Se levantan testigos malvados, Y de lo que no sé me preguntan.
(Salmos 35:11)Me devuelven mal por bien Para aflicción de mi alma.
(Salmos 35:12)Pero yo, cuando ellos estaban enfermos, vestía de cilicio; Humillé mi alma con ayuno, Y mi oración se repetía en mi pecho.
(Salmos 35:13)Como por mi amigo, como por mi hermano, andaba de aquí para allá; Como el que está de duelo por la madre, enlutado me encorvaba.
Pero ellos se alegraron en mi tropiezo, y se reunieron; Los agresores, a quienes no conocía, se juntaron contra mí; Me despedazaban sin cesar.
(Salmos 35:15)Como bufones impíos en una fiesta, Rechinaban sus dientes contra mí.
(Salmos 35:16)¿Hasta cuándo, Señor, estarás mirando? Rescata mi alma de sus estragos, Mi única vida de los leones.
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Salmos 35:14 - Referencia Cruzada
Estoy encorvado y abatido en gran manera, Y ando sombrío todo el día.
(Salmos 38:6)Entonces Isaac la trajo a la tienda de su madre Sara, y tomó a Rebeca y ella fue su mujer, y la amó. Así se consoló Isaac después de la muerte de su madre.
(Génesis 24:67)Cuando Jesús se acercó, al ver la ciudad, lloró sobre ella,
(Lucas 19:41)Entonces David entonó esta elegía por Saúl y por su hijo Jonatán,
(2 Samuel 1:17)Entonces David agarró sus ropas y las rasgó, y así hicieron también todos los hombres que estaban con él.
(2 Samuel 1:11)