Pero él abandonó el consejo que le habían dado los ancianos, y pidió consejo a los jóvenes que habían crecido con él y le servían.
(1 Reyes 12:8)
Y les preguntó: "¿Qué aconsejan que respondamos a este pueblo que me ha dicho: 'Aligere el yugo que su padre puso sobre nosotros?'"
(1 Reyes 12:9)
Y los jóvenes que se habían criado con él le respondieron: "Así dirá a este pueblo que le dijo: 'Su padre hizo pesado nuestro yugo; pero usted hágalo más ligero para nosotros.' Así les hablará: 'Mi dedo meñique es más grueso que los lomos de mi padre.
(1 Reyes 12:10)
Por cuanto mi padre los cargó con un pesado yugo, yo añadiré al yugo de ustedes; mi padre los castigó con látigos, pero yo los castigaré con escorpiones.'"
Entonces vino Jeroboam con todo el pueblo a Roboam al tercer día como el rey había dicho, diciendo: "Vuelvan a mí al tercer día."
(1 Reyes 12:12)
El rey respondió con dureza al pueblo, pues había despreciado el consejo que los ancianos le habían dado,
(1 Reyes 12:13)
y les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciéndoles: "Mi padre hizo pesado el yugo de ustedes, pero yo añadiré a su yugo; mi padre los castigó con látigos, pero yo los castigaré con escorpiones."
(1 Reyes 12:14)
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1 Reyes 12:11 - Referencia Cruzada
Ahora pues, vayan y trabajen. Pero no se les dará paja, sin embargo, deben entregar la misma cantidad de ladrillos."
(Éxodo 5:18)
Los Egipcios, pues, obligaron a los Israelitas a trabajar duramente,
(Éxodo 1:13)
y les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciéndoles: "Mi padre hizo pesado el yugo de ustedes, pero yo añadiré a su yugo; mi padre los castigó con látigos, pero yo los castigaré con escorpiones."
(1 Reyes 12:14)
Del humo salieron langostas sobre la tierra, y se les dio poder como tienen poder los escorpiones de la tierra.
(Apocalipsis 9:3)
Pero la nación que ponga su cuello bajo el yugo del rey de Babilonia y le sirva, la dejaré en su tierra," declara el SEÑOR "y la cultivará y habitará en ella."'"
(Jeremías 27:11)
Y tú, hijo de hombre, no temas; no les temas a ellos ni a sus palabras aunque haya contigo cardos y espinas y te sientes en escorpiones. No temas sus palabras ni te atemorices ante ellos, porque son una casa rebelde.
(Ezequiel 2:6)
Miren," añadió Faraón, "el pueblo de la tierra es mucho ahora, ¡y ustedes quieren que ellos cesen en sus labores!"
(Éxodo 5:5)
Ve y habla a Hananías: 'Así dice el SEÑOR: "Has roto yugos de madera, pero en su lugar harás yugos de hierro."
(Jeremías 28:13)
Entonces Asa se irritó contra el vidente y lo metió en la cárcel, porque estaba enojado contra él por esto. Por ese tiempo, Asa oprimió a algunos del pueblo.
(2 Crónicas 16:10)
¿No es éste el ayuno que Yo escogí: Desatar las ligaduras de impiedad, Soltar las coyundas del yugo, Dejar ir libres a los oprimidos, Y romper todo yugo?
(Isaías 58:6)
Ese día clamarán por causa de su rey a quien escogieron para ustedes, pero el SEÑOR no les responderá en ese día."
(1 Samuel 8:18)