Nueva Biblia Latinoamericana
Saliendo Jesús, se encaminó, como de costumbre, hacia el Monte de los Olivos; y los discípulos también Lo siguieron. (Lucas 22:39)
Cuando llegó al lugar, les dijo: "Oren para que no entren en tentación." (Lucas 22:40)
Y se apartó de ellos como a un tiro de piedra, y poniéndose de rodillas, oraba, (Lucas 22:41)
diciendo: "Padre, si es Tu voluntad, aparta de Mí esta copa; pero no se haga Mi voluntad, sino la Tuya."
Entonces se apareció un ángel del cielo, que Lo fortalecía. (Lucas 22:43)
Y estando en agonía, oraba con mucho fervor; y Su sudor se volvió como gruesas gotas de sangre, que caían sobre la tierra. (Lucas 22:44)
Cuando se levantó de orar, fue a los discípulos y los halló dormidos a causa de la tristeza, (Lucas 22:45)

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Lucas 22:42 - Referencia Cruzada

Y adelantándose un poco, cayó sobre Su rostro, orando y diciendo: "Padre Mío, si es posible, que pase de Mí esta copa; pero no sea como Yo quiero, sino como Tú quieras ." (Mateo 26:39)
Apartándose de nuevo, oró por segunda vez, diciendo: "Padre Mío, si esta copa no puede pasar sin que Yo la beba, hágase Tu voluntad." (Mateo 26:42)
Pero Jesús dijo: "No saben lo que piden. ¿Pueden beber la copa que Yo voy a beber?" Ellos respondieron: "Podemos." (Mateo 20:22)
Porque así me ha dicho el SEÑOR, Dios de Israel: "Toma de Mi mano esta copa del vino del furor, y haz que beban de ella todas las naciones a las cuales Yo te envío. (Jeremías 25:15)
¡Despierta, despierta! Levántate, Jerusalén, Tú, que has bebido de la mano del SEÑOR la copa de Su furor, Que has bebido el cáliz del vértigo hasta vaciarlo. (Isaías 51:17)
Me deleito en hacer Tu voluntad, Dios mío; Tu ley está dentro de mi corazón." (Salmos 40:8)
Así dice tu Señor, el SEÑOR tu Dios, Que lucha por Su pueblo: "He quitado de tu mano la copa del vértigo, El cáliz de Mi furor, Nunca más lo beberás. (Isaías 51:22)
Dejándolos de nuevo, se fue y oró por tercera vez, y dijo otra vez las mismas palabras. (Mateo 26:44)
Porque he descendido del cielo, no para hacer Mi voluntad, sino la voluntad del que Me envió. (Juan 6:38)
Jesús le dijo a Pedro: "Mete la espada en la vaina. La copa que el Padre Me ha dado, ¿acaso no he de beberla?" (Juan 18:11)
Y decía: "¡Abba, Padre! Para Ti todas las cosas son posibles; aparta de Mí esta copa, pero no sea lo que Yo quiero, sino lo que Tú quieras ." (Marcus 14:36)
Yo no puedo hacer nada por iniciativa Mía; como oigo, juzgo, y Mi juicio es justo porque no busco Mi voluntad, sino la voluntad del que Me envió. (Juan 5:30)
ENTONCES DIJE: 'AQUI ESTOY, YO HE VENIDO (EN EL ROLLO DEL LIBRO ESTA ESCRITO DE MI) PARA HACER, OH DIOS, TU VOLUNTAD.'" (Hebreos 10:7)
Jesús les dijo: "Mi comida es hacer la voluntad del que Me envió y llevar a cabo Su obra. (Juan 4:34)
Y tomando una copa, después de haber dado gracias, dijo: "Tomen esto y repártanlo entre ustedes; (Lucas 22:17)
Ahora Mi alma se ha angustiado; y ¿qué diré: 'Padre, sálvame de esta hora'? Pero para esto he llegado a esta hora. (Juan 12:27)