Aun mi íntimo amigo en quien yo confiaba, El que de mi pan comía, Contra mí ha levantado su talón.
(Salmos 41:9)
Pero Tú, oh SEÑOR, ten piedad de mí y levántame, Para que yo les pague como se merecen.
(Salmos 41:10)
En esto sabré que conmigo Te complaces, Que mi enemigo no cante victoria sobre mí.
(Salmos 41:11)
En cuanto a mí, me mantienes en mi integridad, Y me afirmas en Tu presencia para siempre.
Bendito sea el SEÑOR, Dios de Israel, Desde la eternidad hasta la eternidad. Amén y amén.
(Salmos 41:13)
Para el director del coro. Masquil de los hijos de Coré. Como el ciervo anhela las corrientes de agua, Así suspira por Ti, oh Dios, el alma mía.
(Salmos 42:1)
Mi alma tiene sed de Dios, del Dios viviente; ¿Cuándo vendré y me presentaré delante de Dios?
(Salmos 42:2)
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Salmos 41:12 - Referencia Cruzada
En cuanto a mí, en justicia contemplaré Tu rostro; Al despertar, me saciaré cuando contemple Tu semblante.
(Salmos 17:15)
No aparta Sus ojos de los justos, Y con los reyes sobre el trono Los ha sentado para siempre, y son ensalzados.
(Job 36:7)
Me darás a conocer la senda de la vida; En Tu presencia hay plenitud de gozo; En Tu diestra hay deleites para siempre.
(Salmos 16:11)
Si digo: "Mi pie ha resbalado," Tu misericordia, oh SEÑOR, me sostendrá.
(Salmos 94:18)
La integridad y la rectitud me preserven, Porque en Ti espero.
(Salmos 25:21)
Los ojos del SEÑOR están sobre los justos, Y Sus oídos atentos a su clamor.
(Salmos 34:15)
A Ti se aferra mi alma; Tu diestra me sostiene.
(Salmos 63:8)
Sin embargo, yo siempre estoy contigo; Tú me has tomado de la mano derecha.
(Salmos 73:23)
Porque los brazos de los impíos serán quebrados, Pero el SEÑOR sostiene a los justos.
(Salmos 37:17)
Padre, quiero que los que Me has dado, estén también conmigo donde Yo estoy, para que vean Mi gloria, la gloria que Me has dado; porque Me has amado desde antes de la fundación del mundo.
(Juan 17:24)