Y cuando te digan: '¿Adónde iremos?' les responderás: 'Así dice el SEÑOR: "Los destinados para la muerte, a la muerte; Los destinados para la espada, a la espada; Los destinados para el hambre, al hambre, Y los destinados para el cautiverio, al cautiverio."'
(Jeremías 15:2)Y enviaré sobre ellos cuatro clases de males," declara el SEÑOR: "la espada para matar, los perros para despedazar, y las aves del cielo y las bestias de la tierra para devorar y destruir.
(Jeremías 15:3)Y los haré motivo de espanto para todos los reinos de la tierra, a causa de Manasés, hijo de Ezequías, rey de Judá, por lo que hizo en Jerusalén.
(Jeremías 15:4)Porque, ¿quién se compadecerá de ti, oh Jerusalén? ¿Quién llorará por ti, O quién se apartará de su camino para preguntar por tu bienestar?
Tú Me has dejado," declara el SEÑOR, "Sigues retrocediendo. Extenderé, pues, Mi mano contra ti y te destruiré; Estoy cansado de compadecerme.
(Jeremías 15:6)Los aventaré con el bieldo En las puertas del país; Los privaré de hijos, destruiré a Mi pueblo, Pues no se arrepintieron de sus caminos.
(Jeremías 15:7)Haré que sus viudas sean más numerosas Que la arena de los mares. Traeré contra la madre de sus jóvenes, Al destructor en pleno mediodía; De repente traeré sobre ella Angustia y pavor.
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Jeremías 15:5 - Referencia Cruzada
Y sucederá que todo el que te vea Huirá de ti, y dirá: '¡Asolada está Nínive! ¿Quién llorará por ella?' ¿Dónde te buscaré consoladores?"
(Nahúm 3:7)Y después," declara el SEÑOR, "a Sedequías, rey de Judá, a sus siervos, al pueblo y a los que sobrevivan en esta ciudad de la pestilencia, de la espada y del hambre, los entregaré en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, en manos de sus enemigos y en manos de los que buscan sus vidas; y él los herirá a filo de espada. No los perdonará ni les tendrá piedad ni compasión."'
(Jeremías 21:7)Allí se desviaron y llegaron a la casa del joven Levita, a la casa de Micaía, y le preguntaron cómo estaba.
(Jueces 18:15)Entonces David dejó su carga al cuidado del que guardaba el equipaje y corrió a la línea de combate y entró a saludar a sus hermanos.
(1 Samuel 17:22)Porque así dice el SEÑOR: "No entres en casa de duelo, ni vayas a lamentar, ni los consueles; pues he retirado de este pueblo Mi paz, la misericordia y la compasión," declara el SEÑOR.
(Jeremías 16:5)Los estrellaré unos contra otros, los padres y los hijos por igual," declara el SEÑOR. "No tendré piedad, ni lástima, ni compasión, para dejar de destruirlos."'"
(Jeremías 13:14)Salió Moisés a recibir a su suegro, se inclinó y lo besó. Se preguntaron uno a otro cómo estaban, y entraron en la tienda.
(Éxodo 18:7)Baten palmas contra ti Todos los que pasan por el camino; Silban y mueven sus cabezas Contra la hija de Jerusalén, diciendo: "¿Es ésta la ciudad de la cual decían: 'La perfección de la hermosura, El gozo de toda la tierra?'"
(Lamentaciones 2:15)Tengan piedad, tengan piedad de mí, ustedes mis amigos, Porque la mano de Dios me ha herido.
(Job 19:21)Ustedes, todos los que pasan por el camino, ¿no les importa esto? Observen y vean si hay dolor como mi dolor, Con el que fui atormentada, Con el que el SEÑOR me afligió el día de Su ardiente ira.
(Lamentaciones 1:12)Entonces David envió diez jóvenes, y les dijo: "Suban a Carmel, visiten a Nabal y salúdenlo en mi nombre;
(1 Samuel 25:5)La afrenta ha quebrantado mi corazón, y estoy enfermo; Esperé compasión, pero no la hubo; Busqué consoladores, pero no los hallé.
(Salmos 69:20)ellos te saludarán y te darán dos tortas de pan, las cuales recibirás de sus manos.
(1 Samuel 10:4)Estas dos cosas te han acontecido, ¿Quién te confortará?; Desolación y destrucción, hambre y espada, ¿Quién te consolará?
(Isaías 51:19)