Nueva Biblia Latinoamericana
¡Ay de ti, tierra, cuyo rey es un muchacho, Y cuyos príncipes banquetean de mañana! (Eclesiastés 10:16)
Bienaventurada tú, tierra, cuyo rey es de noble cuna Y cuyos príncipes comen a su debida hora, Para fortalecerse y no para embriagarse. (Eclesiastés 10:17)
Por negligencia se hunde el techo, Y por pereza tiene goteras la casa. (Eclesiastés 10:18)
Para el placer se prepara la comida, Y el vino alegra la vida, Y el dinero es la respuesta para todo.
Ni aun en tu recámara maldigas al rey, Ni en tus alcobas maldigas al rico, Porque un ave de los cielos llevará el rumor, Y un ser alado hará conocer el asunto. (Eclesiastés 10:20)
Echa tu pan sobre las aguas, Que después de muchos días lo hallarás. (Eclesiastés 11:1)
Reparte tu porción con siete, o aun con ocho, Porque no sabes qué mal puede venir sobre la tierra. (Eclesiastés 11:2)

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Eclesiastés 10:19 - Referencia Cruzada

El les llevó porciones de su propia mesa, pero la porción de Benjamín era cinco veces mayor que la de cualquiera de ellos. Bebieron, pues, y se alegraron con él. (Génesis 43:34)
Y diré a mi alma: alma, tienes muchos bienes depositados para muchos años; descansa, come, bebe, diviértete.' (Lucas 12:19)
Con toda mi habilidad he provisto para la casa de mi Dios, el oro para las cosas de oro, la plata para las cosas de plata, el bronce para las cosas de bronce, el hierro para las cosas de hierro, la madera para las cosas de madera; también piedras de ónice, piedras de engaste, piedras de antimonio, piedras de varios colores, toda clase de piedras preciosas y piedras de alabastro en abundancia. (1 Crónicas 29:2)
Absalón ordenó a sus siervos y dijo: "Miren, cuando el corazón de Amnón esté alegre por el vino, y cuando yo les diga: 'Hieran a Amnón,' entonces mátenlo. No teman; ¿no se lo he mandado yo? Tengan ánimo y sean valientes." (2 Samuel 13:28)
Juana, mujer de Chuza, mayordomo de Herodes (Antipas); Susana y muchas otras que de sus bienes personales contribuían al sostenimiento de ellos. (Lucas 8:3)
Mejor es ir a una casa de luto Que ir a una casa de banquete, Porque aquello (la muerte) es el fin de todo hombre, Y al que vive lo hará reflexionar en su corazón. (Eclesiastés 7:2)
Sin embargo, para que no los escandalicemos, ve al mar, echa el anzuelo, y toma el primer pez que salga; y cuando le abras la boca hallarás un siclo (salario de cuatro días); tómalo y dáselo por ti y por Mí." (Mateo 17:27)
Buena es la sabiduría con herencia, Y provechosa para los que ven el sol. (Eclesiastés 7:11)
vendían todas sus propiedades y sus bienes y los compartían con todos, según la necesidad de cada uno. (Hechos 2:45)
Y sucedía que siempre que el cofre era traído al oficial del rey por los Levitas, y cuando veían que había mucho dinero, entonces el escriba del rey y el oficial del sumo sacerdote venían, vaciaban el cofre, lo tomaban y lo volvían a su lugar. Así hacían diariamente y recogían mucho dinero. (2 Crónicas 24:11)
Entonces me dije: "Ven ahora, te probaré con el placer; diviértete." Y resultó que también esto era vanidad. (Eclesiastés 2:1)
Pero la vid les respondió: '¿He de dejar mi vino nuevo, que alegra a Dios y a los hombres, para ir a ondear sobre los árboles?' (Jueces 9:13)
Pero el rey David dijo a Ornán: "No, sino que ciertamente lo compraré por su justo precio; porque no tomaré para el SEÑOR lo que es tuyo, ni ofreceré un holocausto que no me cueste nada." (1 Crónicas 21:24)
Y les dije: "Nosotros, conforme a nuestras posibilidades, hemos redimido a nuestros hermanos Judíos que fueron vendidos a las naciones; y ahora, ¿venderían ustedes aun a sus hermanos para que sean vendidos a nosotros?" Ellos se quedaron callados y no hallaron respuesta que dar. (Nehemías 5:8)
Pero sus ganancias y su paga de ramera serán consagradas al SEÑOR. No serán almacenadas ni acumuladas, sino que su ganancia llegará a ser suficiente alimento y vestidura selecta para aquéllos que habiten en la presencia del SEÑOR. (Isaías 23:18)
Hay clamor en las calles por falta de vino, Toda alegría se convierte en tinieblas, Desterrado está el júbilo de la tierra. (Isaías 24:11)
Entonces Abigail regresó a Nabal, y éste tenía un banquete en su casa, como el banquete de un rey. Y el corazón de Nabal estaba alegre, pues estaba muy ebrio, por lo cual ella no le comunicó nada hasta el amanecer. (1 Samuel 25:36)
Jesús le respondió: "Si quieres ser perfecto, ve y vende lo que posees y da a los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sé Mi discípulo." (Mateo 19:21)
Pero Yo les digo: háganse amigos por medio de las riquezas injustas, para que cuando les falten, los reciban en las moradas eternas. (Lucas 16:9)
Y todos los que habitaban alrededor de ellos los ayudaron con objetos de plata, con oro, con bienes, con ganado y con objetos preciosos, además de todo lo que fue dado como ofrenda voluntaria. (Esdras 1:6)
y para llevar la plata y el oro que el rey y sus consejeros han ofrendado voluntariamente al Dios de Israel, cuya morada está en Jerusalén, (Esdras 7:15)
Vete, come tu pan con gozo, Y bebe tu vino con corazón alegre, Porque Dios ya ha aprobado tus obras. (Eclesiastés 9:7)
Belsasar, rey de Babilonia ofreció un gran banquete a mil de sus nobles, y en presencia de los mil se puso a beber vino. (Daniel 5:1)
Los discípulos, conforme a lo que cada uno tenía, determinaron enviar una ayuda a los hermanos que habitaban en Judea. (Hechos 11:29)
A los ricos en este mundo, enséñales que no sean altaneros ni pongan su esperanza en la incertidumbre de las riquezas, sino en Dios, el cual nos da abundantemente todas las cosas para que las disfrutemos. (1 Timoteo 6:17)
Y vino que alegra el corazón del hombre, Para que haga brillar con aceite su rostro, Y alimento que fortalece el corazón del hombre. (Salmos 104:15)
Con liberalidad ha dado a los pobres; Su justicia permanece para siempre; Su poder será exaltado con honor. (Salmos 112:9)
Ustedes mismos también saben, Filipenses, que al comienzo de la predicación del evangelio, después que partí de Macedonia, ninguna iglesia compartió conmigo en cuestión de dar y recibir, sino solamente ustedes. (Filipenses 4:15)
Porque el tiempo ya pasado les es suficiente para haber hecho lo que agrada a los Gentiles, habiendo andado en sensualidad, lujurias, borracheras, orgías, embriagueces, y abominables idolatrías. (1 Pedro 4:3)
Y no se embriaguen con vino, en lo cual hay disolución, sino sean llenos del Espíritu. (Efesios 5:18)