Nueva Biblia Latinoamericana
A lo que existe, ya se le ha dado nombre, Y se sabe lo que es un hombre: No puede luchar con el que es más fuerte que él. (Eclesiastés 6:10)
Cuando hay muchas palabras, aumenta la vanidad. ¿Cuál es entonces la ventaja para el hombre? (Eclesiastés 6:11)
Porque, ¿quién sabe lo que es bueno para el hombre durante su vida, en los contados días de su vana vida? Los pasará como una sombra. Pues, ¿quién hará saber al hombre lo que sucederá después de él bajo el sol? (Eclesiastés 6:12)
Mejor es el buen nombre que el buen ungüento, Y el día de la muerte que el día del nacimiento.
Mejor es ir a una casa de luto Que ir a una casa de banquete, Porque aquello (la muerte) es el fin de todo hombre, Y al que vive lo hará reflexionar en su corazón. (Eclesiastés 7:2)
Mejor es la tristeza que la risa, Porque cuando el rostro está triste el corazón puede estar contento. (Eclesiastés 7:3)
El corazón de los sabios está en la casa del luto, Mientras que el corazón de los necios está en la casa del placer. (Eclesiastés 7:4)

Otras publicaciones relacionadas con "Eclesiastés 7:1":

Fanny Rodríguez
Vivamos el presente a plenitud
Consejos para vivir el presente a plenitud a través de la sabiduría de seguir el ejemplo de Jesús y cultivar una relación profunda con Él a través de la lectura diaria de la Palabra de Dios.


Samuel Caraballo
Alégrate, joven, pero ...
Artículo sobre la juventud y la importancia de vivir según los preceptos de Dios


Eclesiastés 7:1 - Referencia Cruzada

Y durante la cena, como ya el diablo había puesto en el corazón de Judas Iscariote, hijo de Simón, el que Lo entregara, (Juan 13:2)
Porque sabemos que si la tienda terrenal que es nuestra morada, es destruida, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna en los cielos. (2 Corintios 5:1)
Pero cobramos ánimo y preferimos más bien estar ausentes del cuerpo y habitar (estar presentes) con el Señor. (2 Corintios 5:8)
El ungüento y el perfume alegran el corazón, Y dulce para su amigo es el consejo del hombre. (Proverbios 27:9)
Tus ungüentos tienen olor agradable, Tu nombre es como ungüento purificado; Por eso te aman las doncellas. (Cantares 1:3)
Más vale el buen nombre que las muchas riquezas, Y el favor que la plata y el oro. (Proverbios 22:1)
La luz de los ojos alegra el corazón, Y las buenas noticias fortalecen los huesos. (Proverbios 15:30)
¡Cuán hermosos son tus amores, hermana mía, esposa mía! ¡Cuánto mejores son tus amores que el vino, Y la fragancia de tus ungüentos Que todos los bálsamos! (Cantares 4:10)
Las moscas muertas hacen que el ungüento del perfumista dé mal olor; Un poco de insensatez pesa más que la sabiduría y el honor. (Eclesiastés 10:1)
El justo perece, y no hay quien se preocupe; Los hombres piadosos son arrebatados, sin que nadie comprenda. Porque el justo es arrebatado ante el mal, (Isaías 57:1)
Sin embargo, no se regocijen en esto, de que los espíritus se les sometan, sino regocíjense de que sus nombres están escritos en los cielos." (Lucas 10:20)
Porque por ella recibieron aprobación (testimonio) los antiguos (antepasados). (Hebreos 11:2)
Y todos éstos, habiendo obtenido aprobación (testimonio) por su fe, no recibieron la promesa, (Hebreos 11:39)
Pues para mí, el vivir es Cristo y el morir es ganancia. (Filipenses 1:21)
Entonces oí una voz del cielo que decía: "Escribe: 'Bienaventurados los muertos que de aquí en adelante mueren en el Señor.'" "Sí," dice el Espíritu, "para que descansen de sus trabajos, porque sus obras van con ellos." (Apocalipsis 14:13)
Así que felicité a los muertos, los que ya murieron, Más que a los vivos, los que aún viven. (Eclesiastés 4:2)
Allí los impíos dejan de sentir ira, Y allí reposan los cansados. (Job 3:17)
Es como el óleo precioso sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, Que desciende hasta el borde de sus vestiduras. (Salmos 133:2)
Les daré en Mi casa y en Mis muros un lugar, Y un nombre mejor que el de hijos e hijas. Les daré nombre eterno que nunca será borrado. (Isaías 56:5)