Nueva Biblia Latinoamericana
Y él se fue, y empezó a proclamar en Decápolis cuán grandes cosas Jesús había hecho por él; y todos se quedaban maravillados. (Marcus 5:20)
Cuando Jesús pasó otra vez en la barca al otro lado, se reunió una gran multitud alrededor de El; así que El se quedó junto al mar. (Marcus 5:21)
Y vino uno de los oficiales de la sinagoga, llamado Jairo, y al ver a Jesús, se postró a Sus pies, (Marcus 5:22)
y Le rogaba con insistencia: "Mi hijita está al borde de la muerte; Te ruego que vengas y pongas las manos sobre ella para que sane y viva."
Jesús fue con él; y una gran multitud Lo seguía y oprimía. (Marcus 5:24)
Había una mujer que padecía de flujo de sangre por doce años. (Marcus 5:25)
Había sufrido mucho a manos de muchos médicos, y había gastado todo lo que tenía sin provecho alguno, sino que al contrario, había empeorado. (Marcus 5:26)

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Marcus 5:23 - Referencia Cruzada

Invoca Mi nombre en el día de la angustia; Yo te libraré, y tú Me honrarás." (Salmos 50:15)
Y Le trajeron a uno que era sordo y tartamudo, y Le rogaron que pusiera la mano sobre él. (Marcus 7:32)
Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos de diversas enfermedades se los llevaban a El; y poniendo las manos sobre cada uno de ellos, los sanaba. (Lucas 4:40)
tomarán serpientes en las manos, y aunque beban algo mortífero, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán las manos, y se pondrán bien." (Marcus 16:18)
Las hermanas entonces mandaron a decir a Jesús: "Señor, el que Tú amas está enfermo." (Juan 11:3)
Pero Naamán se enojó, y se fue diciendo: "Yo pensé: 'Seguramente él vendrá a mí, y se detendrá e invocará el nombre del SEÑOR su Dios, moverá su mano sobre la parte enferma y curará la lepra.' (2 Reyes 5:11)
Entonces en su angustia clamaron al SEÑOR Y El los salvó de sus aflicciones. (Salmos 107:19)
sino que enseguida, al oír hablar de El, una mujer cuya hijita tenía un espíritu inmundo, fue y se postró a Sus pies. (Marcus 7:25)
Y el siervo de cierto centurión, a quien éste apreciaba mucho, estaba enfermo y a punto de morir. (Lucas 7:2)
Y Natán regresó a su casa. Entonces el SEÑOR hirió al niño que la viuda de Urías dio a David, y se puso muy enfermo. (2 Samuel 12:15)
Extendiendo Jesús la mano, lo tocó, diciendo: "Quiero; sé limpio." Y al instante quedó limpio de su lepra. (Mateo 8:3)
Como el padre de Publio estaba en cama, enfermo con fiebre y disentería, Pablo entró a ver lo, y después de orar puso las manos sobre él, y lo sanó. (Hechos 28:8)
Jesús preguntó al padre: "¿Cuánto tiempo hace que le sucede esto?" "Desde su niñez," respondió. (Marcus 9:21)
Entonces vino otra vez Jesús a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Y había allí cierto oficial del rey cuyo hijo estaba enfermo en Capernaúm. (Juan 4:46)
Ananías fue y entró en la casa, y después de poner las manos sobre él, dijo: "Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recobres la vista y seas lleno del Espíritu Santo." (Hechos 9:17)
También echaban fuera muchos demonios, y ungían con aceite a muchos enfermos y los sanaban. (Marcus 6:13)
Levantándose, Jesús salió de la sinagoga y entró en casa de Simón (Pedro). La suegra de Simón se hallaba sufriendo con una fiebre muy alta, y Le rogaron por ella. (Lucas 4:38)
A éstos los presentaron ante los apóstoles, y después de orar, pusieron sus manos sobre ellos. (Hechos 6:6)
Y cuando se acercaba a la puerta de la ciudad, sacaban fuera a un muerto, hijo único de su madre, y ella era viuda; y un grupo numeroso de la ciudad estaba con ella. (Lucas 7:12)
¿Está alguien entre ustedes enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia y que ellos oren por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor. (Santiago 5:14)
Tomando al ciego de la mano, lo sacó fuera de la aldea; y después de escupir en sus ojos y de poner las manos sobre él, le preguntó: "¿Ves algo?" (Marcus 8:23)
Y no pudo hacer allí ningún milagro; sólo sanó a unos pocos enfermos sobre los cuales puso Sus manos. (Marcus 6:5)
Y puso las manos sobre ella, y al instante se enderezó y glorificaba a Dios. (Lucas 13:13)