Nueva Biblia Latinoamericana
Como con médula y grasa está saciada mi alma; Y con labios jubilosos Te alaba mi boca. (Salmos 63:5)
Cuando en mi lecho me acuerdo de Ti, En Ti medito durante las vigilias de la noche. (Salmos 63:6)
Porque Tú has sido mi ayuda, Y a la sombra de Tus alas canto gozoso. (Salmos 63:7)
A Ti se aferra mi alma; Tu diestra me sostiene.
Pero los que buscan mi vida para destruirla, Caerán a las profundidades de la tierra. (Salmos 63:9)
Serán entregados al poder de la espada; Presa serán de las zorras. (Salmos 63:10)
Pero el rey se regocijará en Dios; Y todo el que por El jura se gloriará, Porque la boca de los que dicen mentiras será cerrada. (Salmos 63:11)

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Salmos 63:8 - Referencia Cruzada

sin embargo, porque esta viuda me molesta, le haré justicia; no sea que por venir continuamente me agote la paciencia.'" (Lucas 18:5)
Así que, amados míos, tal como siempre han obedecido, no sólo en mi presencia, sino ahora mucho más en mi ausencia, ocúpense en su salvación con temor y temblor. (Filipenses 2:12)
Que su izquierda esté bajo mi cabeza Y su derecha me abrace." (Cantares 2:6)
A Ti extiendo mis manos; Mi alma Te anhela como la tierra sedienta. (Selah) (Salmos 143:6)
Esfuércense por entrar por la puerta estrecha, porque les digo que muchos tratarán de entrar y no podrán. (Lucas 13:24)
En cuanto a mí, me mantienes en mi integridad, Y me afirmas en Tu presencia para siempre. (Salmos 41:12)
Entonces el hombre dijo: "Suéltame porque raya el alba." "No te soltaré si no me bendices," le respondió Jacob. (Génesis 32:26)
Con este fin también trabajo, esforzándome según Su poder que obra poderosamente en mí. (Colosenses 1:29)
Este es Mi Siervo, a quien Yo sostengo, Mi escogido, en quien Mi alma se complace. He puesto Mi Espíritu sobre El; El traerá justicia a las naciones. (Isaías 42:1)
Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo conquistan por la fuerza. (Mateo 11:12)
Y toda obra que emprendió en el servicio de la casa de Dios por ley y por mandamiento, buscando a su Dios, lo hizo con todo su corazón y prosperó. (2 Crónicas 31:21)
Si digo: "Mi pie ha resbalado," Tu misericordia, oh SEÑOR, me sostendrá. (Salmos 94:18)
Me levantaré ahora, y andaré por la ciudad; Por las calles y por las plazas Buscaré al que ama mi alma.' Lo busqué, pero no lo hallé. (Cantares 3:2)
Tú me has dado también el escudo de Tu salvación; Tu diestra me sostiene, Y Tu benevolencia me engrandece. (Salmos 18:35)
¿A quién tengo yo en los cielos, sino a Ti? Fuera de Ti, nada deseo en la tierra. (Salmos 73:25)
Cuando caiga, no quedará derribado, Porque el SEÑOR sostiene su mano. (Salmos 37:24)
No temas, porque Yo estoy contigo; No te desalientes, porque Yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, Sí, te sostendré con la diestra de Mi justicia. (Isaías 41:10)
Sin embargo, yo siempre estoy contigo; Tú me has tomado de la mano derecha. (Salmos 73:23)
En la noche Te desea mi alma, En verdad mi espíritu dentro de mí Te busca con diligencia. Porque cuando la tierra tiene conocimiento de Tus juicios, Aprenden justicia los habitantes del mundo. (Isaías 26:9)