Nueva Biblia Latinoamericana
Por cuanto mi padre los cargó con un pesado yugo, yo añadiré al yugo de ustedes; mi padre los castigó con látigos, pero yo los castigaré con escorpiones.'" (1 Reyes 12:11)
Entonces vino Jeroboam con todo el pueblo a Roboam al tercer día como el rey había dicho, diciendo: "Vuelvan a mí al tercer día." (1 Reyes 12:12)
El rey respondió con dureza al pueblo, pues había despreciado el consejo que los ancianos le habían dado, (1 Reyes 12:13)
y les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciéndoles: "Mi padre hizo pesado el yugo de ustedes, pero yo añadiré a su yugo; mi padre los castigó con látigos, pero yo los castigaré con escorpiones."
El rey no escuchó al pueblo, porque lo que había sucedido era del SEÑOR, para que El confirmara la palabra que el SEÑOR había hablado por medio de Ahías el Silonita a Jeroboam, hijo de Nabat. (1 Reyes 12:15)
Cuando todo Israel vio que el rey no les escuchaba, el pueblo respondió al rey: "¿Qué parte tenemos nosotros con David? No tenemos herencia con el hijo de Isaí. ¡A tus tiendas, Israel! ¡Mire ahora por su casa, David!" Y todo Israel se fue a sus tiendas. (1 Reyes 12:16)
Pero en cuanto a los Israelitas que habitaban en las ciudades de Judá, Roboam reinó sobre ellos. (1 Reyes 12:17)

Otras publicaciones relacionadas con "1 Reyes 12:14":

Dr. Roberto Miranda
Guerra Espiritual (Parte 2)
Este artículo habla sobre la importancia de estar alerta y preparados en la guerra espiritual contra el enemigo, rodearnos de gente sabia y madura en el Espíritu Santo para recibir consejo y discernimiento en nuestras decisiones, y ser temerosos de Dios y obedientes a su voluntad. También se menciona la importancia de discernir cuándo es tiempo de perdonar y cuándo es tiempo de actuar con violencia, y se pide a la iglesia que declare la palabra de Dios en seriedad y rectitud.


Dr. Roberto Miranda
Dios no ha terminado de tratar con los líderes de nuestras naciones
El Dr. Roberto Miranda habla sobre el papel de la iglesia en llamar a los líderes nacionales al arrepentimiento y al acercamiento a Dios a través del temor a Él y del poder profético.


1 Reyes 12:14 - Referencia Cruzada

y les amargaron la vida con dura servidumbre en hacer barro y ladrillos y en toda clase de trabajo del campo. Todos sus trabajos se los imponían con rigor. (Éxodo 1:14)
El comienzo del pleito es como el soltar de las aguas; Deja, pues, la riña antes de que empiece. (Proverbios 17:14)
En presencia del rey y de los príncipes, Memucán dijo: "La reina Vasti no sólo ha ofendido al rey sino también a todos los príncipes y a todos los pueblos que están en todas las provincias del rey Asuero. (Ester 1:16)
No se da paja a sus siervos, sin embargo, siguen diciéndonos: 'Hagan ladrillos.' Y además sus siervos son azotados. Pero la culpa es de su pueblo." (Éxodo 5:16)
Los pensamientos de los justos son rectos, Los consejos de los impíos, engañosos. (Proverbios 12:5)
Y los jóvenes que se habían criado con él le respondieron: "Así dirá a este pueblo que le dijo: 'Su padre hizo pesado nuestro yugo; pero usted hágalo más ligero para nosotros.' Así les hablará: 'Mi dedo meñique es más grueso que los lomos de mi padre. (1 Reyes 12:10)
Entonces los cortesanos al servicio del rey, dijeron: "Busquen para el rey muchachas vírgenes y de buen parecer. (Ester 2:2)
Todos los funcionarios del reino, prefectos, sátrapas, altos oficiales y gobernadores, han acordado que el rey promulgue un edicto y ponga en vigor el mandato de que cualquiera que en el término de treinta días haga petición a cualquier dios u hombre fuera de usted, oh rey, sea echado en el foso de los leones. (Daniel 6:7)
Miren," añadió Faraón, "el pueblo de la tierra es mucho ahora, ¡y ustedes quieren que ellos cesen en sus labores!" (Éxodo 5:5)
Hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, como lo había hecho la casa de Acab, porque después de la muerte de su padre ellos fueron sus consejeros para perdición suya. (2 Crónicas 22:4)
Por la soberbia sólo viene la contienda, Pero con los que reciben consejos está la sabiduría. (Proverbios 13:10)
Pero si tienen celos amargos y ambición personal en su corazón, no sean arrogantes y mientan así contra la verdad. (Santiago 3:14)
Delante de la destrucción va el orgullo, Y delante de la caída, la arrogancia de espíritu. (Proverbios 16:18)
No son más que necios los príncipes de Zoán. El consejo de los más sabios consejeros de Faraón se ha vuelto torpe. ¿Cómo dicen a Faraón: 'Yo soy hijo de los sabios, hijo de los antiguos reyes?' (Isaías 19:11)
Mejor es el fin de un asunto que su comienzo; Mejor es la paciencia de espíritu que la arrogancia de espíritu. (Eclesiastés 7:8)