Y se apartó de ellos como a un tiro de piedra, y poniéndose de rodillas, oraba,
(Lucas 22:41)diciendo: "Padre, si es Tu voluntad, aparta de Mí esta copa; pero no se haga Mi voluntad, sino la Tuya."
(Lucas 22:42)Entonces se apareció un ángel del cielo, que Lo fortalecía.
(Lucas 22:43)Y estando en agonía, oraba con mucho fervor; y Su sudor se volvió como gruesas gotas de sangre, que caían sobre la tierra.
Cuando se levantó de orar, fue a los discípulos y los halló dormidos a causa de la tristeza,
(Lucas 22:45)y les dijo: "¿Por qué duermen? Levántense y oren para que no entren en tentación."
(Lucas 22:46)Mientras todavía estaba El hablando, llegó una multitud, y el que se llamaba Judas, uno de los doce apóstoles, iba delante de ellos, y se acercó para besar a Jesús.
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Lucas 22:44 - Referencia Cruzada
Pero quiso el SEÑOR Quebrantarlo, sometiéndolo a padecimiento. Cuando El se entregue a sí mismo como ofrenda de expiación, Verá a Su descendencia, Prolongará Sus días, Y la voluntad del SEÑOR en Su mano prosperará.
(Isaías 53:10)y dijo: "En mi angustia clamé al SEÑOR, Y El me respondió. Desde el seno del Seol (región de los muertos) pedí auxilio, Y Tú escuchaste mi voz.
(Jonás 2:2)Muchos toros me han rodeado; Toros fuertes de Basán me han cercado.
(Salmos 22:12)Cristo, en los días de Su carne, habiendo ofrecido oraciones y súplicas con gran clamor y lágrimas al que Lo podía librar de la muerte, fue oído a causa de Su temor reverente.
(Hebreos 5:7)Jacob se quedó solo, y un hombre luchó con él hasta rayar el alba.
(Génesis 32:24)Ustedes, todos los que pasan por el camino, ¿no les importa esto? Observen y vean si hay dolor como mi dolor, Con el que fui atormentada, Con el que el SEÑOR me afligió el día de Su ardiente ira.
(Lamentaciones 1:12)El que no negó ni a Su propio Hijo, sino que Lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también junto con El todas las cosas?
(Romanos 8:32)Cántico. Salmo de los hijos de Coré. Para el director del coro; sobre Mahalat Leannot. Masquil de Hemán el Ezraíta. Oh SEÑOR, Dios de mi salvación, De día y de noche he clamado delante de Ti.
(Salmos 88:1)Cántico de ascenso gradual. Desde lo más profundo, oh SEÑOR, he clamado a Ti.
(Salmos 130:1)A Ti extiendo mis manos; Mi alma Te anhela como la tierra sedienta. (Selah)
(Salmos 143:6)Sácame del cieno y no dejes que me hunda; Sea yo librado de los que me odian, y de lo profundo de las aguas.
(Salmos 69:14)Ahora Mi alma se ha angustiado; y ¿qué diré: 'Padre, sálvame de esta hora'? Pero para esto he llegado a esta hora.
(Juan 12:27)