Oh SEÑOR, con Tu favor has hecho que mi monte permanezca fuerte; Tú escondiste Tu rostro, fui conturbado.
(Salmos 30:7)A Ti, oh SEÑOR, clamé, Y al Señor dirigí mi súplica:
(Salmos 30:8)¿Qué provecho hay en mi sangre (mi muerte) si desciendo al sepulcro? ¿Acaso Te alabará el polvo? ¿Anunciará Tu fidelidad?
(Salmos 30:9)Escucha, oh SEÑOR, y ten piedad de mí; Oh SEÑOR, sé Tú mi ayuda."
Tú has cambiado mi lamento en danza; Has desatado mi ropa de luto y me has ceñido de alegría;
(Salmos 30:11)Para que mi alma Te cante alabanzas y no esté callada. Oh SEÑOR, Dios mío, Te daré gracias por siempre.
(Salmos 30:12)Para el director del coro. Salmo de David. En Ti, oh SEÑOR, me refugio; Jamás sea yo avergonzado; Líbrame en Tu justicia.
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Salmos 30:10 - Referencia Cruzada
Escucha, oh SEÑOR, mi voz cuando clamo; Ten piedad de mí, y respóndeme.
(Salmos 27:7)Pero Dios es el que me ayuda; El Señor es el que sostiene mi alma.
(Salmos 54:4)Respóndeme pronto, oh SEÑOR, porque mi espíritu desfallece; No escondas de mí Tu rostro, Para que no llegue yo a ser como los que descienden a la sepultura.
(Salmos 143:7)El SEÑOR es mi fuerza y mi escudo; En El confía mi corazón, y soy socorrido; Por tanto, mi corazón se regocija, Y Le daré gracias con mi cántico.
(Salmos 28:7)Para el director del coro. Salmo de David, cuando después que se llegó a Betsabé, el profeta Natán lo visitó. Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a Tu misericordia; Conforme a lo inmenso de Tu compasión, borra mis transgresiones.
(Salmos 51:1)Salmo de David. Oh SEÑOR, escucha mi oración, Presta oído a mis súplicas, Respóndeme por Tu fidelidad, por Tu justicia;
(Salmos 143:1)