Nueva Biblia Latinoamericana
Y hallándose en forma de hombre, se humilló El mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. (Filipenses 2:8)
Por lo cual Dios también Lo exaltó hasta lo sumo, y Le confirió el nombre que es sobre todo nombre, (Filipenses 2:9)
para que al nombre de Jesús SE DOBLE TODA RODILLA de los que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, (Filipenses 2:10)
y toda lengua confiese que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.
Así que, amados míos, tal como siempre han obedecido, no sólo en mi presencia, sino ahora mucho más en mi ausencia, ocúpense en su salvación con temor y temblor. (Filipenses 2:12)
Porque Dios es quien obra en ustedes tanto el querer como el hacer, para Su buena intención. (Filipenses 2:13)
Hagan todas las cosas sin murmuraciones ni discusiones, (Filipenses 2:14)

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Filipenses 2:11 - Referencia Cruzada

En sus días Judá será salvada, E Israel morará seguro; Y éste es Su nombre por el cual será llamado: 'El SEÑOR, justicia nuestra.' (Jeremías 23:6)
Pues muchos engañadores han salido al mundo que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Ese es el engañador y el anticristo. (2 Juan 1:7)
Sin embargo, muchos, aun de los gobernantes, creyeron en El, pero por causa de los Fariseos no lo confesaban, para no ser expulsados de la sinagoga. (Juan 12:42)
Y todo lo que pidan en Mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. (Juan 14:13)
Sus padres dijeron esto porque tenían miedo a los Judíos; porque los Judíos ya se habían puesto de acuerdo en que si alguien confesaba que Jesús era el Cristo (el Mesías), fuera expulsado de la sinagoga. (Juan 9:22)
Por tanto, todo el que Me confiese delante de los hombres, Yo también lo confesaré delante de Mi Padre que está en los cielos. (Mateo 10:32)
Estas cosas habló Jesús, y alzando los ojos al cielo, dijo: "Padre, la hora ha llegado; glorifica a Tu Hijo, para que el Hijo Te glorifique a Ti, (Juan 17:1)
El Me glorificará, porque tomará de lo Mío y se lo hará saber a ustedes. (Juan 16:14)
El primer hombre es de la tierra, terrenal (hecho del polvo); el segundo hombre es del cielo. (1 Corintios 15:47)
Ustedes Me llaman Maestro y Señor; y tienen razón, porque Lo soy. (Juan 13:13)
Sepa, pues, con certeza toda la casa de Israel, que a este Jesús a quien ustedes crucificaron, Dios Lo ha hecho Señor y Cristo (el Mesías)." (Hechos 2:36)
Salmo de David. Dice el SEÑOR a mi Señor: "Siéntate a Mi diestra, Hasta que ponga a Tus enemigos por estrado de Tus pies." (Salmos 110:1)
pero para nosotros hay un solo Dios, el Padre, de quien proceden todas las cosas y nosotros somos para El; y un solo Señor, Jesucristo, por quien son todas las cosas y por medio de El existimos nosotros. (1 Corintios 8:6)
Por tanto, Te daré gracias, oh SEÑOR, entre las naciones, Y cantaré alabanzas a Tu nombre. (Salmos 18:49)
Por medio de El son creyentes en Dios, que Lo resucitó de entre los muertos y Le dio gloria, de manera que la fe y esperanza de ustedes sean en Dios. (1 Pedro 1:21)
Todo aquél que confiesa que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él y él en Dios. (1 Juan 4:15)
El mensaje (La palabra) que El envió al pueblo de Israel, predicando (anunciando el evangelio) de paz por medio de Jesucristo, que El es Señor de todos. (Hechos 10:36)
porque les ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo (el Mesías) el Señor. (Lucas 2:11)
Entonces, cuando salió, Jesús dijo: "Ahora es glorificado el Hijo del Hombre, y Dios es glorificado en El. (Juan 13:31)
y para que los Gentiles glorifiquen a Dios por Su misericordia, como está escrito: "POR TANTO, TE CONFESARE ENTRE LOS GENTILES, Y A TU NOMBRE CANTARE." (Romanos 15:9)
para que todos honren al Hijo así como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que Lo envió. (Juan 5:23)
Jesús le respondió: "Si alguien Me ama, guardará Mi palabra; y Mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos con él morada. (Juan 14:23)
Porque está escrito: "VIVO YO, DICE EL SEÑOR, QUE ANTE MI SE DOBLARA TODA RODILLA, Y TODA LENGUA ALABARA A DIOS." (Romanos 14:11)
En esto ustedes conocen el Espíritu de Dios: todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios. (1 Juan 4:2)
Así el vencedor será vestido de vestiduras blancas y no borraré su nombre del Libro de la Vida, y reconoceré su nombre delante de Mi Padre y delante de Sus ángeles. (Apocalipsis 3:5)
que si confiesas con tu boca a Jesús por Señor, y crees en tu corazón que Dios Lo resucitó de entre los muertos, serás salvo. (Romanos 10:9)
¡Señor mío y Dios mío!" Le dijo Tomás. (Juan 20:28)
Por tanto, les hago saber que nadie hablando por el Espíritu de Dios, dice: "Jesús es anatema (maldito);" y nadie puede decir: "Jesús es el Señor," excepto por el Espíritu Santo. (1 Corintios 12:3)
Porque para esto Cristo murió y resucitó, para ser Señor tanto de los muertos como de los vivos. (Romanos 14:9)