Nueva Biblia Latinoamericana
Tú has cambiado mi lamento en danza; Has desatado mi ropa de luto y me has ceñido de alegría; (Salmos 30:11)
Para que mi alma Te cante alabanzas y no esté callada. Oh SEÑOR, Dios mío, Te daré gracias por siempre. (Salmos 30:12)
Para el director del coro. Salmo de David. En Ti, oh SEÑOR, me refugio; Jamás sea yo avergonzado; Líbrame en Tu justicia. (Salmos 31:1)
Inclina a mí Tu oído, rescátame pronto; Sé para mí roca fuerte, Fortaleza para salvarme.
Porque Tú eres mi roca y mi fortaleza, Y por amor de Tu nombre me conducirás y me guiarás. (Salmos 31:3)
Me sacarás de la red que en secreto me han tendido; Porque Tú eres mi refugio. (Salmos 31:4)
En Tu mano encomiendo mi espíritu; Tú me has redimido, oh SEÑOR, Dios de verdad. (Salmos 31:5)

Otras publicaciones relacionadas con "Salmos 31:2":

Charles Spurgeon
Los consuelos del Señor
Artículo sobre la promesa de Dios de tener misericordia para con los afligidos y la importancia de adorarle con corazones creyentes.


Andrés Cisterna
Con todo me gozaré en el Dios de mi salvación
El mensaje del pastor es que debemos celebrar y alegrarnos en el Señor, ya que Dios es un Dios de alegrías y fiestas.


Salmos 31:2 - Referencia Cruzada

Porque has puesto al SEÑOR, que es mi refugio, Al Altísimo, por tu habitación. (Salmos 91:9)
No escondas de mí Tu rostro en el día de mi angustia; Inclina hacia mí Tu oído; El día en que Te invoco, respóndeme pronto. (Salmos 102:2)
Respóndeme pronto, oh SEÑOR, porque mi espíritu desfallece; No escondas de mí Tu rostro, Para que no llegue yo a ser como los que descienden a la sepultura. (Salmos 143:7)
Líbrame en Tu justicia, y rescátame; Inclina a mí Tu oído, y sálvame. (Salmos 71:2)
Todo aquél que confiesa que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él y él en Dios. (1 Juan 4:15)
Y no escondas Tu rostro de Tu siervo, Porque estoy en angustia; respóndeme pronto. (Salmos 69:17)
¡Señor, oye mi voz! Estén atentos Tus oídos A la voz de mis súplicas. (Salmos 130:2)
Les digo que pronto les hará justicia. No obstante, cuando el Hijo del Hombre venga, ¿hallará fe en la tierra?" (Lucas 18:8)
Oración de David. Inclina, oh SEÑOR, Tu oído y respóndeme, Porque estoy afligido y necesitado. (Salmos 86:1)
Para el director del coro. Salmo de David, siervo del SEÑOR, el cual dirigió al SEÑOR las palabras de este cántico el día que el SEÑOR lo libró de la mano de todos sus enemigos, y de la mano de Saúl. Y dijo: "Yo Te amo, SEÑOR, fortaleza mía." (Salmos 18:1)
Por cuanto yo estoy afligido y necesitado, El Señor me tiene en cuenta. Tú eres mi ayuda y mi libertador; Dios mío, no Te tardes. (Salmos 40:17)
A Dios nunca Lo ha visto nadie. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros y Su amor se perfecciona en nosotros. (1 Juan 4:12)
Salmo de Asaf. Oh Dios, las naciones han invadido Tu heredad; Han profanado Tu santo templo; Han dejado a Jerusalén en ruinas. (Salmos 79:1)
Pero el SEÑOR ha sido mi baluarte, Y mi Dios la roca de mi refugio. (Salmos 94:22)
Oración de Moisés, hombre de Dios. Señor, Tú has sido un refugio para nosotros De generación en generación. (Salmos 90:1)
Ese morará en las alturas, En la peña inconmovible estará su refugio; Se le dará su pan, Tendrá segura su agua. (Isaías 33:16)
El que come Mi carne y bebe Mi sangre, permanece en Mí y Yo en él. (Juan 6:56)
En Dios descansan mi salvación y mi gloria; La roca de mi fortaleza, mi refugio, está en Dios. (Salmos 62:7)
Mi Dios, mi roca en quien me refugio; Mi escudo y el poder de mi salvación, mi altura inexpugnable y mi refugio; Salvador mío, Tú me salvas de la violencia. (2 Samuel 22:3)
Inclina tu oído y oye las palabras de los sabios, Y aplica tu corazón a mi conocimiento; (Proverbios 22:17)
En verdad, su roca no es como nuestra Roca; Aun nuestros mismos enemigos así lo juzgan. (Deuteronomio 32:31)
Entonces, ¿por qué no perdonas mi transgresión Y quitas mi iniquidad? Porque ahora dormiré en el polvo; Y Tú me buscarás, pero ya no existiré." (Job 7:21)