Desde lo alto El envió fuego Que penetró en mis huesos. Ha tendido una red a mis pies, Me ha hecho volver atrás; Me ha dejado desolada, Desfallecida todo el día.
(Lamentaciones 1:13)Atado ha sido el yugo de mis transgresiones, Por la mano del SEÑOR han sido entrelazadas, Han caído sobre mi cuello. El ha hecho que me falten las fuerzas; El Señor me ha entregado en manos Contra las cuales no puedo resistir.
(Lamentaciones 1:14)A todos mis valientes ha rechazado el Señor De en medio de mí; Ha convocado contra mí un tiempo determinado Para quebrantar a mis jóvenes; El Señor ha pisoteado, como en un lagar, A la virgen hija de Judá.
(Lamentaciones 1:15)Por estas cosas lloro yo; Mis ojos derraman agua, Porque lejos de mí está el consolador, El que reanima mi alma. Mis hijos están desolados Porque ha prevalecido el enemigo."
Sion extiende sus manos; No hay quien la consuele. El SEÑOR ha ordenado contra Jacob Que los que lo rodean sean sus adversarios; Jerusalén se ha vuelto cosa inmunda en medio de ellos.
(Lamentaciones 1:17)El SEÑOR es justo, Pues me he rebelado contra Su mandamiento. Oigan ahora, pueblos todos, Y vean mi dolor: Mis vírgenes y mis jóvenes Han ido al cautiverio.
(Lamentaciones 1:18)Llamé a mis amantes, mas ellos me han engañado. Mis sacerdotes y mis ancianos han perecido en la ciudad, Cuando buscaban alimento para sí a fin de restaurar sus fuerzas.
(Lamentaciones 1:19)Otras publicaciones relacionadas con "Lamentaciones 1:16":
Lamentaciones 1:16 - Referencia Cruzada
Mira, oh SEÑOR, y observa: ¿A quién has tratado así? ¿Habían de comerse las mujeres el fruto de sus entrañas , A los pequeños criados con cariño? ¿Habían de ser muertos en el santuario del Señor El sacerdote y el profeta?
(Lamentaciones 2:20)Arroyos de lágrimas derraman mis ojos A causa de la destrucción de la hija de mi pueblo (Jerusalén).
(Lamentaciones 3:48)Llora amargamente en la noche, Y le corren las lágrimas por sus mejillas. No hay quien la consuele Entre todos sus amantes. Todos sus amigos la han traicionado, Se han convertido en sus enemigos.
(Lamentaciones 1:2)Mis ojos se consumen por las lágrimas, Hierven mis entrañas; Mi hiel se derrama por tierra, A causa de la destrucción de la hija de mi pueblo (Jerusalén), Cuando niños y lactantes desfallecen En las calles de la ciudad.
(Lamentaciones 2:11)Digo la verdad en Cristo, no miento, dándome testimonio mi conciencia en el Espíritu Santo,
(Romanos 9:1)Los hijos preciados de Sion, Que valían su peso en oro puro, ¡Cómo son tenidos por vasijas de barro, Obra de manos de alfarero!
(Lamentaciones 4:2)Alcen por los montes lloro y lamentación, Y una elegía por los pastos del desierto, Porque han sido desolados; nadie pasa por ellos , Ni se oye el bramido del ganado; Desde las aves del cielo hasta las bestias han huido, se han ido.
(Jeremías 9:10)Porque la muerte ha subido por nuestras ventanas, Ha entrado en nuestros palacios, Exterminando a los niños de las calles, A los jóvenes de las plazas.
(Jeremías 9:21)La afrenta ha quebrantado mi corazón, y estoy enfermo; Esperé compasión, pero no la hubo; Busqué consoladores, pero no los hallé.
(Salmos 69:20)Quién me diera que mi cabeza se hiciera agua, Y mis ojos fuente de lágrimas, Para que yo llorara día y noche Por los muertos de la hija de mi pueblo.
(Jeremías 9:1)Aunque críen a sus hijos, Se los quitaré hasta que no quede hombre alguno. Sí, ¡ay de ellos también cuando de ellos Me aparte!
(Oseas 9:12)Tú les dirás esta palabra: 'Que viertan lágrimas mis ojos noche y día, Sin cesar, Porque con gran quebranto ha sido quebrantada la virgen hija de mi pueblo, De una herida muy dolorosa.
(Jeremías 14:17)Su inmundicia está en sus faldas; No consideró su futuro, Por tanto ha caído de manera sorprendente; No hay quien la consuele. "Mira, oh SEÑOR, mi aflicción, Porque se ha engrandecido el enemigo."
(Lamentaciones 1:9)Sus adversarios se han convertido en sus amos, Sus enemigos prosperan, Porque el SEÑOR la ha afligido Por la multitud de sus transgresiones; Sus niños han ido cautivos Delante del adversario.
(Lamentaciones 1:5)Ríos de lágrimas vierten mis ojos, Porque ellos no guardan Tu ley.
(Salmos 119:136)Cuando Jesús se acercó, al ver la ciudad, lloró sobre ella,
(Lucas 19:41)Entonces yo me volví y observé todas las opresiones que se cometen bajo el sol: Y vi las lágrimas de los oprimidos, Y no tenían quien los consolara; En mano de sus opresores estaba el poder, Y no tenían quien los consolara.
(Eclesiastés 4:1)Pero si no escuchan esto, Mi alma sollozará en secreto por tal orgullo; Mis ojos llorarán amargamente Y se llenarán de lágrimas, Porque ha sido hecho cautivo el rebaño del SEÑOR.
(Jeremías 13:17)El corazón de ellos clamó al Señor: "Muralla de la hija de Sion, Corran tus lágrimas como un río día y noche, No te des reposo, No tengan descanso tus ojos.
(Lamentaciones 2:18)