Lucas 6:21 - Referencia Cruzada

Porque derramaré agua sobre la tierra sedienta, Y torrentes sobre la tierra seca. Derramaré Mi Espíritu sobre tu posteridad, Y Mi bendición sobre tus descendientes. (Isaías 44:3)

Quién me diera que mi cabeza se hiciera agua, Y mis ojos fuente de lágrimas, Para que yo llorara día y noche Por los muertos de la hija de mi pueblo. (Jeremías 9:1)

A LOS HAMBRIENTOS HA COLMADO DE BIENES Y ha despedido a los ricos con las manos vacías. (Lucas 1:53)

Los que siembran con lágrimas, segarán con gritos de júbilo. (Salmos 126:5)

Entonces la virgen se alegrará en la danza, Y los jóvenes y los ancianos a una; Cambiaré su duelo en gozo, Los consolaré y los alegraré de su tristeza. (Jeremías 31:13)

¡Ay de ustedes, los que ahora están saciados! Porque tendrán hambre. ¡Ay de ustedes, los que ahora ríen! Porque se lamentarán y llorarán. (Lucas 6:25)

Cuán bienaventurado es aquel que Tú escoges, y acercas a Ti , Para que more en Tus atrios. Seremos saciados con el bien de Tu casa, Tu santo templo. (Salmos 65:4)

Cansado estoy de mis gemidos; Todas las noches inundo de llanto mi lecho, Con mis lágrimas riego mi cama. (Salmos 6:6)

En el último día, el gran día de la fiesta, Jesús puesto en pie, exclamó en alta voz: "Si alguien tiene sed, que venga a Mí y beba. (Juan 7:37)

el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que también nosotros podamos consolar a los que están en cualquier aflicción, dándoles el consuelo con que nosotros mismos somos consolados por Dios. (2 Corintios 1:4)

Entonces oí una gran voz que decía desde el trono: "El tabernáculo de Dios está entre los hombres, y El habitará entre ellos y ellos serán Su pueblo, y Dios mismo estará entre ellos. (Apocalipsis 21:3)

Para el director del coro. Masquil de los hijos de Coré. Como el ciervo anhela las corrientes de agua, Así suspira por Ti, oh Dios, el alma mía. (Salmos 42:1)

Jesús le respondió: "Si tú conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: 'Dame de beber,' tú Le habrías pedido a El, y El te hubiera dado agua viva." (Juan 4:10)

en trabajos y fatigas, en muchas noches de desvelo, en hambre y sed, con frecuencia sin comida, en frío y desnudez. (2 Corintios 11:27)

Por eso me complazco en las debilidades, en insultos (maltratos), en privaciones, en persecuciones y en angustias por amor a Cristo, porque cuando soy débil, entonces soy fuerte. (2 Corintios 12:10)

Sara dijo: "Dios me ha hecho reír; cualquiera que lo oiga se reirá conmigo." (Génesis 21:6)

En verdad les digo, que llorarán y se lamentarán, pero el mundo se alegrará; ustedes estarán tristes, pero su tristeza se convertirá en alegría. (Juan 16:20)

y el SEÑOR le dijo: "Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y pon una señal en la frente de los hombres que gimen y se lamentan por todas las abominaciones que se cometen en medio de ella." (Ezequiel 9:4)

Tú has cambiado mi lamento en danza; Has desatado mi ropa de luto y me has ceñido de alegría; (Salmos 30:11)

Ríos de lágrimas vierten mis ojos, Porque ellos no guardan Tu ley. (Salmos 119:136)

El SEÑOR de los ejércitos preparará en este monte para todos los pueblos un banquete de manjares suculentos, Un banquete de vino añejo, pedazos escogidos con tuétano, Y vino añejo refinado. (Isaías 25:6)

Jesús lloró. (Juan 11:35)

En lo cual ustedes se regocijan grandemente, aunque ahora, por un poco de tiempo si es necesario, sean afligidos con diversas pruebas (tentaciones), (1 Pedro 1:6)

Tengan por sumo gozo, hermanos míos, cuando se hallen en diversas pruebas (tentaciones), (Santiago 1:2)

Porque la tristeza que es conforme a la voluntad de Dios produce un arrepentimiento que conduce a la salvación, sin dejar pesar; pero la tristeza del mundo produce muerte. (2 Corintios 7:10)

Con llanto vendrán, Y entre súplicas los guiaré. Los haré andar junto a arroyos de aguas, Por camino derecho en el cual no tropezarán; Porque soy un padre para Israel, Y Efraín es Mi primogénito." (Jeremías 31:9)

Para decir a los presos: 'Salgan'; A los que están en tinieblas: 'Muéstrense.' Por los caminos pastarán, Y en todas las alturas desoladas tendrán sus pastos. (Isaías 49:9)

Ya no tendrán hambre ni sed, ni el sol les hará daño, ni ningún calor abrasador, (Apocalipsis 7:16)

El Espíritu del Señor DIOS está sobre mí, Porque me ha ungido el SEÑOR Para traer buenas nuevas a los afligidos. Me ha enviado para vendar a los quebrantados de corazón, Para proclamar libertad a los cautivos Y liberación a los prisioneros; (Isaías 61:1)

El SEÑOR es mi fuerza y mi escudo; En El confía mi corazón, y soy socorrido; Por tanto, mi corazón se regocija, Y Le daré gracias con mi cántico. (Salmos 28:7)

Mejor es ir a una casa de luto Que ir a una casa de banquete, Porque aquello (la muerte) es el fin de todo hombre, Y al que vive lo hará reflexionar en su corazón. (Eclesiastés 7:2)

A causa de la iniquidad de su codicia, Me enojé y lo herí. Escondí Mi rostro y Me indigné, Y él siguió desviándose por el camino de su corazón. (Isaías 57:17)

Alégrense con Jerusalén y regocíjense por ella, todos los que la aman; Rebosen de júbilo con ella, todos los que por ella hacen duelo, (Isaías 66:10)

Porque Yo he de satisfacer al alma cansada y he de saciar a toda alma atribulada." (Jeremías 31:25)

En cuanto a mí, en justicia contemplaré Tu rostro; Al despertar, me saciaré cuando contemple Tu semblante. (Salmos 17:15)

Jesús les dijo: "Yo soy el pan de la vida; el que viene a Mí no tendrá hambre, y el que cree en Mí nunca tendrá sed. (Juan 6:35)

Hasta el momento presente pasamos hambre y sed, andamos mal vestidos, somos maltratados y no tenemos dónde vivir. (1 Corintios 4:11)

Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, pues ellos serán saciados. (Mateo 5:6)

Bienaventurados los que lloran, pues ellos serán consolados. (Mateo 5:4)

Oh pueblo de Sion, morador de Jerusalén, no llorarás más. Ciertamente Dios se apiadará de ti a la voz de tu clamor. Cuando la oiga, te responderá. (Isaías 30:19)

Todos los sedientos, vengan a las aguas; Y los que no tengan dinero, vengan, compren y coman. Vengan, compren vino y leche Sin dinero y sin costo alguno. (Isaías 55:1)

Bienaventurado el hombre que persevera bajo la prueba, porque una vez que ha sido aprobado (ha pasado la prueba), recibirá la corona de la vida que el Señor ha prometido a los que Lo aman. (Santiago 1:12)

Entonces Abraham se postró sobre su rostro y se rió, y dijo en su corazón: "¿A un hombre de cien años le nacerá un hijo? ¿Y Sara, que tiene noventa años, concebirá?" (Génesis 17:17)

como entristecidos, pero siempre gozosos; como pobres, pero enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, aunque poseyéndolo todo. (2 Corintios 6:10)

Digo la verdad en Cristo, no miento, dándome testimonio mi conciencia en el Espíritu Santo, (Romanos 9:1)

Salmo de David, cuando estaba en el desierto de Judá. Oh Dios, Tú eres mi Dios; Te buscaré con afán. Mi alma tiene sed de Ti, mi carne Te anhela Cual tierra seca y árida donde no hay agua. (Salmos 63:1)

Porque El ha saciado al alma sedienta, Y ha llenado de bienes al alma hambrienta. (Salmos 107:9)

A Ti extiendo mis manos; Mi alma Te anhela como la tierra sedienta. (Selah) (Salmos 143:6)

Y en aquel día dirás: "Te doy gracias, oh SEÑOR, Porque aunque estabas enojado conmigo, Tu ira se ha apartado Y me has consolado. (Isaías 12:1)

Pero si no escuchan esto, Mi alma sollozará en secreto por tal orgullo; Mis ojos llorarán amargamente Y se llenarán de lágrimas, Porque ha sido hecho cautivo el rebaño del SEÑOR. (Jeremías 13:17)

Ciertamente he oído a Efraín lamentarse: 'Me has castigado, y castigado fui Como becerro indómito. Hazme volver para que sea restaurado, Pues Tú, SEÑOR, eres mi Dios. (Jeremías 31:18)

Aun cuando escapen los sobrevivientes, estarán sobre los montes como palomas de los valles, todos ellos gimiendo por su iniquidad. (Ezequiel 7:16)

Por tanto, así dice el Señor DIOS: "Ciertamente Mis siervos comerán, pero ustedes tendrán hambre. Mis siervos beberán, pero ustedes tendrán sed. Mis siervos se alegrarán, pero ustedes serán avergonzados; (Isaías 65:13)

Cántico de ascenso gradual. Cuando el SEÑOR hizo volver a los cautivos de Sion, Eramos como los que sueñan. (Salmos 126:1)