Nueva Biblia Latinoamericana
¿Qué provecho hay en mi sangre (mi muerte) si desciendo al sepulcro? ¿Acaso Te alabará el polvo? ¿Anunciará Tu fidelidad? (Salmos 30:9)
Escucha, oh SEÑOR, y ten piedad de mí; Oh SEÑOR, sé Tú mi ayuda." (Salmos 30:10)
Tú has cambiado mi lamento en danza; Has desatado mi ropa de luto y me has ceñido de alegría; (Salmos 30:11)
Para que mi alma Te cante alabanzas y no esté callada. Oh SEÑOR, Dios mío, Te daré gracias por siempre.
Para el director del coro. Salmo de David. En Ti, oh SEÑOR, me refugio; Jamás sea yo avergonzado; Líbrame en Tu justicia. (Salmos 31:1)
Inclina a mí Tu oído, rescátame pronto; Sé para mí roca fuerte, Fortaleza para salvarme. (Salmos 31:2)
Porque Tú eres mi roca y mi fortaleza, Y por amor de Tu nombre me conducirás y me guiarás. (Salmos 31:3)

Otras publicaciones relacionadas con "Salmos 30:12":

Dr. Roberto Miranda
Espera al Señor pacientemente
Aprende a esperar pacientemente en Dios y mantener tu fe y confianza en Él, a pesar de las pruebas y dificultades que enfrentes. Sé fiel a Él y otros verán tu testimonio y confiarán en Dios.


Charles Spurgeon
Los consuelos del Señor
Artículo sobre la promesa de Dios de tener misericordia para con los afligidos y la importancia de adorarle con corazones creyentes.


Salmos 30:12 - Referencia Cruzada

Pero El respondió: "Les digo que si éstos se callan, las piedras clamarán." (Lucas 19:40)
Los cuatro seres vivientes, cada uno de ellos con seis alas, estaban llenos de ojos alrededor y por dentro, y día y noche no cesaban de decir: "SANTO, SANTO, SANTO, es EL SEÑOR DIOS, EL TODOPODEROSO, el que era, el que es y el que ha de venir." (Apocalipsis 4:8)
Cantaré al SEÑOR, Porque me ha llenado de bienes. (Salmos 13:6)
Por tanto, mi corazón se alegra y mi alma se regocija; También mi carne morará segura, (Salmos 16:9)
Porque nosotros no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído." (Hechos 4:20)
Darán voces de júbilo mis labios, cuando Te cante alabanzas, Y mi alma, que Tú has redimido. (Salmos 71:23)
En Dios nos hemos gloriado todo el día. Por siempre alabaremos Tu nombre. (Selah) (Salmos 44:8)
En su consejo no entre mi alma, A su asamblea no se una mi gloria, Porque en su ira mataron hombres, Y en su terquedad mutilaron bueyes. (Génesis 49:6)
diciendo: "¡Amén! La bendición, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, el honor, el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén." (Apocalipsis 7:12)
¡Despierta, gloria mía! ¡Despierten, arpa y lira! ¡A la aurora despertaré! (Salmos 57:8)
Pero yo esperaré continuamente, Y aún Te alabaré más y más. (Salmos 71:14)
¡Aleluya! Oh alma mía, alaba al SEÑOR. (Salmos 146:1)
Todos los días Te bendeciré, Y alabaré Tu nombre eternamente y para siempre. (Salmos 145:2)