Así tendré respuesta para el que me afrenta, Pues confío en Tu palabra.
(Salmos 119:42)
No quites jamás de mi boca la palabra de verdad, Porque yo espero en Tus ordenanzas.
(Salmos 119:43)
Así que guardaré continuamente Tu ley, Para siempre y eternamente.
(Salmos 119:44)
Y andaré en libertad, Porque busco Tus preceptos.
Hablaré también de Tus testimonios delante de reyes, Y no me avergonzaré.
(Salmos 119:46)
Me deleitaré en Tus mandamientos, Los cuales amo.
(Salmos 119:47)
Levantaré mis manos a Tus mandamientos, Los cuales amo, Y meditaré en Tus estatutos.
(Salmos 119:48)
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Salmos 119:45 - Referencia Cruzada
Afirma mis pasos en Tu palabra, Y que ninguna iniquidad me domine.
(Salmos 119:133)
Les prometen libertad, mientras que ellos mismos son esclavos de la corrupción, pues uno es esclavo de aquello que lo ha vencido.
(2 Pedro 2:19)
Peregrino soy en la tierra, No escondas de mí Tus mandamientos.
(Salmos 119:19)
El que vive aislado busca su propio deseo, Contra todo consejo se encoleriza.
(Proverbios 18:1)
Mis ojos se anticipan a las vigilias de la noche, Para meditar en Tu palabra.
(Salmos 119:148)
Y apliqué mi corazón a buscar e investigar con sabiduría todo lo que se ha hecho bajo el cielo. Tarea dolorosa dada por Dios a los hijos de los hombres para ser afligidos con ella.
(Eclesiastés 1:13)
Pero el que mira atentamente a la ley perfecta, la ley de la libertad, y permanece en ella, no habiéndose vuelto un oidor olvidadizo sino un hacedor eficaz, éste será bienaventurado en lo que hace.
(Santiago 1:25)
Así pues, no sean necios, sino entiendan cuál es la voluntad del Señor.
(Efesios 5:17)
Al hablar estas cosas, muchos creyeron en El.
(Juan 8:30)
Si la buscas como a la plata, Y la procuras como a tesoros escondidos,
(Proverbios 2:4)
Tuyo soy, Señor, sálvame, Pues Tus preceptos he buscado.
(Salmos 119:94)
Así hablen ustedes y así procedan, como los que han de ser juzgados por la ley de la libertad.
(Santiago 2:12)
Bueno es para mí ser afligido, Para que aprenda Tus estatutos.
(Salmos 119:71)
EL ESPIRITU DEL SEÑOR ESTA SOBRE MI, PORQUE ME HA UNGIDO PARA ANUNCIAR EL EVANGELIO A LOS POBRES. ME HA ENVIADO PARA PROCLAMAR LIBERTAD A LOS CAUTIVOS, Y LA RECUPERACION DE LA VISTA A LOS CIEGOS; PARA PONER EN LIBERTAD A LOS OPRIMIDOS;
(Lucas 4:18)
Ustedes examinan las Escrituras porque piensan tener en ellas la vida eterna. ¡Y son ellas las que dan testimonio de Mí!
(Juan 5:39)
Me regocijo en Tu palabra, Como quien halla un gran botín.
(Salmos 119:162)
Cuando andes, tus pasos no serán obstruidos, Y si corres, no tropezarás.
(Proverbios 4:12)