Y ésta es la promesa que El mismo nos hizo (nos prometió): la vida eterna.
(1 Juan 2:25)
Les he escrito estas cosas respecto a los que están tratando de engañarlos.
(1 Juan 2:26)
En cuanto a ustedes, la unción que recibieron de El permanece en ustedes, y no tienen necesidad de que nadie les enseñe. Pero así como Su unción les enseña acerca de todas las cosas, y es verdadera y no mentira, y así como les ha enseñado, ustedes permanecen en El.
(1 Juan 2:27)
Y ahora, hijos, permanezcan en El, para que cuando se manifieste, tengamos confianza y no nos apartemos de El avergonzados en Su venida.
Si saben que El es justo, saben también que todo el que hace justicia es nacido de El.
(1 Juan 2:29)
Miren cuán gran amor nos ha otorgado el Padre: que seamos llamados hijos de Dios. Y eso somos. Por esto el mundo no nos conoce, porque no Lo conoció a El.
(1 Juan 3:1)
Amados, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que habremos de ser. Pero sabemos que cuando Cristo se manifieste, seremos semejantes a El, porque Lo veremos como El es.
(1 Juan 3:2)
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1 Juan 2:28 - Referencia Cruzada
Amados, si nuestro corazón no nos condena, confianza tenemos delante de Dios.
(1 Juan 3:21)
Y en aquel día se dirá: "Este es nuestro Dios a quien hemos esperado para que nos salvara. Este es el SEÑOR a quien hemos esperado; Regocijémonos y alegrémonos en su salvación."
(Isaías 25:9)
que guardes el mandamiento sin mancha ni reproche hasta la manifestación de nuestro Señor Jesucristo,
(1 Timoteo 6:14)
y diciendo: "¿Dónde está la promesa de Su venida? Porque desde que los padres durmieron (murieron), todo continúa tal como estaba desde el principio de la creación."
(2 Pedro 3:4)
Amados, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que habremos de ser. Pero sabemos que cuando Cristo se manifieste, seremos semejantes a El, porque Lo veremos como El es.
(1 Juan 3:2)
Y que el mismo Dios de paz los santifique por completo; y que todo su ser, espíritu, alma y cuerpo, sea preservado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
(1 Tesalonicenses 5:23)
En el futuro me está reservada la corona de justicia que el Señor, el Juez justo, me entregará en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman Su venida (manifestación).
(2 Timoteo 4:8)
aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación de la gloria de nuestro gran Dios y Salvador Cristo Jesús.
(Tito 2:13)
EL VIENE CON LAS NUBES, y todo ojo Lo verá, aun los que Lo traspasaron; y todas las tribus (linajes y razas) de la tierra harán lamentación por El. Sí. Amén.
(Apocalipsis 1:7)
En esto se perfecciona el amor en nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio, pues como El es, así somos también nosotros en este mundo.
(1 Juan 4:17)
Yo les envío al profeta Elías antes que venga el día del SEÑOR, día grande y terrible.
(Malaquías 4:5)
así también Cristo, habiendo sido ofrecido una vez para llevar los pecados de muchos, aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvación de los que ansiosamente Lo esperan.
(Hebreos 9:28)
Esta es la confianza que tenemos delante de El, que si pedimos cualquier cosa conforme a Su voluntad, El nos oye.
(1 Juan 5:14)
Israel ha sido salvado por el SEÑOR Con salvación eterna. Ustedes no serán avergonzados ni humillados Por toda la eternidad.
(Isaías 45:17)
Hijitos míos, les escribo estas cosas para que no pequen. Y si alguien peca, tenemos Abogado (Intercesor) para con el Padre, a Jesucristo el Justo.
(1 Juan 2:1)
Porque cualquiera que se avergüence de Mí y de Mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, el Hijo del Hombre también se avergonzará de él, cuando venga en la gloria de Su Padre con los santos ángeles."
(Marcus 8:38)
Cuando Cristo, nuestra vida, sea manifestado, entonces ustedes también serán manifestados con El en gloria.
(Colosenses 3:4)
de manera que nada les falta en ningún don, esperando ansiosamente la revelación de nuestro Señor Jesucristo.
(1 Corintios 1:7)
Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores (el Pastor Supremo), ustedes recibirán la corona inmarcesible (que jamás se marchitará) de gloria.
(1 Pedro 5:4)
¿Pero quién podrá soportar el día de Su venida? ¿Y quién podrá mantenerse en pie cuando El aparezca? Porque El es como fuego de fundidor y como jabón de lavanderos.
(Malaquías 3:2)
para que la prueba de la fe de ustedes, más preciosa que el oro que perece, aunque probado por fuego, sea hallada que resulta en alabanza, gloria y honor en la revelación de Jesucristo;
(1 Pedro 1:7)
Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo en Su venida.
(1 Corintios 15:23)
tal como está escrito: "HE AQUI, PONGO EN SION UNA PIEDRA DE TROPIEZO Y ROCA DE ESCANDALO; Y EL QUE CREA EN EL NO SERA AVERGONZADO."
(Romanos 9:33)
a fin de que El afirme sus corazones irreprensibles en santidad delante de nuestro Dios y Padre, en la venida de nuestro Señor Jesús con todos Sus santos.
(1 Tesalonicenses 3:13)
Porque ¿quién es nuestra esperanza o gozo o corona de gloria? ¿No lo son ustedes en la presencia de nuestro Señor Jesús en Su venida?
(1 Tesalonicenses 2:19)