Alégranos conforme a los días que nos afligiste, Y a los años en que vimos adversidad.
(Salmos 90:15)Sea manifestada Tu obra a Tus siervos, Y Tu majestad a sus hijos,
(Salmos 90:16)Y sea la gracia del Señor nuestro Dios sobre nosotros. Confirma, pues, sobre nosotros la obra de nuestras manos; Sí, la obra de nuestras manos confirma.
(Salmos 90:17)El que habita al amparo del Altísimo Morará a la sombra del Omnipotente.
Diré yo al SEÑOR: "Refugio mío y fortaleza mía, Mi Dios, en quien confío."
(Salmos 91:2)Porque El te libra del lazo del cazador Y de la pestilencia mortal.
(Salmos 91:3)Con Sus plumas te cubre, Y bajo Sus alas hallas refugio; Escudo y baluarte es Su fidelidad.
(Salmos 91:4)Otras publicaciones relacionadas con "Salmos 91:1":
Salmos 91:1 - Referencia Cruzada
Porque Tú has sido refugio para mí, Torre fuerte frente al enemigo.
(Salmos 61:3)Cada uno será como refugio contra el viento Y un abrigo (amparo) contra la tormenta, Como corrientes de agua en tierra seca, Como la sombra de una gran peña en tierra árida.
(Isaías 32:2)Oración de Moisés, hombre de Dios. Señor, Tú has sido un refugio para nosotros De generación en generación.
(Salmos 90:1)Guárdame como a la niña de Tus ojos; Escóndeme a la sombra de Tus alas
(Salmos 17:8)¡Cuán preciosa es, oh Dios, Tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se refugian a la sombra de Tus alas.
(Salmos 36:7)Y la zarza dijo a los árboles: 'Si en verdad me ungen por rey sobre ustedes, vengan y refúgiense a mi sombra; y si no, salga fuego de la zarza y consuma los cedros del Líbano.'
(Jueces 9:15)Todo aquél que confiesa que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él y él en Dios.
(1 Juan 4:15)Pero yo soy como olivo verde en la casa de Dios; En la misericordia de Dios confío eternamente y para siempre.
(Salmos 52:8)Porque en el día de la angustia me esconderá en Su tabernáculo; En lo secreto de Su tienda me ocultará; Sobre una roca me pondrá en alto.
(Salmos 27:5)Por tanto, di: 'Así dice el Señor DIOS: "Aunque los había echado lejos entre las naciones, y aunque Yo los había dispersado por las tierras, sin embargo fui para ellos un santuario por poco tiempo en las tierras adonde habían ido."'
(Ezequiel 11:16)Porque Tú has sido baluarte para el desvalido, Baluarte para el necesitado en su angustia, Refugio contra la tormenta, sombra contra el calor. Pues el aliento de los crueles Es como turbión contra el muro.
(Isaías 25:4)El SEÑOR es tu guardador; El SEÑOR es tu sombra a tu mano derecha.
(Salmos 121:5)El aliento de nuestras vidas, el ungido del SEÑOR, Fue atrapado en sus fosos, Aquél de quien habíamos dicho: "A su sombra Viviremos entre las naciones."
(Lamentaciones 4:20)entonces el SEÑOR creará sobre todo lugar del Monte Sion y sobre sus asambleas, una nube durante el día, o sea humo, y un resplandor de llamas de fuego por la noche; porque sobre toda la gloria habrá un dosel.
(Isaías 4:5)Seré como rocío para Israel; Florecerá como lirio, Y extenderá sus raíces como los cedros del Líbano.
(Oseas 14:5)En prosperidad habitará su alma, Y su descendencia poseerá la tierra.
(Salmos 25:13)Entonces El vendrá a ser santuario; Pero piedra de tropiezo y roca de escándalo Para ambas casas de Israel, Y lazo y trampa para los habitantes de Jerusalén.
(Isaías 8:14)De las conspiraciones de los hombres Tú los escondes en lo secreto de Tu presencia; En un refugio los pondrás a cubierto de los enredos de las lenguas.
(Salmos 31:20)Como el manzano entre los árboles del bosque, Así es mi amado entre los jóvenes. A su sombra placentera me he sentado, Y su fruto es dulce a mi paladar.
(Cantares 2:3)Tú eres mi escondedero; de la angustia me preservarás; Con cánticos de liberación me rodearás. (Selah)
(Salmos 32:7)David reunió en Jerusalén a todos los oficiales de Israel, los jefes de las tribus, los capitanes de las divisiones que servían al rey, los capitanes de millares, los capitanes de centenas y los administradores de toda la hacienda y del ganado del rey y de sus hijos, con los oficiales y los poderosos, es decir, a todos los hombres valientes.
(1 Crónicas 28:1)Para el director del coro; según tonada de "No Destruyas." Mictam de David, en la cueva, cuando huía de Saúl. Ten piedad de mí, oh Dios, ten piedad de mí, Porque en Ti se refugia mi alma; En la sombra de Tus alas me ampararé Hasta que la destrucción pase.
(Salmos 57:1)