Nueva Biblia Latinoamericana
Porque los que viven saben que han de morir, Pero los muertos no saben nada, Ni tienen ya ninguna recompensa, Porque su recuerdo está olvidado. (Eclesiastés 9:5)
En verdad, su amor, su odio y su celo ya han perecido, Y nunca más tendrán parte en todo lo que se hace bajo el sol. (Eclesiastés 9:6)
Vete, come tu pan con gozo, Y bebe tu vino con corazón alegre, Porque Dios ya ha aprobado tus obras. (Eclesiastés 9:7)
En todo tiempo sean blancas tus ropas, Y que no falte ungüento sobre tu cabeza.
Goza de la vida con la mujer que amas todos los días de tu vida fugaz que El te ha dado bajo el sol, todos los días de tu vanidad. Porque ésta es tu parte en la vida y en el trabajo con que te afanas bajo el sol. (Eclesiastés 9:9)
Todo lo que tu mano halle para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque no hay actividad ni propósito ni conocimiento ni sabiduría en el Seol (región de los muertos) adonde vas. (Eclesiastés 9:10)
Vi además que bajo el sol No es de los ligeros la carrera, Ni de los valientes la batalla; Y que tampoco de los sabios es el pan, Ni de los entendidos las riquezas, Ni de los hábiles el favor, Sino que el tiempo y la suerte les llegan a todos. (Eclesiastés 9:11)

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Eclesiastés 9:8 - Referencia Cruzada

También Mefiboset, nieto de Saúl, descendió al encuentro del rey; y no se había aseado los pies, ni recortado el bigote, ni lavado la ropa, desde el día en que el rey se marchó hasta el día en que volvió en paz. (2 Samuel 19:24)
Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, (Mateo 6:17)
Después de esto miré, y vi una gran multitud, que nadie podía contar, de todas las naciones, tribus, pueblos, y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en las manos. (Apocalipsis 7:9)
Y a ella le fue concedido vestirse de lino fino, resplandeciente y limpio, Porque las acciones justas de los santos son el lino fino. (Apocalipsis 19:8)
Los ejércitos que están en los cielos, vestidos de lino fino, blanco y limpio, Lo seguían sobre caballos blancos. (Apocalipsis 19:14)
Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos; Has ungido mi cabeza con aceite; Mi copa está rebosando. (Salmos 23:5)
Lávate, pues, perfúmate y ponte tu mejor vestido y baja a la era; pero no te des a conocer al hombre hasta que haya acabado de comer y beber. (Rut 3:3)
Entonces Mardoqueo salió de la presencia del rey en vestiduras reales de azul y blanco, con una gran corona de oro y un manto de lino fino y púrpura. La ciudad de Susa dio vivas y se regocijó. (Ester 8:15)
Que beben vino en tazones del altar Y se ungen con los óleos más finos, Pero no se lamentan por la ruina de José, (Amós 6:6)
Uno de los ancianos habló diciéndome: "Estos que están vestidos con vestiduras blancas, ¿quiénes son y de dónde han venido?" (Apocalipsis 7:13)
Y Joab envió a Tecoa a traer a una mujer sabia de allí, y le dijo: "Te ruego que finjas estar de duelo, te pongas ahora ropas de luto y no te unjas con óleo, sino pórtate como una mujer que por muchos días ha estado de duelo por un muerto; (2 Samuel 14:2)
No comí manjar delicado ni entró en mi boca carne ni vino, ni usé ungüento alguno, hasta que se cumplieron las tres semanas. (Daniel 10:3)
¡Estén alerta! Vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela y guarda sus ropas, no sea que ande desnudo y vean su vergüenza." (Apocalipsis 16:15)
Pero tienes unos pocos en Sardis que no han manchado sus vestiduras, y andarán conmigo vestidos de blanco, porque son dignos. (Apocalipsis 3:4)
No ungiste Mi cabeza con aceite, pero ella ungió Mis pies con perfume. (Lucas 7:46)