Había un hombre en Maón que tenía sus bienes en Carmel; el hombre era muy rico y tenía 3,000 ovejas y 1,000 cabras; y estaba en Carmel trasquilando sus ovejas.
(1 Samuel 25:2)El hombre se llamaba Nabal, y su mujer se llamaba Abigail. Y la mujer era inteligente y de hermosa apariencia, pero el hombre era áspero y malo en sus tratos, y era Calebita.
(1 Samuel 25:3)Y David oyó en el desierto que Nabal estaba trasquilando sus ovejas.
(1 Samuel 25:4)Entonces David envió diez jóvenes, y les dijo: "Suban a Carmel, visiten a Nabal y salúdenlo en mi nombre;
y le dirán así: 'Ten una larga vida, paz para ti, paz para tu casa y paz para todo lo que tienes.
(1 Samuel 25:6)He oído que tienes esquiladores. Ahora bien, tus pastores han estado con nosotros, y no los hemos maltratado, ni les ha faltado nada todos los días que estuvieron en Carmel.
(1 Samuel 25:7)Pregunta a tus criados, y ellos te lo dirán. Por tanto, permite que mis criados hallen gracia ante tus ojos, porque hemos llegado en un día de fiesta. Te ruego que de lo que tengas a mano, des a tus siervos y a tu hijo David.'"
(1 Samuel 25:8)Otras publicaciones relacionadas con "1 Samuel 25:5":
1 Samuel 25:5 - Referencia Cruzada
Entonces David dejó su carga al cuidado del que guardaba el equipaje y corrió a la línea de combate y entró a saludar a sus hermanos.
(1 Samuel 17:22)Y el mayordomo les dijo: "No se preocupen, no teman. El Dios de ustedes y el Dios de su padre les ha dado ese tesoro en sus costales. Yo haré constar que recibí el dinero de ustedes." Entonces les sacó a Simeón.
(Génesis 43:23)