Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces Dios le dijo: "No te acerques aquí. Quítate las sandalias de los pies, porque el lugar donde estás parado es tierra santa." (Éxodo 3:5)
Y añadió: "Yo soy el Dios de tu padre, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob." Entonces Moisés se cubrió el rostro, porque tenía temor de mirar a Dios. (Éxodo 3:6)
Y el SEÑOR dijo: "Ciertamente he visto la aflicción de Mi pueblo que está en Egipto, y he escuchado su clamor a causa de sus capataces, pues estoy consciente de sus sufrimientos. (Éxodo 3:7)
Así que he descendido para librarlos de mano de los Egipcios, y para sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y espaciosa, a una tierra que mana leche y miel, al lugar de los Cananeos, de los Hititas, de los Amorreos, de los Ferezeos, de los Heveos y de los Jebuseos.
Y ahora, el clamor de los Israelitas ha llegado hasta Mí, y además he visto la opresión con que los Egipcios los oprimen. (Éxodo 3:9)
Ahora pues, ven y te enviaré a Faraón, para que saques a Mi pueblo, a los Israelitas, de Egipto." (Éxodo 3:10)
Pero Moisés dijo a Dios: "¿Quién soy yo para ir a Faraón, y sacar a los Israelitas de Egipto?" (Éxodo 3:11)

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Éxodo 3:8 - Referencia Cruzada

y cómo es la tierra en que viven, si es buena o mala; y cómo son las ciudades en que habitan, si son como campamentos abiertos o con fortificaciones; (Números 13:19)
y hablaron a toda la congregación de los Israelitas y dijeron: "La tierra por la que pasamos para reconocerla es una tierra buena en gran manera. (Números 14:7)
para que prolonguen sus días en la tierra que el SEÑOR juró dar a sus padres y a su descendencia, una tierra que mana leche y miel. (Deuteronomio 11:9)
También inclinó los cielos, y descendió Con densas tinieblas debajo de Sus pies. (Salmos 18:9)
y nos ha traído a este lugar y nos ha dado esta tierra, una tierra que mana leche y miel. (Deuteronomio 26:9)
En aquel día el SEÑOR hizo un pacto con Abram, diciendo: "A tu descendencia he dado esta tierra, Desde el río de Egipto hasta el río grande, el Río Eufrates: (Génesis 15:18)
y escribirás en ellas todas las palabras de esta ley, cuando hayas pasado, para entrar en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da, una tierra que mana leche y miel, tal como el SEÑOR, el Dios de tus padres te prometió. (Deuteronomio 27:3)
Me invocará, y le responderé; Yo estaré con él en la angustia; Lo rescataré y lo honraré; (Salmos 91:15)
Si los afliges y ellos claman a Mí, ciertamente Yo escucharé su clamor, (Éxodo 22:23)
para confirmar el juramento que juré a sus padres, de darles una tierra que mana leche y miel, como lo es hoy."'" Entonces respondí: "Amén, SEÑOR." (Jeremías 11:5)
Aquel día les juré que los sacaría de la tierra de Egipto a una tierra que Yo había escogido para ellos, que mana leche y miel y que es la más hermosa de todas las tierras. (Ezequiel 20:6)
¡Oh, si rasgaras los cielos y descendieras! Si los montes se estremecieran ante Tu presencia (Isaías 64:1)
En Ti confiaron nuestros padres; Confiaron, y Tú los libraste. (Salmos 22:4)
Pero Yo también juzgaré a la nación a la cual servirán, y después saldrán de allí con grandes riquezas. (Génesis 15:14)
Hallaste fiel su corazón delante de Ti, E hiciste con él un pacto Para darle la tierra del Cananeo, Del Hitita, del Amorreo, Del Ferezeo, del Jebuseo y del Gergeseo, Para darla a su descendencia. Y has cumplido Tu palabra, porque eres justo. (Nehemías 9:8)
También les diste reinos y pueblos, Y se los repartiste con sus límites. Tomaron posesión de la tierra de Sehón, rey de Hesbón, Y la tierra de Og, rey de Basán. (Nehemías 9:22)
Enviaré un ángel delante de ti, y echaré fuera a los Cananeos, a los Amorreos, a los Hititas, a los Ferezeos, a los Heveos y a los Jebuseos. (Éxodo 33:2)
Observa lo que te mando hoy: Voy a echar de delante de ti a los Amorreos, a los Cananeos, a los Hititas, a los Ferezeos, a los Heveos y a los Jebuseos. (Éxodo 34:11)
Y le contaron a Moisés, y le dijeron: "Fuimos a la tierra adonde nos enviaste; ciertamente mana leche y miel, y éste es el fruto de ella. (Números 13:27)
Cuando el SEÑOR tu Dios te haya introducido en la tierra donde vas a entrar para poseerla y haya echado de delante de ti a muchas naciones: los Hititas, los Gergeseos, los Amorreos, los Cananeos, los Ferezeos, los Heveos y los Jebuseos, siete naciones más grandes y más poderosas que tú, (Deuteronomio 7:1)
Vamos, bajemos y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el lenguaje del otro." (Génesis 11:7)
Por la desolación del afligido, por los gemidos del menesteroso, Me levantaré ahora," dice el SEÑOR; "lo pondré en la seguridad que anhela." (Salmos 12:5)
Porque el SEÑOR tu Dios te trae a una tierra buena, a una tierra de corrientes de aguas, de fuentes y manantiales que fluyen por valles y colinas; (Deuteronomio 8:7)
Y he dicho: Los sacaré de la aflicción de Egipto a la tierra del Cananeo, del Hitita, del Amorreo, del Ferezeo, del Heveo y del Jebuseo, a una tierra que mana leche y miel."' (Éxodo 3:17)
El SEÑOR te hará abundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu ganado y en el producto de tu suelo, en la tierra que el SEÑOR juró a tus padres que te daría. (Deuteronomio 28:11)
Y sucedió que cuando se enteraron todos los reyes que estaban al otro lado del Jordán, en los montes, en los valles y en toda la costa del Mar Grande hacia el Líbano, los reyes de los Hititas, Amorreos, Cananeos, Ferezeos, Heveos y Jebuseos, (Josué 9:1)
Y José dijo a sus hermanos: "Yo voy a morir, pero Dios ciertamente cuidará de ustedes y los hará subir de esta tierra a la tierra que El prometió en juramento a Abraham, a Isaac y a Jacob." (Génesis 50:24)
Y el SEÑOR dijo a Abram después que Lot se había separado de él: "Alza ahora los ojos y mira desde el lugar donde estás hacia el norte, el sur, el oriente y el occidente, (Génesis 13:14)
Porque he descendido del cielo, no para hacer Mi voluntad, sino la voluntad del que Me envió. (Juan 6:38)
Y aquel mismo día, el SEÑOR sacó a los Israelitas de la tierra de Egipto por sus ejércitos. (Éxodo 12:51)
Pero el SEÑOR descendió para ver la ciudad y la torre que habían edificado los hijos de los hombres. (Génesis 11:5)
Yo los traje a ustedes a una tierra fértil, Para que comieran de su fruto y de sus delicias. Pero vinieron y contaminaron Mi tierra, Y de Mi heredad hicieron abominación. (Jeremías 2:7)
y les diste esta tierra, que habías jurado dar a sus padres, tierra que mana leche y miel. (Jeremías 32:22)
Por tanto, dile a los Israelitas: 'Yo soy el SEÑOR, y los sacaré de debajo de las cargas de los Egipcios. Los libraré de su esclavitud, y los redimiré con brazo extendido y con grandes juicios. (Éxodo 6:6)
Nadie ha subido al cielo, sino Aquél que bajó del cielo, es decir, el Hijo del Hombre que está en el cielo. (Juan 3:13)
Vuélvanse; pónganse en marcha y vayan a la región montañosa de los Amorreos, y a todos sus vecinos, en el Arabá, en la región montañosa, en el valle, en el Neguev (la región del sur), y por la costa del mar, la tierra de los Cananeos y el Líbano, hasta el gran río, el Río Eufrates. (Deuteronomio 1:7)
Entonces tomaron en sus manos del fruto de la tierra y nos lo trajeron; y nos dieron un informe y dijeron: 'Es una tierra buena que el SEÑOR nuestro Dios nos da.' (Deuteronomio 1:25)
Prueben y vean que el SEÑOR es bueno. ¡Cuán bienaventurado es el hombre que en El se refugia! (Salmos 34:8)
Descenderé ahora y veré si han hecho en todo conforme a su clamor, el cual ha llegado hasta Mí. Y si no, lo sabré." (Génesis 18:21)
Y será que cuando el SEÑOR te lleve a la tierra del Cananeo, del Hitita, del Amorreo, del Heveo y del Jebuseo, la cual juró a tus padres que te daría, tierra que mana leche y miel, celebrarás esta ceremonia en este mes. (Éxodo 13:5)