Nueva Biblia Latinoamericana
Abrí yo a mi amado, Pero mi amado se había retirado, se había ido. Tras su hablar salió mi alma. Lo busqué, y no lo hallé; Lo llamé, y no me respondió. (Cantares 5:6)
Me hallaron los guardas que rondan la ciudad, Me golpearon y me hirieron; Me quitaron de encima mi chal los guardas de las murallas. (Cantares 5:7)
Yo les ruego, oh hijas de Jerusalén, Si encuentran a mi amado, ¿Qué le han de decir?: Que estoy enferma de amor." (Cantares 5:8)
¿Qué clase de amado es tu amado, Oh la más hermosa de las mujeres? ¿Qué clase de amado es tu amado, Que así nos ruegas?"
Mi amado es apuesto y sonrosado, Distinguido entre diez mil. (Cantares 5:10)
Su cabeza es como oro, oro puro, Sus cabellos, como racimos de dátiles, Negros como el cuervo. (Cantares 5:11)
Sus ojos son como palomas Junto a corrientes de agua, Bañados en leche, Colocados en su engaste. (Cantares 5:12)

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Cantares 5:9 - Referencia Cruzada

Cosas gloriosas se dicen de Ti, Oh ciudad de Dios: (Selah) (Salmos 87:3)
Y si todavía nuestro evangelio está velado, para los que se pierden está velado, (2 Corintios 4:3)
Creció delante de El como renuevo tierno, Como raíz de tierra seca. No tiene aspecto hermoso ni majestad Para que Lo miremos, Ni apariencia para que Lo deseemos. (Isaías 53:2)
Toda radiante está la hija del Rey dentro de su palacio; Recamado de oro está su vestido. (Salmos 45:13)
Si tú no lo sabes, ¡Oh la más hermosa de las mujeres!, Sal tras las huellas del rebaño, Y apacienta tus cabritas Junto a las cabañas de los pastores." (Cantares 1:8)
El Verbo (La Palabra) se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos Su gloria, gloria como del unigénito (único) del Padre, lleno de gracia y de verdad. (Juan 1:14)
Cuando Jesús llegó a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a Sus discípulos: "¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?" (Mateo 16:13)
¿Adónde se ha ido tu amado, Oh la más hermosa de las mujeres? ¿Adónde se ha dirigido tu amado, Para que lo busquemos contigo?" (Cantares 6:1)
Cuando Jesús entró en Jerusalén, toda la ciudad se agitó, y decían: "¿Quién es Este?" (Mateo 21:10)
Pero sin igual es mi paloma, mi perfecta, Es la hija única de su madre, La preferida de la que la dio a luz. Las doncellas la vieron y la llamaron bienaventurada, También las reinas y las concubinas, y la alabaron, diciendo: (Cantares 6:9)