Nueva Biblia Latinoamericana
Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada, Mas El actúa conforme a Su voluntad en el ejército del cielo Y entre los habitantes de la tierra. Nadie puede detener Su mano, Ni decirle: '¿Qué has hecho?' (Daniel 4:35)
En ese momento recobré mi razón. Y mi majestad y mi esplendor me fueron devueltos para gloria de mi reino, y mis consejeros y mis nobles vinieron a buscarme. Y fui restablecido en mi reino (soberanía), y mayor grandeza me fue añadida. (Daniel 4:36)
Ahora yo, Nabucodonosor, alabo, ensalzo y glorifico al Rey del cielo, porque Sus obras son todas verdaderas y justos Sus caminos. El puede humillar a los que caminan con soberbia." (Daniel 4:37)
Belsasar, rey de Babilonia ofreció un gran banquete a mil de sus nobles, y en presencia de los mil se puso a beber vino.
Mientras saboreaba el vino, Belsasar ordenó traer los vasos de oro y plata que Nabucodonosor su padre (antepasado) había sacado del templo que estaba en Jerusalén, para que bebieran en ellos el rey y sus nobles, sus mujeres y sus concubinas. (Daniel 5:2)
Entonces trajeron los vasos de oro que habían sido sacados del templo, la casa de Dios que estaba en Jerusalén, y el rey y sus nobles, sus mujeres y sus concubinas bebieron en ellos. (Daniel 5:3)
Bebieron vino y alabaron a los dioses de oro y plata, de bronce, hierro, madera y piedra. (Daniel 5:4)

Otras publicaciones relacionadas con "Daniel 5:1":

Isaías Rivera
Vasos de honra
Este sermón se basa en la historia de Beltsazar y Daniel del libro de Daniel capítulo 5. El pastor enfatiza la importancia de mantenerse fieles a Dios y no deshonrar lo que Él nos ha dado, así como buscar a los vasos de honra en momentos de necesidad. También se destaca la relevancia de no vender lo que Dios nos ha dado por las cosas temporales del mundo.


Samuel Acevedo
No tire la toalla!
Aprende a resistir en momentos difíciles tomando como ejemplo a Daniel en Babilonia y manteniendo la fe invencible en Dios.


Daniel 5:1 - Referencia Cruzada

Por eso aquel día, el Señor, DIOS de los ejércitos, los llamó a llanto y a lamento, A raparse la cabeza y a vestirse de cilicio. (Isaías 22:12)
Porque ellos, como espinos enmarañados, Y ebrios con su bebida, Serán consumidos como paja totalmente seca. (Nahúm 1:10)
Cuando entren en calor, les serviré su banquete Y los embriagaré, para que se diviertan, Duerman un sueño eterno Y no despierten," declara el SEÑOR. (Jeremías 51:39)
en el año tercero de su reinado, ofreció un banquete para todos sus príncipes y servidores, estando en su presencia los oficiales del ejército de Persia y Media, los nobles y los príncipes de sus provincias. (Ester 1:3)
Yo embriagaré a sus príncipes y a sus sabios, A sus gobernantes, a sus magistrados y a sus valientes, Y dormirán un sueño eterno y no despertarán," Declara el Rey cuyo nombre es el SEÑOR de los ejércitos. (Jeremías 51:57)
Llegó un día oportuno, cuando Herodes, siendo su cumpleaños, ofreció un banquete a sus nobles y comandantes y a los principales de Galilea; (Marcus 6:21)
Y sucedió que al tercer día, que era el día del cumpleaños de Faraón, éste hizo un banquete para todos sus siervos, y levantó la cabeza del jefe de los coperos y la cabeza del jefe de los panaderos (al invitarlos al banquete) en medio de sus siervos. (Génesis 40:20)
Desvaría mi mente, el espanto me sobrecoge. El anochecer que anhelaba se me convirtió en terror. (Isaías 21:4)
Pero el SEÑOR de los ejércitos me reveló al oído: "Ciertamente esta iniquidad no les será perdonada Hasta que mueran," dice el Señor, DIOS de los ejércitos. (Isaías 22:14)