Nueva Biblia Latinoamericana
El nombre del otro era Eliezer (Mi Dios es ayuda), pues había dicho: " El Dios de mi padre fue mi ayuda y me libró de la espada de Faraón." (Éxodo 18:4)
Y vino Jetro, suegro de Moisés, con los hijos y la mujer de Moisés al desierto, donde éste estaba acampado junto al monte de Dios. (Éxodo 18:5)
Y mandó decir a Moisés: "Yo, tu suegro Jetro, vengo a ti con tu mujer y sus dos hijos con ella." (Éxodo 18:6)
Salió Moisés a recibir a su suegro, se inclinó y lo besó. Se preguntaron uno a otro cómo estaban, y entraron en la tienda.
Moisés contó a su suegro todo lo que el SEÑOR había hecho a Faraón y a los Egipcios por amor a Israel, todas las dificultades que les habían sobrevenido en el camino y cómo los había librado el SEÑOR. (Éxodo 18:8)
Y Jetro se alegró de todo el bien que el SEÑOR había hecho a Israel, al librarlo de la mano de los Egipcios. (Éxodo 18:9)
Entonces Jetro dijo: "Bendito sea el SEÑOR que los libró de la mano de los Egipcios y de la mano de Faraón, y que libró al pueblo del poder de los Egipcios. (Éxodo 18:10)

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Éxodo 18:7 - Referencia Cruzada

Comenzaron todos a llorar desconsoladamente, y abrazando a Pablo, lo besaban. (Hechos 20:37)
Al oír Balac que Balaam se acercaba, salió a recibirlo en una ciudad de Moab, que está sobre la frontera del Arnón, al extremo de la frontera. (Números 22:36)
Cuando Jefté llegó a su casa en Mizpa, su hija salió a recibirlo con panderos y con danzas. Ella era su única hija. Fuera de ella no tenía hijo ni hija. (Jueces 11:34)
Los dos ángeles llegaron a Sodoma al caer la tarde, cuando Lot estaba sentado a la Puerta de Sodoma. Al verlos, Lot se levantó para recibirlos y se postró rostro en tierra, (Génesis 19:1)
Cuando Urías vino a él, David le preguntó por Joab, por el pueblo y por el estado de la guerra. (2 Samuel 11:7)
Betsabé fue al rey Salomón para hablarle por Adonías. El rey se levantó a recibirla, se inclinó delante de ella, y se sentó en su trono; hizo colocar un trono para la madre del rey y ella se sentó a su diestra. (1 Reyes 2:19)
Al tener noticia de nuestra llegada, los hermanos vinieron desde allá a recibirnos hasta el Foro de Apio y Las Tres Tabernas; y cuando Pablo los vio, dio gracias a Dios y cobró ánimo. (Hechos 28:15)
¿Por qué no me has permitido besar a mis hijos y a mis hijas? En esto has obrado neciamente. (Génesis 31:28)
Honren al Hijo para que no se enoje y perezcan en el camino, Pues puede inflamarse de repente Su ira. ¡Cuán bienaventurados son todos los que en El se refugian! (Salmos 2:12)
Cuando Labán oyó las noticias de Jacob, hijo de su hermana, corrió a su encuentro, lo abrazó, lo besó y lo trajo a su casa. Entonces él contó a Labán todas estas cosas. (Génesis 29:13)
Entonces Jacob se les adelantó, y se inclinó hasta el suelo siete veces hasta que llegó cerca de su hermano. (Génesis 33:3)
José preparó su carro y subió a Gosén para ir al encuentro de su padre Israel. Apenas lo vio, se echó sobre su cuello y lloró largamente sobre su cuello. (Génesis 46:29)
Entonces él les preguntó cómo se encontraban, y añadió: "¿Cómo está su anciano padre de quien me hablaron? ¿Vive todavía?" (Génesis 43:27)
A su regreso después de derrotar a Quedorlaomer y a los reyes que estaban con él, salió a su encuentro el rey de Sodoma en el Valle de Save, es decir, el Valle del Rey. (Génesis 14:17)
Cuando Abraham alzó los ojos y miró, había tres hombres parados frente a él. Al verlos corrió de la puerta de la tienda a recibirlos, y se postró en tierra, (Génesis 18:2)
No Me diste beso, pero ella, desde que entré, no ha cesado de besar Mis pies. (Lucas 7:45)
Y besó a todos sus hermanos, y lloró sobre ellos. Después sus hermanos hablaron con él. (Génesis 45:15)