Nueva Biblia Latinoamericana
Mi defensa contra los que me examinan es ésta: (1 Corintios 9:3)
¿Acaso no tenemos derecho a comer y beber? (1 Corintios 9:4)
¿No tenemos derecho a llevar con nosotros una esposa creyente, así como los demás apóstoles y los hermanos del Señor y Cefas (Pedro)? (1 Corintios 9:5)
¿O acaso sólo Bernabé y yo no tenemos el derecho a no trabajar?
¿Quién ha servido alguna vez como soldado a sus propias expensas? ¿Quién planta una viña y no come de su fruto? ¿O quién cuida un rebaño y no bebe de la leche del rebaño? (1 Corintios 9:7)
¿Acaso digo esto según el juicio humano? ¿No dice también la Ley esto mismo? (1 Corintios 9:8)
Pues en la Ley de Moisés está escrito: "NO PONDRAS BOZAL AL BUEY CUANDO TRILLA." ¿Acaso le preocupan a Dios los bueyes? (1 Corintios 9:9)

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1 Corintios 9:6 - Referencia Cruzada

Después de algunos días Pablo dijo a Bernabé: "Volvamos y visitemos a los hermanos en todas las ciudades donde hemos proclamado la palabra del Señor, para ver cómo están." (Hechos 15:36)
La noticia de esto llegó a oídos de la iglesia de Jerusalén y enviaron a Bernabé a Antioquía, (Hechos 11:22)
Ustedes saben que estas manos me sirvieron para mis propias necesidades y las de los que estaban conmigo. (Hechos 20:34)
y como él era del mismo oficio, se quedó con ellos y trabajaban juntos, pues el oficio de ellos era hacer tiendas de campaña. (Hechos 18:3)
En la iglesia que estaba en Antioquía había profetas y maestros: Bernabé, Simón llamado Niger, Lucio de Cirene, Manaén, que se había criado con Herodes (Antipas, hijo de Herodes el Grande) el tetrarca, y Saulo. (Hechos 13:1)
Hasta el momento presente pasamos hambre y sed, andamos mal vestidos, somos maltratados y no tenemos dónde vivir. (1 Corintios 4:11)
Pero los Judíos instigaron a las mujeres piadosas (religiosas o devotas) y distinguidas, y a los hombres más prominentes de la ciudad, y provocaron una persecución contra Pablo y Bernabé, y los expulsaron de su región. (Hechos 13:50)
Y llamaban a Bernabé, Júpiter, y a Pablo, Mercurio, porque éste era el que dirigía la palabra. (Hechos 14:12)
Y José, un Levita natural de Chipre, a quien también los apóstoles llamaban Bernabé, que traducido significa Hijo de Consolación, (Hechos 4:36)
Pues ustedes mismos saben cómo deben seguir nuestro ejemplo (cómo imitarnos), porque no obramos de manera indisciplinada entre ustedes, (2 Tesalonicenses 3:7)
Porque recuerdan, hermanos, nuestros trabajos y fatigas, cómo, trabajando de día y de noche para no ser carga a ninguno de ustedes, les proclamamos el evangelio de Dios. (1 Tesalonicenses 2:9)