Nueva Biblia Latinoamericana
Destruyeron las ciudades, y cada uno arrojó su piedra en toda parcela de tierra buena, y las llenaron. Cegaron todas las fuentes de agua y talaron todos los árboles buenos, hasta dejar en Kir Hareset sólo sus piedras; no obstante, los honderos la rodearon y la destruyeron. (2 Reyes 3:25)
Al ver el rey de Moab que la batalla arreciaba contra él, tomó consigo 700 hombres que sacaban espada, para abrir brecha hacia el rey de Edom, pero no pudieron. (2 Reyes 3:26)
Entonces tomó a su hijo primogénito que había de reinar en su lugar, y lo ofreció en holocausto sobre la muralla. Y hubo gran ira contra los Israelitas, quienes se apartaron de allí y regresaron a su tierra. (2 Reyes 3:27)
Y una mujer de las mujeres de los hijos de los profetas clamó a Eliseo, diciendo: "Su siervo, mi marido, ha muerto, y usted sabe que su siervo temía al SEÑOR; y ha venido el acreedor a tomar a mis dos hijos para esclavos suyos."
Y Eliseo le dijo: "¿Qué puedo hacer por ti? Dime qué tienes en casa." Y ella respondió: "Su sierva no tiene en casa más que una vasija de aceite." (2 Reyes 4:2)
Entonces Eliseo le dijo: "Ve, pide vasijas prestadas por todas partes de todos tus vecinos, vasijas vacías; no pidas pocas. (2 Reyes 4:3)
Luego entra y cierra la puerta detrás de ti y de tus hijos y echas el aceite en todas estas vasijas, poniendo aparte las que estén llenas." (2 Reyes 4:4)

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2 Reyes 4:1 - Referencia Cruzada

Y el ángel dijo: "No extiendas tu mano contra el muchacho, ni le hagas nada. Porque ahora sé que temes (reverencias) a Dios, ya que no Me has rehusado tu hijo, tu único." (Génesis 22:12)
Así también Mi Padre celestial hará con ustedes, si no perdonan de corazón cada uno a su hermano." (Mateo 18:35)
puse al frente de Jerusalén a mi hermano Hananí y a Hananías, jefe de la fortaleza, porque éste era hombre fiel y temeroso de Dios más que muchos. (Nehemías 7:2)
La conclusión, cuando todo se ha oído, es ésta: Teme a Dios y guarda Sus mandamientos, Porque esto concierne a toda persona. (Eclesiastés 12:13)
Y del trono salió una voz que decía: "Alaben ustedes a nuestro Dios, todos ustedes Sus siervos, Los que Le temen, los pequeños y los grandes." (Apocalipsis 19:5)
Pero no teniendo él con qué pagar, su señor ordenó que lo vendieran, junto con su mujer e hijos y todo cuanto poseía, y así pagara la deuda. (Mateo 18:25)
El SEÑOR favorece a los que Le temen, A los que esperan en Su misericordia. (Salmos 147:11)
Entonces los hijos de los profetas que estaban en Betel salieron al encuentro de Eliseo y le dijeron: "¿Sabes que hoy el SEÑOR va a quitarte a tu señor?" Y él dijo: "Sí, yo lo sé; cállense." (2 Reyes 2:3)
También los hijos de los profetas que estaban en Jericó se acercaron a Eliseo y le dijeron: "¿Sabes que hoy el SEÑOR va a quitarte a tu señor?" Y él respondió: "Sí, yo lo sé; cállense." (2 Reyes 2:5)
Aunque el pecador haga el mal cien veces y alargue su vida , con todo, yo sé que les irá bien a los que temen a Dios, a los que temen ante Su presencia. (Eclesiastés 8:12)
Cuando Eliseo regresó a Gilgal, había hambre en la tierra. Estando sentados los hijos de los profetas delante de él, dijo a su criado: "Pon la olla grande y prepara un potaje para los hijos de los profetas." (2 Reyes 4:38)
En cuanto a los pueblos de la tierra que traigan mercancías o cualquier clase de grano para vender en el día de reposo, no compraremos de ellos en día de reposo ni en día santo. También renunciaremos a las cosechas del año séptimo y a la exigencia de toda deuda. (Nehemías 10:31)
Si un hermano tuyo llega a ser tan pobre para contigo que se vende a ti, no lo someterás a trabajo de esclavo. (Levítico 25:39)
Porque el juicio será sin misericordia para el que no ha mostrado misericordia. La misericordia triunfa sobre el juicio. (Santiago 2:13)
él tendrá derecho de redención después de ser vendido; uno de sus hermanos podrá redimirlo; (Levítico 25:48)
Y Acab llamó a Abdías que era mayordomo de la casa. (Y Abdías temía (reverenciaba) en gran manera al SEÑOR; (1 Reyes 18:3)
Pero para ustedes que temen (reverencian) Mi nombre, se levantará el sol de justicia con la salud en sus alas; y saldrán y saltarán como terneros del establo. (Malaquías 4:2)
¡Aleluya! Cuán bienaventurado es el hombre que teme al SEÑOR, Que mucho se deleita en Sus mandamientos. (Salmos 112:1)
Hermanos, hijos del linaje de Abraham, y los que entre ustedes temen a Dios, a nosotros nos es enviada la palabra de esta salvación. (Hechos 13:26)
Después de siete años cada uno de ustedes pondrá en libertad al hermano Hebreo que le fue vendido y que le ha servido por seis años, y lo dejará ir libre; pero sus padres no Me escucharon, ni prestaron atención. (Jeremías 34:14)
Entonces los que temían (reverenciaban) al SEÑOR se hablaron unos a otros, y el SEÑOR prestó atención y escuchó, y fue escrito delante de El un libro memorial para los que temen (reverencian) al SEÑOR y para los que estiman Su nombre. (Malaquías 3:16)
Y cierto hombre de los hijos de los profetas dijo a otro por palabra del SEÑOR: "Te ruego que me hieras." Pero el hombre se negó a herirlo. (1 Reyes 20:35)
Todo el que estaba en apuros, todo el que estaba endeudado y todo el que estaba descontento se unió a él, y él vino a ser jefe sobre ellos. Y con él había unos 400 hombres. (1 Samuel 22:2)
Pero la misericordia del SEÑOR es desde la eternidad hasta la eternidad, para los que Le temen, Y su justicia para los hijos de los hijos, (Salmos 103:17)
El bendecirá a los que temen al SEÑOR, Tanto a pequeños como a grandes. (Salmos 115:13)
Porque como están de altos los cielos sobre la tierra, Así es de grande Su misericordia para los que Le temen (reverencian). (Salmos 103:11)
Sin embargo, él no quiso, sino que fue y lo echó en la cárcel hasta que pagara lo que debía. (Mateo 18:30)
Había quienes decían: "Nosotros, nuestros hijos y nuestras hijas somos muchos; por tanto, que se nos dé trigo para que comamos y vivamos." (Nehemías 5:2)
¡Oh Señor! ¿Quién no temerá y glorificará Tu nombre? Pues sólo Tú eres santo; Porque TODAS LAS NACIONES VENDRAN Y ADORARAN EN TU PRESENCIA, Pues Tus justos juicios han sido revelados." (Apocalipsis 15:4)