Cuando niños y lactantes desfallecen En las calles de la ciudad.
(Lamentaciones 2:11)
y poniéndose detrás de El a Sus pies, llorando, comenzó a regar Sus pies con lágrimas y los secaba con los cabellos de su cabeza, besaba Sus pies y los ungía con el perfume.
(Lucas 7:38)
Cansado estoy de llorar; reseca está mi garganta; Mis ojos desfallecen mientras espero a mi Dios.
(Salmos 69:3)
Han languidecido mis ojos a causa de la aflicción; Oh SEÑOR, cada día Te he invocado, He extendido mis manos hacia Ti.
(Salmos 88:9)
Hastiado estoy de mi vida: Daré rienda suelta a mi queja, Hablaré en la amargura de mi alma.
(Job 10:1)
En el día de mi angustia busqué al Señor; En la noche mi mano se extendía sin cansarse; Mi alma rehusaba ser consolada.
(Salmos 77:2)
Mis amigos son mis escarnecedores; Mis ojos lloran a Dios.
(Job 16:20)
Mis lágrimas han sido mi alimento de día y de noche, Mientras me dicen todo el día: "¿Dónde está tu Dios?"
(Salmos 42:3)
Aun hoy mi queja es rebelión; Su mano es pesada a pesar de mi gemido.
(Job 23:2)
Así me han dado en herencia meses inútiles, Y noches de aflicción me han asignado.
(Job 7:3)
Arroyos de lágrimas derraman mis ojos A causa de la destrucción de la hija de mi pueblo (Jerusalén).
(Lamentaciones 3:48)
El corazón de ellos clamó al Señor: "Muralla de la hija de Sion, Corran tus lágrimas como un río día y noche, No te des reposo, No tengan descanso tus ojos.
(Lamentaciones 2:18)
Tú les dirás esta palabra: 'Que viertan lágrimas mis ojos noche y día, Sin cesar, Porque con gran quebranto ha sido quebrantada la virgen hija de mi pueblo, De una herida muy dolorosa.
(Jeremías 14:17)
Por estas cosas lloro yo; Mis ojos derraman agua, Porque lejos de mí está el consolador, El que reanima mi alma. Mis hijos están desolados Porque ha prevalecido el enemigo."
(Lamentaciones 1:16)