Nueva Biblia Latinoamericana
Se levantan testigos malvados, Y de lo que no sé me preguntan. (Psalm 35:11)
Me devuelven mal por bien Para aflicción de mi alma. (Psalm 35:12)
Pero yo, cuando ellos estaban enfermos, vestía de cilicio; Humillé mi alma con ayuno, Y mi oración se repetía en mi pecho. (Psalm 35:13)
Como por mi amigo, como por mi hermano, andaba de aquí para allá; Como el que está de duelo por la madre, enlutado me encorvaba.
Pero ellos se alegraron en mi tropiezo, y se reunieron; Los agresores, a quienes no conocía, se juntaron contra mí; Me despedazaban sin cesar. (Psalm 35:15)
Como bufones impíos en una fiesta, Rechinaban sus dientes contra mí. (Psalm 35:16)
¿Hasta cuándo, Señor, estarás mirando? Rescata mi alma de sus estragos, Mi única vida de los leones. (Psalm 35:17)

Other publications related to "Psalm 35:14":

Dr. Roberto Miranda
The tests will come
Learn how to face trials and difficulties as Gods children and use them as an instrument for blessing and growth. Dr. Roberto Miranda shares insights from 2 Kings 4:1-7.


Dr. Roberto Miranda
We must bear witness to our God anywhere
Dr. Roberto Miranda discusses the importance of remaining faithful and bearing witness to God, even in times of difficulty and pain.


Psalm 35:14 - Cross Reference

Estoy encorvado y abatido en gran manera, Y ando sombrío todo el día. (Psalm 38:6)
Entonces Isaac la trajo a la tienda de su madre Sara, y tomó a Rebeca y ella fue su mujer, y la amó. Así se consoló Isaac después de la muerte de su madre. (Genesis 24:67)
Cuando Jesús se acercó, al ver la ciudad, lloró sobre ella, (Luke 19:41)
Entonces David entonó esta elegía por Saúl y por su hijo Jonatán, (2 Samuel 1:17)
Entonces David agarró sus ropas y las rasgó, y así hicieron también todos los hombres que estaban con él. (2 Samuel 1:11)